☄ Capitulo 4 ☄

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La ciudad, como todas las mañanas, contempló al brillante sol ocupar el cielo.
Aunque esta vez era distinto.
Completamente distinto.

Los pocos ciudadanos restantes, hicieron sus rutinas cotidianas.
Todo lucia como un día completamente ordinario.
Pero no lo era.

Cuando Cath recorrió el centro de la ciudad, nuevas fotos estaban en el mural de personas desaparecidas.
Ocho personas mas se habían perdido, por lo que solo 14 personas quedaban en la ciudad.
Una ciudad en la que antes habitaban 1021 personas.
Una ciudad en la cual las risas, y bullicio jamás faltaba.
Y ahora, sólo se escuchaban pequeños murmullos con cierta duda a ser emitidos.
Los que quedaban, ahora eran tan temerosos que prácticamente no salían de sus hogares.
La ciudad ahora se percibía como completamente deshabitada.

Cath con incertidumbre y temor se acercó a aquel mural que conocía a la perfección.

Observó las fotografías y con tristeza, reconoció a algunas de las personas desaparecidas.

Thomas Locke, un chico que gustaba de ella.
Se había declarado en año nuevo, otra de las festividades posguerra que se celebraban en la ciudad. Cath pensó en aceptarlo pero por alguna razón, nunca lo hizo.
A pesar de todo, aún eran buenos amigos y aveces salían al centro de la ciudad para pasar tiempo juntos.

Harley Tend, su ex mejor amiga. Ambas se llevaban muy bien juntas y eran muy cercanas pero un pequeño e insignificante malentendido rompió su amistad permanentemente.

Lean Reist, el profesor de construcción y manejo técnico de maquinaria. El profesor que la educó y guió por más de cuatro años.
El único adulto al que había podido acudir cuando tenía un problema por resolver, o algo la aturdía.
Cath le tenía tanto cariño, que lo consideraba un padre.

La ultima foto que reconoció era de Lynn Oremore.
La hermana menor de Amelia.

Cath observó la imagen con pesar.
Era muy parecida a su hermana.
La única diferencia entre ambas era el color de sus ojos.
Lynn los tenía cafes.
Lamentaba mucho que ambas desaparecieran.
Probablemente, Lynn desapareció al tratar de encontrar a su hermana.

Cath, nostálgica por aquellas personas, decidió alejarse de aquel mural cuya función era dar malas noticias y tristeza a la familia de las personas cuyas fotos colgaban de él.

Cath recorrió la ciudad, hasta que llegó al área norte de Paz.

El trayecto era relativamente corto, ya que la ciudad no era tan extensa.
De hecho, era una octava parte de la antes gran Nueva York.

Debido a las bombas nucleares de la guerra, la mayoría de edificios se encontraban agrietados o reducidos a escombros.
Por ello, los primeros gobernadores de Paz decidieron derrumbarlos y despejar el área a su alrededor, a excepción de aquellas estructuras que a pesar de estar a punto de quebrarse tenían un valor histórico, como la estatua de la Libertad, o el icónico Empire State. Finalmente, constryeron nuevas estructuras en el area central de lo que fue la ciudad.
Paz apenas ocupaba una hectárea.

Cuando finalmente llegó al árbol, ahí estaba Jack sonriendo y con una cesta de picnic a su lado.
-Creí que sería mejor si comíamos algo- Cath sonrio y se sentó junto a él.

Ambos reian, se divertian juntos.
No notaron la crisis a sus espaldas hasta que llegó a sus pies.
Mientras ellos platicaban, la poca población estaba en pánico.
Varios edificios habían comenzado a derrumbarse.
Un terrible terromoto había arrasado con la ciudad.
Jack y Cath, corrieron hacia el centro de la ciudad según el protocolo de emergencia de Paz.

El gobernador Loug trataba de calmar a las personas que estaban ahí, que a pesar de ser pocas, estaban causando problemas.
El último terromoto había ocurrido hace aproximadamente 6 años.

Jack lo recordaba bastante bien.

Aquel terremoto no había sido tan fuerte como el actual, pero sin duda asustó al pequeño Jack que se encontraba solo en su hogar.
Sus padres habían salido a un evento de negocios con un aliado de su empresa familiar.
Jack estaba totalmente aterrado, pues nunca antes había experimentado un terremoto, y no sabía que hacer.
Temeroso había salido de su hogar.
Observó a sus padres a lo lejos.
Jack corrió hacia ellos y se acurrucó en sus brazos.

Ahora, estaba aún más  aterrado.
Cuando el terremoto cesó, todos permanecieron en silencio, y aterrados observaron el panorama a su alrededor.
Los edificios principales del centro de Paz, como la casa de gobierno, Gigging's, la mansión de los Heist, y las casas de las familias más adineradas del lugar, se habían reducido a escombros.

Un poste comenzó a tambalearse, hasta que cayó.
Sobre el gobernador Loug.
Su cuerpo fue totalmente aplastado por dicho objeto.
La fuerza del impacto había provocado que su sangre se esparciera por todo el lugar y se posara sobre todos los presentes.

Todos se alarmaron inclusive más que antes, mientras Cath observaba a Jack, que estaba sentado sobre los escombros de lo que solia llamar hogar.

Till the EndDonde viven las historias. Descúbrelo ahora