Nuestra Lucha - Chriserick (Segunda Parte)

Capítulo 4

- Necesito cortar mi cabello, está un poco largo - dije al tocarlo - ¿tienes tiempo?

- Sí vamos.

Fui al lugar donde solía ir antes, me gustaba como dejaban mi cabello. Le dije como lo quería y comenzaron a hacer lo suyo, miraba a Christopher desde el gran espejo que cubría toda la pared.

Después de un rato me miró y le lancé un beso que provocó un sonrojo en él.

Como ya habían terminado conmigo me miré por última vez, aún faltaba algo - Christopher ven.

- Ni lo pienses - dijo de inmediato. Me acerqué a él y lo cogí de la mano para llevarlo.

- ¿Algo en especial? - preguntó el peluquero.

Senté a Christopher en la silla y me puse detrás tocando su cabello - Mmm...tú que sabes de esto ¿crees que un flequillo le quede bien?

- ¿Qué? - fue lo único que dijo Christopher.

- Tiene un cabello muy lindo, de seguro que sí.

- Entonces eso, hacia este lado - pedí y me fui a sentar.

Un cambio no le vendría mal, tenía que sacarse provecho y de eso me encargaría yo. Veía en su rostro que no quería el corte de cabello pero terminó cediendo igual. Obediente el muchacho.

Cuando al fin terminaron con él me acerqué - ¡Wow! te quedó bien.

- Parezco un niño - se quejó.

- A mi me gusta - toqué su pelo.

- Yo debería gustarte - Christopher no lanzaba indirectas, el iba directo a lo que quería. Le pagué al chico y salimos de ahí a una tienda de ropa.

Comencé a buscar la mejor ropa que encontré, mis gustos no cambiaban en cuanto a la ropa, me gustaba lucir bien y ojalá cosas caras.

- Esa no es tu talla Erick - habló después de un rato de silencio.

- Pero la tuya sí, a cambiarse - le entregué la ropa. Dio un respiro y fue a probarse lo que le entregué. Estaba demorando bastante, solo era un pantalón y una camisa - ¿listo?

- Sí - dijo dejándose ver.

- La camisa adentro - desabroché su pantalón para meter la camisa - espera.

Él solo me miraba, lo observé de nuevo para ver que podía faltar. Cogí un cinturón y una chaqueta estilo blazer estampado.

Ya con todo puesto lo miré de arriba abajo, no podía negar que se veía jodidamente sexy - perfecto.

- Creo que me gusta - dijo mirándose al espejo - ¿puedes venir un momento?

Me acerqué para ver que quería, quizás algo le faltaba.

Me tomó por sorpresa cuando me jaló cerrando la puerta, me arrinconó en el pequeño espacio pegándose a mi. Comenzó a frotar su cuerpo con el mio para luego cargarme poniendo mis piernas una a cada lado de su cuerpo.

- Supieras lo acumulado que estoy - dije de inmediato.

- Dímelo a mi - metió su mano bajo mi camisa - quiero hacerlo.

- Vamos a la casa, aquí no - asintió para bajarme.

Pagué la ropa que le pedí que se la lleve puesta, sería un placer quitarla.

Salimos rápido de la tienda al estacionamiento, al parecer Christopher necesitaba este cuerpito y yo no me iba a negar, vine por diversión y diversión quería tener.