No sabía cómo reaccionar.
Todo mi cuerpo se había quedado estático, una vez divisé a Solhee desde el umbral de la puerta. Llevaba el mismo vestido turquesa que yo, unos altos tacones plateados, su larga cabellera rubia cayendo por sus hombros y espalda, y, para finalizar el look; una sonrisa triste.
No era consciente de si había estado mirando desde el momento en el que nos besamos, o si recién había llegado a la escena. Pero si era consciente de que la situación no parecía estar a nuestro favor. De no haber estado, con solo vernos con las respiraciones agitadas, los labios hinchados y las mejillas sonrosadas; uno lo podía inferir rápidamente.
—Vaya, Yoongi... No sabía que estabas acompañado...—parecía como si fuera a largarse a llorar a cualquier comento, y no por su temblorosa voz, sino, porque parecía estar desilusionada.
—Solhee...—Yoongi susurró a mi lado, tragando sonoramente.
—Eh...yo...—comencé a tartamudear.
Quería hablar, decirle que todo fue un malentendido. Pero no podía, no se me daban las palabras. No sabía siquiera si podía decir algo sin cagarla más, que era lo que yo sabía hacer más que nada.
Mis piernas comenzaron a temblar, al igual que mi labio inferior en un puchero. De pronto me sentía como la peor persona del mundo. Me gustara o no Yoongi, él ya tenía novia, Solhee. Y aunque no me terminara de agradar del todo, no podía hacerle eso. Yo soy de esa clase de persona que es bastante torpe y desastrosa, pero de ahí a destrozar a las personas, si que no. Así no soy yo.
Lo único que pude atinar a hacer, fue empujar a Yoongi con mi hombro, y acto seguido a Solhee, una vez empecé a correr con el fin de huir de ese lugar. Ambos me contemplaron desconcertados, no esperándose mi escapada, pero sabía que si no salía de ahí pronto, terminaría por cagarla más de lo que ya lo había hecho.
Era una persona horrible.
Atravesé la puerta que no debí haber atravesado en un principio, saliendo del backstage tan rápido como mis piernas me lo permitían. De pronto todo el calor comenzó a acumularse en mi rostro y espalda, siendo atacada por la bebida que había ingerido.
Hoseok me vio desde lo lejos, mientras la multitud vitoreaba a un tercero desde el escenario.
— ¡Hey! ¡Te estuvimos buscando! Me encontré a Jimin y a Jenna y dijeron que habían llegado contigo. Todavía no termino de pagarte el tortazo de la tarde. ¿Me permites enmendarlo con comida?
Asentí velozmente, adelantándome hacia su persona.
—Todo por salir de este lugar lo más pronto posible—solté, afirmando su brazo.
— ¿Pasó algo? Te ves abochornada...—sus ojos repasaron mi rostro.
A sus espaldas, divisé a Jenna, y le un extraño gesto con el ojo, para que supiera que tenía que intervenir. Ella captó al instante, y corrió hacia nosotros.
— ¡Sí! Solo...ya sabes, tanta gente en este lugar tan cerrado...No es nada de lo que debas preocuparte, en serio.
— ¿Estás segura? Escuché que eras conocida de Yoongi. Si te sientes muy mal puedo llevarte con él si quieres...
Mis ojos se abrieron como platos.
— ¿¡Qué!? ¡No, no! ¡Nada de eso! Yo...
—Hooooobiiii—Jenna se colgó del cuello del muchacho, imitando voz de bebé y haciendo un puchero—. Vamos, Hobi...Jenn Jenn tiene hambre...
Sonreí internamente, sabiendo que se trataba de una táctica para desconcentrarlo.
— ¿Je...Jenna? ¿Qué crees que haces?—Hoseok balbuceó, siendo testigo de lo cariñosa que Jenna se había vuelto de pronto.
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Far from Sugar➳Suga; BTS
Fanfiction❝Si alguna vez, en tu miserable vida, hubo una mínima posibilidad de que llegaras a pensar que estoy interesado en ti, piénsalo de nuevo.❞ Min Yoongi era esa clase de chico con la que no se podría lidiar por más de treinta segundos si no querías ver...