¡Oh mi dulce princesa! Estás tan rota tanto por dentro que por fuera.
¿Hay algo que pueda hacer por ti?
¡Oh mi dulce princesa! ¿Es que eres un espíritu con un cuerpo?
Has estado esperando una vida llena de luz y felicidad... ¡Y ahora solo mirate!
Esos ojos color del mar están apagados, sin ningún razgo de esperanza.
Con los labios resecos
Y sin un camino por donde ir.
¡Oh dulce princesa!
Lo único que te mantiene viva es tu masoquismo.
¡Oh bella princesa!
Ya no eres lo que tu misma esperabas de ti.