Me puse unos lentes de sol oscuros en caso de cualquier cosa, obviamente de acuerdo a mi traje.
Él se quedó saludando, yo preferí irme a sentar en mi lugar correspondiente, que raro era estar aquí entre medio de toda esta gente.
Ví que iba con su compañero de trabajo al parecer, me molestó ver qué pasó uno de sus brazos por encima de su hombro.
- Hoy no, hoy no - apreté mi mandíbula - es su día.
No dejaban de hablar y él se reía casi a carcajadas, con unas ganas me levantaría a partirle la cara a los dos para ver si se siguen riendo.
Cómo era típico en estas cosas se tardaron un montón, entre discursos, discursos y más discursos al fin era el momento en el que reconocerían a Christopher junto con los demás.
Me tuve que poner de pie ya que todos lo hicieron, aplaudían cada vez que reconocían a uno.
Al fin después de como mil años esperando subió Christopher, se le notaba a lo lejos que estaba feliz recibiendo su reconocimiento. Le guiñé un ojo mientras aplaudía, sonrió de inmediato.
- El regalo - dije al recordar que lo dejé en el auto.
Salí un momento lo más rápido que pude y volví a mi lugar, esperaba que esto no demore tanto.
Ví que venía acercándose a mi ¿Qué le decía? ¿Había que hacer algo en estos casos?
- ¿Podemos salir un momento? - le pedí.
- Si vamos.
No sé dónde me llevó, pero le pedí que fuera en un lugar donde estemos solo.
- Te compré esto - le entregué el regalo.
- ¡Hey gracias! - era un reloj, recordé que nunca le compré otro desde que lo regaló prácticamente.
- Si no te gusta...
- ¡Me encantó! - comenzó a tocarlo - prometo no darlo de pago.
- Te juro que si lo haces te mato - se lo quité para ponerlo en su muñeca.
- No lo haré, no de nuevo - rió.
- Felicitaciones - me acerqué para abrazarlo.
- ¡Muchas gracias! - me rodeó con sus brazos - a los dos - una llamada interrumpió el abrazo - es Zabdiel.
- Qué imprudente.
- Erick...
- Contéstale.
Se alejó un poco para hablar con él, quizás qué cosas se decían que no quería que yo escuche.
- Hasta cuando no está arruina todo - sí, estaba fastidiado con esa llamada.
Por hoy no me preocuparía, el que disfrutaría con su novio sería yo y quién sabe le mande alguna sorpresita.
- Listo.
- ¿Qué te dijo?
- Nada solo me felicitó ¿Celoso?
- Me da igual - levantó sus cejas - ¿Me dejas verlo?
- Sí - me entregó su diploma. Comencé a leerlo, la verdad estaba lindo.
- Deberías enmarcarlo - se lo devolví.
- Sí, quizás lo haga mañana. Tenemos que regresar.
Entramos nuevamente, me sentía algo incómodo pero no era que me desagrade.
- Tenemos que festejar por nuestro lado - le susurré.
- Podemos pasar a comprar algo, no sé si quieres.
- Claro ¿Por qué no? Espero resistas.
- No suelo beber mucho, pero haré el intento.
En mi mente pensaba que cara pondría Zabdiel si se entera con quién pasará el día Christopher, quizás y por esas casualidades de la vida se entere.
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Nuestra Lucha - Chriserick (Segunda Parte)
FanfictionLas personas como yo siempre tenemos nuestro as bajo la manga y al menos yo con las manos vacías no me quedaría. -NO SE PERMITEN ADAPTACIONES-