En la clase de educación física, no todos eran fanáticos de la gimnasia y ese día tocaba. Unos cuantos se defendían pero la mejor en ello era Natsumi gracias a todo el entrenamiento que tuvo desde niña, sin embargo, el deporte no era su favorito y en todas las veces que los profesores le sugirieron formar parte del equipo de gimnasia para que aprovechara su talento siempre se negaba. Desde los ejercicios en la colchoneta hasta en la barra fija se lucía y así como algunos la miraban con envidia, otros lo hacían con admiración. Uno de ellos era Ji Hoon que embelesado observaba cada uno de sus ágiles y enérgicos movimientos.
-Es buena, aunque le falta elegancia. Es algo tosca- comentó Kyung.
-Yo creo que es perfecta.
Kyung lo miró incrédulo.
-Me refiero a su técnica - aclaró.
Al finalizar el primer grupo con sus ejercicios, fue turno del segundo y Ji Hoon sabía que sería el hazme reír por su inexistente habilidad en la gimnasia, pero de todas formas daría su mejor esfuerzo no para evitar las burlas sino para impresionar a Natsumi y demostrarle que puede ser un buen guerrero como ella. Sin embargo, el proponerse algo no siempre asegura el éxito si no se tiene el talento. En los ejercicios de suelo únicamente la vuelta canela la hizo bien, con la estrella se enredó y con el pase atrás necesitó ayuda de dos compañeros y acabó golpeando a Kyung en la cabeza con su pierna; en la barra fija - a la cual no le veía la utilidad- se cayó de espaldas y el potro se le hizo imposible de saltarlo. Agradeció que Natsumi no lo viera pues se había quedado acostada descansando sobre una colchoneta.
-No estuve tan mal - dijo Ji Hoon sentándose al lado de la chica.
-Estuviste terrible.
-¿Me viste?
-Por supuesto- se alzó apoyada de sus antebrazos -¿Y así pretendes ser paladín? Te matarán en un abrir y cerrar de ojos.
-No después de que me entrenes.
-Creo haberte dicho que no lo haría. Es imposible, ya eres mayor, es tal cual como la gimnasia o algún otro deporte similar como el patinaje artístico o el ballet, tienes que aprender desde pequeño.
-Pero yo no bailaré ni haré gimnasia en frente de uno de esos monstruos, el combate se aprende a cualquier edad, sólo es cuestión de práctica y disciplina.
-¿Crees que todo esto se trata nada más de blandir una espada? No es una pelea amistosa con una persona, es una lucha de vida o muerte con bestias que se alimentan de humanos. Es mejor que te olvides de ser un paladín y aceptar lo que tus padres decidieron para ti- dejó a Ji Hoon solo.
El chico se tendió boca arriba sobre la colchoneta y por un momento pensó en hacer lo que Natsumi le dijo pero no, no se daría por vencido. Nunca antes había estado tan seguro y determinado en hacer algo, deseaba más convertirse en un paladín a que Natsumi se fijara en él ya que en eso su oportunidad era nula y lo aceptaba, no se lamentaría por una chica.
A la hora del receso después de la clase de educación física, Ji Hoon no se sentó a almorzar como siempre con sus amigos, esperó a Natsumi en la mesa que siempre usa y compró comida para ella. Cuando se acercó con Min Hyuk quiso dar vuelta e irse a otro lado pero Ji Hoon la retuvo.
-Compré el almuerzo para ti, noté que no traías tu bolsa de comida - le dijo Ji Hoon.
-Eso no hará que te entrene.
-¿Entrenar?- preguntó Min Hyuk que no tenía conocimiento de lo que sucedía.
-No te lo dije porque me pareció tan ridículo, pero Ji Hoon tuvo la increíble idea de ser paladín y que yo lo entrene - le explicó. Min Hyuk reprimió una risa.
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La orden de los paladines
FanfictionEn un mundo atormentado por demonios de otra dimensión conocidos como Agmas, existe una orden que durante siglos ha protegido a los seres humanos de esas criaturas y se ha encargado de mantener en secreto su existencia. De generación a generación, s...