Una persona.... la misma estaba en medio de la carretera oscura pidiendo ayuda con sus manos levantadas.
Detuve la camioneta frente al hombre que pedía ayuda.
-Quédate en el auto-le dije a Akane, quien tenía el rostro pálido y no decía una sola palabra.
Salí del auto y me dirigí al hombre que estaba ahí.
-¿Qué sucedió?-le pregunté al hombre, él hizo una señal y luego miré al suelo al lado de la carretera, había una persona en el suelo con el rostro ensangrentado.
Me acerqué a aquel cuerpo ignorando el sonido de la puerta de la camioneta cerrarse. Al ya estar de cuclillas junto a aquel cuerpo coloqué mi mano en su cuello viendo el pulso... pero este estaba bien.
Luego esa persona abrió los ojos de repente haciendo que me levante de golpe, por el susto.
Al mismo tiempo que me levanto escucho un grito agudo, me doy vuelta para ver un panorama que nunca creí ver.
Akane estaba con su rostro pálido y una navaja en su cuello. Me intenté acercar a ella pero el que estaba tirado en el suelo se levantó y me habló.
-Ni intentes ayudarla-hizo una pausa haciendo una sonrisa sádica.- sino ella se muere. si intentas algo, se muere. Así de fácil.-me amenazó.
-Danos todo lo que tengas- amenazó el que tenía la navaja en el cuello de Akane- incluyendo las llaves de la camioneta.
Asentí sacando las llaves de mi bolsillo y extendiéndoselas a los asaltantes.
El que estaba parado en la carretera se acercó a recogerlas, pero se paró abruptamente y me miró con extrañeza.
-Quítate los lentes-ordenó en su lugar.
¿Y ahora qué hago? Si me quito los lentes me descubrirán...
-Hazlo- insistió el otro, poniendo más presión en el cuello de Akane, provocando que el mismo sangre un poco.
-Está bien, pero no la lastimen-me coloqué mis manos en los lentes para retirarlos.
Lo iba a hacer cuándo un quejido de dolor captó mi atención y la de los demás.
Dirigimos nuestra atención a donde estaba Akane, ella estaba sentada encima de la espalda del hombre que la tenía amenazada. Doblando con fuerza los brazos de su agresor, tomó la navaja que tenía el agresor en su mano y le pegó con el mango de esta en la cabeza provocando que el tipo quede inconsciente.
Se levantó de encima del agresor y pude ver un toque de diversión, travesura y descontrol en su mirada.
Estaba fuera de control.
Akane se acercó corriendo en mi dirección, mi primera reacción fue apartarme de su camino. Ella no me siguió, su objetivo eran los otros dos agresores restantes. Ella tiró una patada dándole en la costilla a uno junto con un golpe en la mandíbula que lo tiró al piso.
Al otro agresor.... lo dejó estéril con la patada tan fuerte que le dio en sus parte. El grito que pegó el hombre fue tan grande que me aturdió los oídos, pero a Akane solo le sacó una sonrisa más grande.
El hombre recostado en el suelo quejándose del dolor no sintió cuándo Akane tomó su cabeza y la dio contra el suelo dejando inconsciente a el, ahora Estéril Agresor.
-¡Akane cuidado atrás!-le avisé a la pelinegra, atrás estaba el hombre que había mandado a volar con el golpe en la mandíbula. Ella tomó la navaja que estaba en el suelo y la tiró con agilidad hacia la mano que tenía levantada el agresor, provocando una herida en su mano, y un grito terrible por parte de el hombre que se colocó de cuclillas con su mano toda ensangrentada, ya que le dio en la palma de la mano con ella, aún así la navaja no le hizo una herida muy grande ya que era pequeña.
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Enamorándome De Kento Nakajima
FanfictionHola, mi nombre es Akane. Soy una chica de 17 años y de padres Multimillonarios, osea, tengo la vida perfecta. Soy una chica con cabello pelinegro y de ojos bicolor. Soy única, tengo la familia perfecta, la popularidad me envidia, según los demás te...