HALLOWEEN: Terror vs Comedia 🍭👻

Mi Novio (MinKey)

🍭Título: Mi Novio
🍭Pareja: MinKey
🍭Autora: AlmightyMay

MI NOVIO

— ¿Cuál es tu nombre completo? —No lo está viendo— Siempre tuve curiosidad, Key.

Su vista está clavada en la tablilla de madera que sostiene entre manos, pero Key sí lo ve a él. Su atención se dispersa en las acciones del otro; la manera en la que está sentado, cómo muerde ligeramente su labio inferior al escribir.

El sonido del bolígrafo contra el papel es gratificante, ciertamente.

—Kim Kibum.

Son cortos y pequeños trazos, aquellos que dibujan las palabras que el hombre escribe. Los dibuja rápido, supone. Su nombre, sin embargo, se posa a su vez en los labios de quien le escucha; como una repetición automática, acariciándolos con suavidad y pronunciando cada parte de manera lenta, casi metódica.

— ¿Cuántos años tienes? Lo olvidé, perdona.

La voz de Onew se vuelve compungida, disculpándose por olvidar dato tan importante.

El aroma a café invade la sala; el tostado es medio tal como le gusta, sin demasiados cítricos que le provocasen rencores en la madrugada, pero con aquellas notas de cacao como solamente granos provenientes de Italia podían brindarle. Sus largos dedos envuelven la taza con cuidado; la caliente cerámica apenas rozando sus nudillos al sostenerla por el asa.

Son tersas y experimentadas, pálidas manos de pianista.

—Cumplí veintisiete hace poco.

Onew siempre ha pensado que son bonitas.

—Cierto.

Kibum lleva la taza a sus labios y sopla ligeramente. El vaho de la bebida se alza frente a sus ojos, tomando indistinguible forma antes de desvanecerse en el aire. Casi puede saborear el amargo sabor de un café au lait sin azúcar añadida, suave y sin embargo con distinguida aspereza al gusto. No puede evitar decepcionarse cuando su lengua encuentra el líquido, saboreando el insípido té de manzanilla que claramente no ordenó.

Su expresión se torna agria ante el desencanto, dibujando frustración en su gesto.

— ¿Qué haces aquí, Key?— Baja la tablilla, y ésta se posa sobre su regazo.— Hace tiempo que no vienes por estos rumbos.

Key.

Así le dicen sus amigos, es cierto. Se había vuelto un apodo recurrente desde sus años en la escuela media.

El bolígrafo en manos de Onew da pequeños golpecitos a la tablilla con algunos papeles; Kibum supone que todavía tiene trabajo que hacer.

Quizá le está quitando el tiempo, pero fue Jinki quien le invitó a sentarse apenas entró a la sala.

—Estoy esperando a Minho—Key dirige su mirada al reloj que porta en la muñeca izquierda—. Quedamos en que nos veríamos aquí, pero creo que se le hizo tarde.

Las manecillas dictan una hora exacta, en aquel brazal de cuero que rodea su muñeca. Las seis en punto de la tarde; ni un minuto más, ni un minuto menos.

El sol detrás de la ventana estaría pronto a ocultarse, detrás de aquellos altos edificios que se alzaban a sus alrededores. Los ventanales eran pequeños para piso tan alto. El lugar donde se encontraban era de por sí un edificio de gran altura; extraño puesto donde posicionar una cafetería. Se habría aprovechado de mejor manera un extenso ventanal; especialmente para una cafetería, pero solamente se contaba con el pequeño cuadro de cristal en la ventana. Apenas si estaba adornado el alféizar con un par de macetas pequeñas, cactus que no deberían poder sobrevivir en Seúl. De la alfombra color hueso a las luces del techo se extendían en las paredes amplios y llenos libreros para decoración.