12

8.4K 562 57
                                    

________ Ford.

Estaba en la entrada de la casa de Madelaine, toque el timbre y después de unos segundos abrió la pelirroja.

-Pasa. -Dijo Madelaine sonriendo.

Entre a la casa y me dirigí a la sala.

-¿Por qué querías verme ahora? -Pregunte mientras me sentaba en el costoso sofá de color negro.

-¿Es malo querer verte? -Pregunto sonriendo mientras se sentaba en mi regazo -. Creo que la escena que tuviste con Kylie hoy fue bastante... -La interrumpí.

-¿Vergonzosa? -Pregunte y ella asintió.

-Acompañame. -Tomo mi mano y me llevo hasta su hermoso jardín.

Había una hermosa mesa, adornada con dos copas, vino, unas velas hermosas, y una deliciosa comida.

Kylie nunca había tenido este tipo de detalles conmigo, ninguna mujer lo había hecho.

Y que Madelaine lo haga logra impresionarme, demasiado.

-Esto es muy hermoso. -Le sonreí.

-Nunca pensé en hacer esto por alguien. Pero llegué a la conclusión de que te lo mereces. -Beso mi mejilla -. Siéntate.

Me senté y ella hizo lo mismo, estaba frente a mí. Estaba hermosa, para nada elegante como acostumbra a estarlo, pero aún así se veía perfecta.

-Ya deja de mirarme así o no podré comer. -Bajo su mirada sonrojada, y sonrió.

-Lo siento... ¿Que harás mañana? -Pregunte mientras servía el vino en las dos copas.

-Trabajar, supongo. -Respondio Madelaine. Le entregué la copa y sonrió -. Me imagino que irás a la universidad ¿Cierto?

-Tal vez, no lo sé. Ahí está Kylie, no quiero problemas con ella ahora. Supongo que está algo sensible. -Tome un sorbo de vino y Madelaine asintió.

-¿La quieres?

-Te quiero a ti.

Madelaine sonrió, seguimos comiendo y hablando de nuestras cosas, sobre nosotras, incluso de mi madre y Madelaine cuando eran más jóvenes.

Mire mi celular y eran las 11:00 de la noche, tenía que irme.

-Es tarde, tengo que irme y tú debes estar cansada.

-¿Tienes algo que hacer ahora? -Negue.

Ayude a Madelaine a recoger las cosas, los platos, las copas y todo eso, para llevarlo hasta la cocina. Me ofrecí a ayudarla a acomodarlo, pero dijo que mañana vendría una señora. Luego de todo, me acompañó hasta la salida de la casa.

-Todo estuvo muy lindo, en serio gracias. -Dije y ella tomó mis manos.

-Valio la pena todo entonces. -Sonrió.

-Vengo a verte mañana ¿Está bien? -Asintió -. Buenas noches.

Di un beso delicado en su frente, y trate de irme, pero el agarre de Madelaine en mis manos me lo impedía. Madelaine se acercó a mí y beso mis labios por unos segundos.

-Ahora si, puedes irte. -Dijo cabizbaja.

Que tierna.

Me acerqué a ella, y dejé un corto beso en sus labios.

-Buenas noches. -Dije y Madelaine sonrió.

Fui a mi auto, lo encendí y comencé a conducir hasta mi casa. Mi celular sonó y era Gigi.

-Oye Ford ¿Dónde estás?

-Voy a mi casa ¿Por qué?

-¿Puedo ir?

-Claro. Te veo allá. -Colgue.

Después de unos minutos llegué a mi casa, me estacione, y bajé del auto. Luego de unos segundos, una camioneta color negro se estacionó a mi lado. El conductor bajo la ventanilla y era Kylie.

-¿Que haces aquí? -Pregunte.

-La pregunta es... ¿Que haces tú llegando a esta hora? -Pregunto Kylie.

-Puedo llegar a la hora que quiera Kylie. Vete, estoy ocupada. -Dije y Kylie sonrió.

Esta vez, su sonrisa era diferente, era falsa e hipócrita.

-¿Que está pasando? -Escuche la voz de Gigi aproximarse hasta nosotras.

-Que lindo. -Dijo Kylie con sarcasmo.

Kylie subió la ventanilla del auto y salió a toda velocidad del lugar.

-¿Que te dijo? -Pregunto Gigi.

-Nada importante, vamos a entrar.

Gigi asintió y entramos a la casa. Gracias a Dios mi madre no estaba en la sala esperándome.

Fuimos directo a mi habitación, Gigi se colocó su pijama al igual que yo, nos acostamos y colocamos una película.

-¿Por qué te veo tan triste? -Pregunte mirando a la rubia, quien parecía tener un mar de pensamientos.

-Termine con Zayn. Ya eso se veía venir, pero no sé porque estoy así. Quisiera estar como tú.

La razón por la cual no le he dado importancia a mi ruptura, es Madelaine Petsch.

-Estaras bien, y estoy segura de que conseguirás a alguien mejor.

-Nosotros estábamos muy mal, realmente no quise perderlo, pero no quería seguir cuidando de él como si fuera su madre y que el siguiera con su inmadurez.

Una lágrima comenzaba a resbalar por la mejilla de Gigi, la limpie y ella sonrió.

-Tampoco puedo contar con las chicas, ellas están al lado de Kylie, creen que me acosté contigo. -Hizo una mueca de asco y reí.

-Ya quisieras Hadid. -Dije haciendo reír a Gigi.

-Claro. -Dijo sarcásticamente.

Comenzamos a hablar de todo, menos de relaciones, ni de amigas. No le prestaba nos atención a la película, ni siquiera sabíamos de que se trataba. Gracias a eso Gigi tuvo una gran idea:

-¿Por qué no te haz ido a vivir sola? -Pregunto la rubia.

Realmente nunca lo había pensado, no estaba en mis planes irme sola.

-Digo, ya puedes hacerlo ¿No te gustaría?

-Sinceramente nunca lo había pensado. Pero me encantaría, mañana veré qué hago. -Respondi.

Si me voy sola podría ver a Madelaine sin miedo de que algunos de mis padres o Emily este ahí y que descubran algo. Además tendría paz.

-Que inteligente eres Hadid. -Dije y Gigi soltó una carcajada.

-¿Al menos sabes cocinar?

-Algo. -Respondi y Gigi volvió a reír.

Gigi miró su celular, hizo una mueca de desagrado y me lo enseñó.

"¿Por qué estás con _______ otra vez?" -Hailey.

"Dijiste que no tenían nada y estás en su casa ahora. Que sinceridad." -Kendall.

Borre los mensajes y le devolví el celular.

-Deja de hacerles caso.

-Son mis amigas. Además tampoco tendría algo contigo. -Hizo una mueca.

-Son idiotas. -Dije y Gigi rió -. Deben de confiar en ti, y no me extrañaría que Kylie les metería cosas en la cabeza.

-Tu ex está loca. Te acosa. -Reímos.

-Vamos a dormir. -Gigi asintió.

Apagamos el televisor, y nos dispusimos a dormir.

Dangerously | Madelaine Petsch Y Tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora