6-Alas Negras.

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De repente unas alas grandes y negras, salieron de mi espalda, (o eso pensé hasta que una suave y dulce chica me abrazó y susurró a mi oído).

- Aún no estás listo para morir, este no es tu destino. - dijo la chica alada abrazándome y apretándole fuerte.

Después de unas palabras que no pude entender, mi corazón se calmó, e impactamos contra el techo de tejas de una pequeña habitación. Cuando traté de incorporarme con mis enclenques fuerzas el suelo de la choza se destruyó y caímos a un agujero que se abrió en el suelo.

Entonces ya estaba demasiado débil para tratar de ponerme en pie, casi no podía moverme. Solo alcancé a ver como una hermosa chica de alas enormes y negras se levantaba de entre los escombros, sacudiendo el polvo de sus alas como si fuese un pájaro y dijo.

- Descuida estarás bien eres fuer...

Y antes de que la frase terminara me desmayé. Por días ni siquiera podía abrir los ojos, pero sí podía sentir todo el dolor en mi cuerpo debajo una cálida y suave cama, por momentos me despertaba el atroz dolor de las quemaduras cuando alguien me curaba, también recuerdo que me alimentaban con líquido pues por un tiempo no podía ni masticar, supe que era aquella chica, por su delicada forma de tocarme y sus dulces palabras. Incluso me alimentó de su propia boca

- Creo que de no haber sido así hubiese muerto.

Tal vez estuve así durante dos semanas, no puedo decirlo con exactitud, al fin pude abrir mis ojos y podía moverme con cierta dificultad. Junto a mí, había comida recién hecha, la comí como un loco. Mi cuerpo estaba muy delgado y las cicatrices ya habían sanado por lo que sospeché que tal vez habría pasado mucho más tiempo inconsciente, poco a poco fui dándome cuenta de que estaba en alguna región de "Eiderbul".

La arquitectura de este tipo de templos es muy extraña y solo se ve por esta zona, pues fueron construidos por una cultura de hombres muy antigua, olvidada y sepultada en el tiempo, los "Elm" una cultura fascinante por sus conocimientos sobre muchas otras culturas y sus tecnologías avanzadas para su tiempo.

Por el aspecto de aquella habitación alguien vivía allí, era muy acogedor, aunque cargado de objetos. Miles de cosas viejas, amontonadas pero perfectamente colocadas espadas, armaduras, esculturas, muebles, mesas y muchos colchones de plumas, objetos de todos tipos como si de un coleccionista se tratase. De cualquier forma, continué comiendo pues debía recuperar fuerzas. El ambiente era cálido y muy agradable había una pequeña hoguera encendida a unos metros de mí y me acurruque junto a ella.

Desperté, ya había caído la noche, una vez más tuve comida a mi lado. Luego de un rato, alguien comenzó a encender unas antorchas pues se podía ver como el pasillo se iluminaba poco a poco a través de una puerta de umbral arqueado y columnas barrocas, simulé que dormía para ver de quién se trataba. Alguien se paró en la penumbra.

- Puedo sentir que no duermes, así que puedes preguntar lo que quieras, seguro estarás confundido. - Dijo la chica desde la oscuridad bajo la puerta. Mientras encendía dos antorchas a su lado que terminaron de iluminar la habitación.

- Es cierto solo quería ver con precaución quién era. Pero sospechaba que debías ser tú.

- Gracias por salvar mi vida.

- Me llamo...

- Te llamas Aron...

- Si, así es, pero ¿cómo lo sabes? – pregunté intrigado.

- Y eres alguien fuerte pero lo has perdido todo, excepto tu hijo.

- ¿Como? - Pregunté.

- ¿Cómo lo sé?, No tengo la menor idea. - Afirmó igual de sorprendida la chica.

- Lo que, sí estoy segura de que el destino y los dioses nos unieron por algún motivo, solo espero que me ayudes a encontrar la respuesta de todo esto. - A lo que respondí algo confundido.

- No sé qué nos unió, pero solo tengo un propósito, necesito destruir a cierta persona, le dije a la chica mientras me sentaba en los suaves colchones de plumas.

El maestro Sun dijo:

Se puede quitar a un general su ejército, pero no a un hombre su voluntad.

Oscuridad por HonorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora