El hombre se proclama hombre, sube victorioso a clamar la cima como suya, cierra los ojos confiado y cómodo, sintiendo el viento acariciar su rostro con fuerza. El hombre siente la victoria cantarle al oído y la gloria besar sus manos, levanta gozoso el mentón para mirar al cielo, tan cerca que puede olerlo; intenta tocar el firmamento.
Abre los ojos, el cielo se aleja, y con su delirio de grandeza. El hombre se descubre escoria, plagado de arrogancia, recuerda que jamás tomó la montaña. Cae rápidamente, la montaña lo rechaza, le hace ver que no es más que un grano de tierra en el suelo.
ESTÁS LEYENDO
Ocaso
Non-Fiction"Estando siempre dispuestos a ser felices, es inevitable serlo alguna vez" - Blaise Pascal Esta no es una historia, es una antología que recopila algunos fragmentos de realidad hechos poesía.
