Dangerously | Madelaine Petsch Y Tú.

09

_______ Ford.

Me alistaba para mi cena con Madelaine, nada formal. Esta acostumbrada a ese tipo de cenas, y sinceramente a mi me aburren.

-¿A donde vas? -Pregunto mi padre con Emily en sus brazos.

-Saldre con Bella ¿Desde cuando eres tan sobre protector? -Pregunté riendo.

-Desde el día en el que naciste. Pero digamos que baje un poquito la guardia cuando confesaste que te gustan las chicas. -Dijo sonriendo mientras colocaba a Emily en el suelo y ella corrió a la habitación de mis padres.

-¿Eso que tiene que ver? -Pregunté mientras me veía en el espejo.

-Que no saldrás embarazada, al menos que tu no quieras. Pero aún me queda Emily. -Hizo una mueca y reí -. Por cierto, estas hermosa. -Se recostó en el marco de la puerta.

-Gracias, y tranquilo. No me veo con niños, para nada. -Hice una mueca y el rió.

-Gracias por conseguirnos a Gigi. -Asenti.

-No te preocupes. Tengo que irme, nos vemos luego. -Bese su mejilla, y me fui hacia mi auto.

Lo encendí, y voy rumbo a la casa de Madelaine.

Mi celular empezaba a sonar, lo miré y era Gigi.

-¿Qué hay de nuevo? -Pregunte.

-Todo está relativamente bien ¿En dónde estás?

-Voy a salir con Cameron.

-¿Segura? -Pregunto un poco insegura.

-Si... Claro que sí ¿Tú en donde estás?

-Estoy con las chicas. Incluso Kylie. En fin te llamaba para saber si mañana querías salir después de la sesión de fotos que tengo para la revista.

-Si, y no le digas a Kylie que saldremos o no estarás viva para mañana cariño. Sabes que no me deja salir con ninguna de ustedes, al menos que sea Ashley o Cameron. -Dije y escuché a Gigi reír.

-No te preocupes, nos vemos mañana. -Colgo.

Llegue a la casa de Madelaine, y toque la bocina del auto. Pasaron unos minutos y ella salió de su casa. Entro en su auto y me miró.

-No pues, gracias por abrirme la puerta. -Dijo Madelaine con sarcasmo y reí.

-Lo siento. Sabes que no soy esa persona, que se baja del auto solo para abrir una puerta. -Dije comenzando a conducir.

-Hace unos días eras esa persona cariño. -Dijo y reí.

-Exacto, hace unos días. Es pasado, estamos en el presente ahora. Hablaremos de abrirte la puerta, cuando te cases conmigo.

-¿Estas insinuando que nos casaremos? -Pregunto con un tono burlón, y una sonrisa.

-Ya quisieras. Así que por lo tanto, sigue esperando a que te abra la puerta. -Madelaine sonrió, y luego empezó a mirar su celular.

-¿En dónde se supone que está la calculadora de tu novia? -Pregunto sin dejar de mirar la pantalla de su teléfono.

-¿Kylie? ¿Calculadora? Ni que multiplicará números tan rápido.

-Sabes de lo que hablo. -Me miró.

-De hecho Kylie es muy inteligente, y muy buena en matemáticas. Me hace o me ayuda con todas mis tareas. -Dije y Madelaine rodó los ojos.

-Yo puedo hacer eso. Te recuerdo que ya salí de la universidad hace años.

-Por lo tanto tú técnica de matemáticas debe estar oxidada. Te dejare hacerlo, si quiero reprobar. Espera mi llamada. -Dije y ella comenzó a reir.

-Eres una idiota.

Ya habíamos llegado al restaurante de comida rápida, estacione el auto, y ambas bajamos. Entramos, buscamos una mesa un poco en el fondo. El mesero llegó, pedimos dos hamburguesas, y dos refrescos.

-¿Entonces? ¿Asi enamoras a las personas? ¿Siendo una idiota?

-Lo lindo aburre ¿No lo sabes? -Pregunte y Madelaine sonrió.

-Ya veo porque no me aburres ¿Como es que pasas a ser una persona tan romántica a ser una idiota?

-Y pues veo que te gusta porque sigues aquí. -Dije sonriendo y ella rodó los ojos, para luego regalarme una sonrisa.

-Es porque, tengo hambre.

-Claro. -Dije sarcásticamente.

El mesero llegó con nuestra comida. Comenzamos a comer, y después de unos quince minutos terminamos, y pagué la cuenta.

-¿Te estás divirtiendo en tu cita? -Pregunte tratando de levantarme, pero el pie de Madelaine por debajo de la mesa, el cual pasaba por mi pierna, me detuvo.

-Claro que sí. -Dijo mientras me guiñaba.

No voy a mentir, es exitante.

-La activa soy yo, así que comienza a quitar el pie. -Madelaine negó.

Como no es nada raro, mi celular empezó a sonar y era Kylie.

-¡Hey cariño! -Dije y Madelaine rodó los ojos.

-¿Como estás amor?

-Bien amor ¿Y tú? -Madelaine quito el pie, y se levantó rápidamente.

-Bien bebé ¿En dónde estás? -Pregunto Kylie, mientras yo perseguía a Madelaine por las calles de la ciudad.

-Ahora, estoy con mi papá. -Trate de tomar el brazo de Madelaine y ella siguió caminando.

-Esta bien amor. Te llamaba para saber de ti.

-Tranquila, tendrás noticias de mi más tarde ¿Te llamo luego?

-Si bebé, adiós. -Colgo.

Guarde el celular, y seguí persiguiendo a Madelaine.

-¡Madelaine! ¡Por el amor de Dios! ¡Espera! -Dije con el tono de voz un poco alto, mientras la pelirroja caminaba un poco más rápido.

Corrí detrás de ella, hasta que logré tomar su brazo y hacer que me mirará.

-Vamos a hablar. -Dije mirándola fijamente y ella negó.

-No tengo nada que hablar contigo, ahora sueltame o grito ________.

-No voy a soltarte. -Dije haciendo mi agarre un poco más fuerte.

-Uno...

-Madelaine, por favor. Hablemos.

-Dos... -Dijo esta vez mirando hacia el cielo.

-Deja la estupidez.

-Tres...

-Escuchame, pued... -Madelaine me interrumpió.

-¡AYUDA! -Grito Madelaine y la besé. Ya que las personas comenzaban a mirarnos.

Me separé de ella unos segundos después, y ella me miró.

-¿Podemos hablar? -Asintio y comenzamos a caminar hacia el auto, el cual estaba un poco lejos.

Al llegar ambas entramos, y ella me miró esperando a que comenzará a hablar.

-¿Por qué no haz hablado con Kylie? -Pregunto fríamente.

-No puedo dejar a Kylie de la nada. Hay que esperar.

-¿Esperar que? ¿Qué me enamoré más de tí imbécil? -Pregunto alterada. Trate de tomar sus manos y las quito rápidamente.

-Quiero estar contigo en serio. No voy a hacerte daño Madelaine. Solo necesito tiempo, no te vas a arrepentir.

-¿Qué pasa si me mientes solo porque quieres acostarte conmigo? ¿Qué pasa si me dejas y sigues con Kylie? -Pregunto con la mirada baja.

Tome su mentón haciendo que me mirará, y la besé.

-Eso no pasará, te lo prometo.