Nunca había estado tan atrapado por una persona antes. Nunca había estado tan fuera de control, era a la vez emocionante y aterrador. Su rostro apareció antes que el mio y yo traté de mantener mi expresión neutral. Su mano se deslizó fuera de mi camisa, y me estremecí, mi piel estaba de luto por la perdida.
-Dió un paso atrás- Bien podría ser momento para un poco más de razón y un poco menos de pasión.
Me reí pero por dentro le estaba dando el dedo medio a la razón, ella ya me había gobernado el tiempo suficiente.
Nos dirigimos al estacionamiento y mi lado maniático estaba saliendo al ver eso.
- Te prometo que iré despacio. -negué con la cabeza-
- No creo que pueda hacer esto
- Sólo sujetate a mi, te prometo que te divertirás
- Erick...
- Joel, confía en mi.
Respiré profundamente, creo que podía hacerlo.
- Está bien, pero date prisa antes que cambie de opinión. -su rostro se separó en una sonrisa-
- Qué chico, sujetate a mi
Hice lo que me dijo y no estaba presionado a él, estaba en realidad incrustado. Mi pelvis estaba tan apretada contra su espalda que un vertiginoso mareo me atravesó. Y en eso momento arrancamos, la moto entera desviándose a un lado. Nos estabilizó y luego desaceleró en una señal de Stop.
- Todo bien? Lo siento amor soy un poquito delicado eso es todo. - dijo señalando mis manos presionadas en él-
- Oh. - aflojé mis dedos que prácticamente estaban enterrando-
Tomo mis manos y tiro para que mis antebrazos se cruzarán sobre su estómago y mis brazos estuvieran envueltos alrededor de él completamente.
- Mucho mejor, démosle otra oportunidad.
Con mi mejilla aún contra su espalda trate de calmarme... Sexo, iba a tener sexo, con un chico, un chico caliente, un chico cubano. Qué pasa si vomitaba sobre el chico caliente cubano? Una serie de interrogantes me surgieron.
- Joel?
- Si?
- Podemos bajarnos de la moto cuando quieras. -solto una pequeña carcajada-
- Oh. - quité mis brazos tan rápidamente que perdí el equilibrio, entonces mi pantorrilla rozó una de los tuberías laterales y solté un gran grito. Estaba jodidamente caliente.
- JOEL??? -miro hacia mi pierna en donde ya se veía una roncha roja que se formaba alrededor.
- Oh mierda, vamos amor esperemos que ese cerrajero ya haya llegado.
Por primera vez, eche un vistazo alrededor y me di cuenta de dónde estaba. Estábamos en mi complejo de apartamentos. Vivimos en el mismo complejo de apartamentos! Me debati si debería decir algo mientras caminabamos sobre el tema.
Llegamos a su puerta, sin cerrajero. La piel de mi pantorrilla se sentía caliente, como si estuviera de pie junto a una llama. Erick me lanzo una mirada preocupada y luego sacó su teléfono, se alejó unos centímetros de mí para hablar.
Y me apoye pesadamente en la pared, mientras resistía el dolor. Erick regresó e incluso frunciendo el ceño se veía magnífico.
- Malas noticias. El cerrajero se ha retrasado y no estará aquí hasta mañana. En ese caso será mejor llevarte a Emergencias.
- QUE?? NO!!
Qué diría Christopher si le cuento que terminé en Emergencias.
- Joel, la quemadura no está mal, pero si no empiezas a tratártela, dolerá como el infierno.
-Golpeé mi cabeza contra la pared y soplé el pelo suelto de mi cara- No vivo lejos, podemos ir a mi casa.
- Oh, está bien. - dijo mientras se dirigía a su moto-
- En realidad no tenemos que subirnos a la moto. -Erick arqueó una ceja graciosamente-
- Cuando dije que no vivo lejos me refería a éste lugar. -ambas cejas se elevaron entonces-
- Vayamos a tu piso entonces... vecino.
Tragué saliva, pero mi boca aún se sentía seca. Llaves, para mi apartamento, en el cual estaba a punto de entrar, a solas, para tener sexo, sexo , sexo.
Abrí la puerta y entramos por el oscuro pasillo. Podía sentir el calor que irradiaba mientras se acercaba. Su mano una vez más se instaló en mi espalda y susurro en la oscuridad:
- Muéstrame el camino amor.
Erick me esperaba afuera del baño, mientras yo me intentaba quitar los pantalones para poder luego hacer curaciones en mi herida.
- JOEL?? - golpeó ligeramente la puerta- estás bien?
- Estupendo! -tire los pantalones de nuevo y pegué un pequeño grito-
- Joel, solo déjame ayudarte, me estás preocupando.
Cerré mis ojos tratando de pensar en una manera de evitar esto. Mis mejillas ya estaban rojas. - Bien, entra. - el rió fuertemente -
Cómo iba a poder tener sexo con él después de esto?
- Está bien. Ahora que te has reído, ayúdame a sacarme los pantalones.
Me miró por un momento con una vista depredadora y se aclaró su garganta. Arrodillado junto a mi, tomó mis piernas entre sus manos. Yo ya había empezado a bajarlos pero la quemadura aún seguía cubierta.
- Mantén tu mano aquí y tira de la tela tan lejos de tu pierna como puedas. Haré lo mismo en la parte inferior y trataremos de sacartelo sin tocar la quemadura.
Luego de uno o dos minutos, de una cuidadosa y ligera maniobra, mis jeans golpearon el suelo. Si él seguía tocándome así, me iba a derretir en un charco aquí mismo en el suelo.
- Mm gracias.
- No hay problema, ahora necesitamos que se enfríe, podríamos dejarla bajo el agua fría.
Le entregué una toalla y él se volvió al fregadero, mojando la tela. Contuve el aliento mientras él la puso en mi quemadura.
- Mejor? -asentí con la cabeza-
- Escucha. -comenzo diciendo- lo siento por eso, nunca debí haberte empujado a subir a la moto.
- No es tu culpa que no sepa nada de motos y no me di cuenta que sería caliente.
- No puedo creer que nunca has estado en una moto.
- Si, bueno, hay muchas cosas que nunca he hecho. - el arqueó una ceja-
- Cómo cuáles?
- Bueno... -juro que mi corazón estaba teniendo un ataque en ese momento-
- Por eso me besaste no? Todos aman el acento cubano.
-trague mi sonrisa y dije- Creo que tú eres el que me besó.
- Así que fui yo. -paso la toalla bajo el agua otra vez-
- Tu turno.
- Hmm?
- Qué es lo que nunca has hecho?
- Bueno, nunca he hablado con un chico en un bar.
-mi mandíbula cayó- En serio?
Cómo era eso posible? ÉL ERA HERMOSO!
- Se que va contra el estereotipo, pero nunca he hecho mucho para estar ebrio todo el tiempo.
- Yo tampoco, así que cuanto tiempo llevas en Estados Unidos?
- He pasado aquí por un tiempo, pero no he estado por algunos años.
- Yo también, estuve en otro lugar y me mudé aquí de nuevo.
Él me comenzó a contar cómo creció en Cuba y lo diferente que había sido vivir aquí.
- Eso debió ser horrible.
- Te acostumbras a ello. He estado viviendo tanto tiempo aquí que ahora manejo el idioma un poco mejor, pero cuando viajo ocasionalmente a Cuba, al volver tengo algunos problemas.
- No puedo eliminar el acento cierto? Sino cómo podría llamar la atención de alguien tan bonito cómo tú.
- Leyendo Shakespeare en un bar obviamente.
Él rió y el sonido se propagó a través de mi piel.
- Eres lindo -dijo-
- Si claro. -rode los ojos- soy un ridículo.
- Te sentirías mejor si te llamo, ridículamente sexy?-me quedó mirando fijamente- que es esa mirada?, Actúas como si nadie te hubiera llamado sexy antes. -Eso sería porque nadie lo había hecho?- Lo que es imposible, no puede ser verdad. Mírame Joel, ni siquiera puedo tener mis manos lejos de ti ahora. Dime que no estoy loco.
No podía hacer eso, no estaba lo suficientemente cerca en ese momento para asesorar a alguien sobre comportamiento racional.
- Dime que puedo besarte.
Eso... eso eso podía hacerlo...
- Puedes besar... -no alcance a terminar la frase y sus labios ya se encontraban sobre mi presionandome-
Comparado con nuestro beso anterior, este era lento, exploratorio y como leña al fuego. Por primera vez en mi vida, simplemente me concentré en la sensación de un chico contra mi, en el roce de su lengua contra la mía, los toques de calor que sus dedos ocasionaban cuando presionaban mi piel. No pensaba en nada, no sobre mi aliento, o si mis manos estaban en el lugar correcto, o lo que él esperaba. Solamente me perdí en él.
Mis manos descansaban en sus caderas y deseaba hacer mi propia exploración. Saque mis manos hasta que descansaron sobre su estómago entre nosotros. En mi movimiento, sus labios se apretaron más duro contra los míos. Su lengua empujó un poco más duro. Deslicé ambas manos, sintiendo las duras curvas de su cuerpo bajo la tela.
Podía sentir la forma en que deseaba y un hilo de ansiedad comenzando en mi espalda. Luego, su beso se volvió más duro y más rápido, y corrí a seguir su ejemplo, ignorando mis nervios. Dejé una mano sobre su pecho y la otra envuelta alrededor de su cuello. Erick rompió el beso y exhaló temblorosamente contra mis labios. El verde brillante que había visto en sus ojos anteriormente, había sido superado por completo por sus pupilas negras. Puso una mano en mi barbilla, su pulgar tiró de mi labio inferior, durante varios segundos, sólo estudiandome.
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Perdiendo mi Virginidad |Joerick|
FanficSinopsis: Joel está a poco tiempo de graduarse en la Universidad y aún es Virgen. Cansado de ser el único Virgen en el grupo de sus amigos decide poner fin a sus problemas y perderla lo más pronto posible en una salida nocturna. Lo que no sabe es qu...