Un Día con Dios Volumen 2

Teniendo voluntad en la obra

Éxodo 35:21-22

21 Y vino todo varón a quien su corazón estimuló, y todo aquel a quien su espíritu le dio voluntad, con ofrenda a Jehová para la obra del tabernáculo de reunión y para toda su obra, y para las sagradas vestiduras.

22 Vinieron así hombres como mujeres, todos los voluntarios de corazón, y trajeron cadenas y zarcillos, anillos y brazaletes y toda clase de joyas de oro; y todos presentaban ofrenda de oro a Jehová

Y este es un capítulo hermoso para muchos que trabajamos en la obra del Señor... y nos muestra la importancia de trabajar unidos y voluntariamente.

No hay nada peor que sentir que alguien está obligado a trabajar en la obra, creo que es algo que debe salir de nuestro corazón y más de un corazón agradecido por lo que Dios ha de hacer.

En la obra pasan muchas cosas, hay diferentes personalidades, diferentes opiniones, maneras de pensar pero algo que nos debe unir a todos es la entrega por las cosas del Señor y la satisfacción que esto nos trae a todos cuando estamos en un común acuerdo.

En este capítulo lo vemos claramente todos hacían lo que Dios ponía en sus corazones, unos eran artesanos, otros trabajaban en la decoración del tabernáculo, unas cocían las vestiduras o se encargaban de que todo estuviera preparado para el servicio.

Y así era y es la intención de Dios en cuanto a el pueblo, por eso el apoyo de unos a otros es tan importante, nunca debemos olvidar para quién trabajamos. Nuestro Dios nos da la oportunidad de que cada uno de nosotros haga un trabajo de acuerdo a lo que él puso en nuestro corazón dándonos la oportunidad de desarrollar todas las cosas para honra y gloria de él.

Cuando la iglesia comenzó como tal esto se vio también, lo que nos deja ver la verdadera intención del corazón de Dios.

Hechos 4:32

Todas las cosas en común

32 Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma; y ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común.

Claro eran tiempos de persecución y así la comunidad cristiana actuaba protegiéndose unos a los otros y extendiendo el reino como el Espíritu les permitía y les asignaba.
Compartiendo todas las cosas porque se veían a sí mismo como un pueblo y a pesar de que también tenian diferentes tipos de opiniones como por ejemplo Pablo y Pedro esto no les estorbo para continuar con la obra.

¿No es maravilloso ver lo bien que se trabaja cuando nos mantenemos unidos en la obra aunque tengamos diferentes dones?

La intención del corazón de Dios siempre ha sido que su pueblo tenga la libertad de desarrollar los dones o talentos que Dios le dio, para hacer crecer la obra junto al Espíritu Santo quién es quién se encarga siempre de hacer crecer las obra como tal.