ethereal ー renmin

8. bluntly

Pensó que tal vez haciendo lo que hizo esto pararía de alguna forma, pero resultó ser para peor. Ahí estaba, como era ya habitual, dejándose para que su contrario le partiese lo que a él le diese la gana, sintiendo la sangre correr por su rostro, siendo el muñeco de entrenamiento.

Él sólo se dejaba para luego reírse en la cara de su próxima víctima.

JaeMin actuaba con indiferencia, llegando incluso a burlarse de las expresiones que su abusador hacía. Le causaba gracia el hecho de que él derramara lágrimas de la ira, y se desquitara con él. Era obvio el motivo, lloraba por la pérdida de su amigo, sabiendo de que está desaparecido, supuestamente, y que, sin saberlo, estaba dándole su merecido al culpable. Todo era tan irónico que resultaba cómico.

-¿Por qué? -Paró de hacer lo que hacía, y con expresión de sufrimiento lo miró. Se dejó caer en el suelo, derrotado. JaeMin sólo quería reír. Se encogió de hombros-. ChenLe no tenía la culpa de nada -Parecía como si supiese que está muerto. ¿Acaso...? No, imposible.

Hubo un silencio. HaeChan sollozaba en silencio, mientras que JaeMin le retumbaba la frase en su cabeza como sonidos de batería.

Claro, ChenLe no tiene la culpa de nada. Era JaeMin el culpable, eso está más que claro, pero, sólo porque ese ya no está le quitan toda la culpa de manera automática, cuando en realidad él no era del todo inocente.

ChenLe cometió cosas malas estando en vida, y JaeMin era un claro ejemplo.

Si antes decía que se arrepentía, ahora no era así, y no volvería a retractarse de nuevo, porque ahora sí que estaba cien por ciento decidido, desde ahora ya no volvería a ser el JaeMin débil, esa faceta de él había sido desechada a la basura.

-Tú sabías sobre esto -Murmuró HaeChan con la mirada fija en el suelo, pero perdida. Su cara de tristeza le causaba gracia al menor de alguna forma. JaeMin no dijo nada, y sólo se limitó a sonreír de lado, al mismo tiempo que se incorporaba del suelo y reposaba su espalda en la pared de azulejo. Sólo eran ellos dos, en el baño, con la puerta cerrada con llave-. Responde. ¿Tú sabías sobre esto? -Eso sonó más como una afirmación que como una pregunta.

JaeMin soltó una risa queda y se puso de pie. Se acercó a la puerta, quitándole el seguro, abriéndola para irse.

-¿Veámonos después de clases? La historia es larga -Le guiño un ojo, y sonriendo juguetón salió de ahí.

Caminaba con jolgorio por los pasillos, importándole poco si le miraban su cara llena de hematomas y sangre. No tenía nada que hacer ahí, era mejor irse.