Far from Sugar➳Suga; BTS

[13] No tan dulce

— ¡Yah, Noona!

Mi cuerpo sufrió un leve espasmo nervioso y supuse que no se debía a la bebida. Reconocí esa voz delicada e infantil al instante, sin siquiera intentarlo. Ya sabía de quien se trataba.

Había perdido a Jenna y a Jimin hace bastante rato ya, luego de seguir a Hoseok a la barra y marearme un poco luego de unos tragos. Probablemente ambos estaban ahora mismo buscando la posibilidad de quedar más cerca al escenario. Jimin, para ver a Hoseok...y bueno, Jenna también por Hoseok.

Ese Hoseok debía tener algo. Todos parecían amarlo, inclusive Yoongi, digo, es quien dejó a cargo de su perro (el cual aún no había tenido la posibilidad de conocer). Debía de ser alguien importante en la vida de todos. Y que va, yo, lo que llevaba de conocerlo menos de 24 horas, ya debía admitir que se estaba robando mi corazón.

¡Me voy por las ramas! El punto era que, yo había quedado tan sola como temí quedarme desde un inicio. Yacía casi al final del local, teniendo una vista amplia del lugar, o bueno, tanto como mi altura me lo permitía.

—Si me vuelves a llamar así, te juro que, si no te cuelgo antes, me colgaré yo—me giré hacia Jungkook, con una mueca envuelta en total seriedad.

—Lo siento—tragó sonoramente, escondiéndose en su lugar.

—Además, no soy mayor que tú...—susurré, haciendo un puchero y llevando la bombilla a mis labios, bebiendo un poco del agua gasificada.

Estaría loca si, después de semejante trago que Hoseok me había obsequiado, seguiría bebiendo. Me aseguré de comer un poco y reponerme mental y físicamente, segundos antes del show. Quería estar lo suficientemente cuerda como para ser capaz de ver a Yoongi bien sobre el escenario; antes que verlo con los ojos entrecerrados al estilo de mi madre cuando quería leer el titular en la televisión.

—Por unos cuantos meses si, ¿verdad? ¿Cuándo naciste?—sonrió, achinando sus ojos.

—Nací en mayo.

—Pues si eres mi noona—su sonrisa volvió a expandirse, y no pudo evitar contagiarme.

—Así que te gustan las mujeres mayores, ¿no?—Jungkook se sonrojó— ¡Lo sabía! Bien, dejaré que me llames así solo para tener poder en ti. Aunque...me sigo viendo menor que tú, ¿cierto?

— ¡Cierto!

Ambos reímos y sentí que la poca tensión que hubo en un inicio, se dispersó totalmente. Era un chico amable y bondadoso, y eso que solo me lo había topado en el incidente del auto, y ya parecía tener una parte del corazón de Yoongi, y por ende, el mío también...

¡No porque tuviera alguna conexión importante con Yoongi, en lo absoluto! Me gustaría pensar, por ahora, más que nada que es porqué soy una niña terriblemente influenciable.

—Por cierto, Jungkook, ¿Qué haces aquí? ¿Te desprendiste del guapo Seokjin y de Taehyung?—me atreví a preguntar, luego de un rato esperando que alistaran el escenario.

—Para nada, ellos también vinieron... ¡Digo! Jin-hyung no está aquí, él pasará a buscarnos después. Él es quien nos cuida a TaeTae y a mí, y como nosotros queríamos venir a ver terminó cediendo—rió suave antes de continuar. Dios, su sonrisa me estaba matando, era precioso—. TaeTae debe estar en el backstage, seguramente apoyando a...

— ¿J-Hope?—inquirí, alzando mi ceja.

—Rap Monster. Namjoon, de hecho. Es quien ha ganado más batallas aquí, además de Suga. Pero ¿Quién sabe? Hay varias caras nuevas hoy.

—Vienes seguido, eh.

—Bastante. Me gusta ver mis hyungs competir. Aunque en esta ocasión, especialmente, estoy aquí para apoyar a Suga.