Capítulo 3

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"Hoy no sé si quiero odiarte, o volverte a ver..."

Cuando Adam tomo la decisión de casar a  Drew sabía la clase de chica que necesitaba:
-Una mujer que no lo quiera.
-Una mujer con la que no desee acostarse. Sabía el tipo de chica que Drew elegiría.
-Una mujer que no tuviera animales. No soportaría tener otro animal que no sea su propio perro en su casa.
-Una mujer que no tenga ni quisiera tener hijos.
-Una mujer con una carrera profesional e independiente.
-Una mujer que se plante el matrimonio como un proyecto empresarial.
-Una mujer que no sea demasiado sensible e impulsiva.
-Y una mujer en la que Drew pudiera confiar.
Esas fueron las pautas que llevaron a Adam a elegir a Valentina. Y sabía que debían hacerlo de inmediato. Pero antes debían firmar el contrato.
Éste contrato especificaba claramente que ambos debían mantener el secreto. Nadie más lo podía saber. El matrimonio duraría un año a partir de la fecha. Valentina debía vivir en la casa de Andrew y ambos debían asistir a eventos en público fingiendo su relación. Una vez que estuvieran solos no deberían seguir esas reglas. No era necesario que durmieran juntos y muchos menos tener relaciones sexuales. Solamente fingir en público y hasta con sus familiares y amigos.

La situación era tensa Drew no la miraba para nada bien a Valentina ni ella a él. Estaban sentados frente a frente con el contrato en sus manos. Ambos los leyeron y después de un idea y vuelta Adam logró que Drew firmará el contrato.

Narra Valentina.

No puedo creer que haya hecho eso ¿En que lío me había metido? ¿Como le explicaría a mi familia de un día al otro que me casaría cuando nunca le presente a un novio?
Además claramente se nota que no le caí para nada bien aquel tal Drew. Me miraba de arriba abajo y de mala manera. Se lo veía malhumorado, sé que no quería firmarlo, ni yo tampoco. Solamente lo hice porque estaba presionada por el dinero que necesitaba, de otra forma nunca lo hubiera hecho.
Tengo un dolor de cabeza que me está matando. Saber que firme aquel maldito contrató y que ahora debería vivir en aquella inmensa mansión. Apuesto que aquella casa cubre la hipoteca de la casa de mis padres y unas 10 más.
Me siento muy mal y lo peor era que Adam estaba apurado por arreglar los problemas de su "estrellita" y ya estaba planificando la boda. Tengo que llamar a Lisandro.

—Bien aquí voy...—suspiré y marque su número.
Sonaba...

—¡Hola!—respondió Lisandro.

—Hola...¿como estás?

—Bien. Recién llego de entrenar.

—¿Y mamá?

—En La Cocina, le está preparando un café a papá.

—¿Ellos como están?

—Y...—suspiro—Ahí andan...como pueden. Ya sabes cómo está la situación.

—Si, si. Ya se...

—¿Y vos en que andas?

—En nada ¿por?—me sentía mal no sabía cómo decirle la verdad a mi propio hermano—Recién llego de trabajar...—mentí.

—¿Estás bien?

—Si, si ¿porque?

—Mmm...te siento rara.

—Necesito hablar con papá, mamá y con vos.

—¡Uf! ¡Lo sabía!—agregó—Sabía que andabas en algo raro ¿que hiciste ahora?

—Nada, nada. De verdad solamente baja a la cocina que necesito hablar con ustedes.

Tenía un nudo en la garganta. No sabía que hacer. No sabía cómo decirle aquello, me sentía tan mal por tener que mentirles. Lo peor que antes de llamarlo me tuve que estudiar la mentira de Adam. Supuestamente si preguntaban "Nos conocimos en un bar después de un Show en Los Angeles y decidimos mantener la relación en secreto debido a su entorno"
Lo peor fuero que mis padres se pusieron feliz al verme que los llame y yo le estaba por tirar la mentira de mi vida.
Pero debo admitir que dentro de todos los problemas se encontraban los dos Unidos y calmados. Hable un poco con ellos sobre otros temas antes de tener que mentirles, pero el momento de decirle "La gran Noticia" había llegado, trate de ser los más directa posible, fui directo al grano.

Matrimonio por contrato (Drew Taggart)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora