Capítulo 27

1.8K 198 52
                                    

- No no no - me repetía una y otra vez, no podía y no quería asimilar que ese chico llegó hasta mis sentimientos.

Siempre lo traté mal, disfrutaba verlo humillado, nunca lo ví con otros ojos. No entiendo cómo pasó, quizás las semanas que pasaron sin vernos hicieron sus efectos.

Entre el alcohol, la rabia y los recuerdos se me vino a la mente su sonrisa, la manera en que siempre me miraba esperando que yo haga lo mismo por él.

Lo seguí por varios días, sus ojos no brillaban como siempre, su sonrisa al parecer se desvaneció por completo.

No era un cobarde, pero no me atrevía a bajar y hablar con él para al menos solucionar algo. Lo intenté pero me arrepentía al instante.

Pasaron al rededor de dos semanas de no vernos, ya ni el alcohol me ayudaba a olvidar lo culpable y miserable que me sentía.

- Mi último intento.

Conduje hasta su casa, ya no podíamos seguir así, necesitaba al menos pedirle perdón y si ya no me quería volver a ver así sería.

Estaba nervioso porque no sabía cómo iba a reaccionar, pero lo hice.

- ¿Zabdiel? - me impresioné verlo ahí - ¿Cómo está?

- Mal, está muy tenso - respondió algo bajo, de seguro para que no escuche.

- Necesito hablar con él, pedirle - hice una pausa, esto costaba bastante - pedirle perdón.

- Creo que no es el momento, no pienses que no quiero que lo veas, pero no sé cómo reaccione.

- Solo le pido perdón y me voy, por favor.

- Erick deberías esperar un poco, dale unos días. Si quieres yo te llamo para que vengas cuando esté más tranquilo.

- ¿Quién es? Zabdiel - asomó su cara detrás de él - ¿Qué haces aquí?

- Christopher tenemos que hablar.

- LÁRGATE DE MI CASA - intentó agarrarme de seguro para golpearme.

- Christopher cálmate - Zabdiel intentó tranquilizarlo - solo quiere hablar.

- Por favor - pedí acercándome. Me sorprendí al verlo así, estaba temblando de la rabia - escúchame.

No recibí respuesta de él, de a poco se fue calmando y Zabdiel no lo soltó hasta estar seguro.

- Voy a estar adentro, hablen tranquilos.

- Lo siento - fue lo único que salió de mi boca. No decía nada solo me miraba sin expresión alguna - ¿Christopher? - le tomé la mano que en una fracción de segundos estaba en mi cuello.

Me pegó a la pared de la entrada mientras su mano me apretaba más fuerte - para ti todo es fácil.

- C-Christopher suéltame.

- ¿Por qué? A ti te gustaba tenerme así.

- No puedo respirar - mi voz casi no salía y mi fuerza no era suficiente para quitarlo.

Sentí unos pasos y lo único que pude ver era a Zabdiel intentando quitarlo. Cada vez me sentía más débil, mis ojos estaban llorosos.

- CHRISTOPHER NO - sus voces era lo único que escuchaba, mis ojos prácticamente estaban nublados - LO ESTÁS MATANDO.

- ESO QUIERO, QUE SE MUERA.

Pensé que hasta ahí había llegado, de alguna manera u otra Zabdiel logró quitarlo.

Sentía como mi cuerpo se desvanecía cayendo al suelo, me costó retomar la respiración.

Pasaron unos minutos y cómo pude me levanté - ¿Me quieres ver muerto?

- Es lo que más deseo.

- Está bien - le di una última mirada y salí de ahí.

- ERICK - el grito de Zabdiel se hizo escuchar, a pesar de que le hice daño intentó ayudarme - ERICK NO.

Nuestra Lucha - Chriserick (Segunda Parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora