The Day I Came Out

Capitulo 5

Alexander siente el calor que le provoca el sudor bajando por su cuerpo. Realmente necesita darse una ducha fria.

El entrenamiento ha sido duro, pero como siempre, para él siempre lo es más.

Y ultimamente es peor, por que su padre esta enfandado con él, su mejor amigo está enfadado con él. JODER.

Hasta él mismo esta enfadado con él.

Se prometío durante las ultimas semanas que no iría al anfiteatro. Promesa tan debil como la dignidad de Jace cuando había un pato cerca.

Siempre había una excusa, que si se sentía mal y la efermera le caia mal, que si le tenía que pedir un libro a Simon o un consejo a Cat.
O incluso a veces tan solo que necesitaba sentir la seguridad que Magnus parecia soltar por los poros.

- Hey bro. - Jace podía estar enfadado, pero Alec seguía siendo su mejor amigo. Y llevaba unas semanas sin apenas verlo.  -¿ te vienes esta tarde?el equipo va a dar una vuelta.

- seguro. - dijo sin mucha conviccion de ir con ellos, ya no sería la pimera vez que se metian en lios - ¿ a que hora?

- a las 7 paso por tu casa. - y así Jace se fue.

Y Alec volvió a romper su promesa.

--------------------------------

A las 7 y cuarto de esa misma tarde, Alec esperando a la salida de su casa  cuando oyo como un coche quemaba rueda. Y a los pocos segundos el Seat de su amigo estaba en frente suyo.

Alec bufo mientras se sentaba en el asiento del copitolo.

Mirando a Jace se recordo a si mismo por que no le gustaba ir de fiesta con sus amigos. Se sentía patetico.

Al lado de Jace, de Izzy, y de Will se sentía insignifacante y sin encanto alguno.
Pero ya era demasiado tarde para poner pies en polvorasa y huir en el aprieto en él que se había metido.

Las bromas constantes y el extravangente y facil humor de los dos Herondale hicieron más amena la noche. Pero eso no evito que fuera una tortura para el mayor de los  LightWood.

Y mientras veía a sus amigos hacer el ridiculo en la pista del baile, se convencía a si mismo que nada podía ser peor qué que todos supieran que esos de ahi esos eran sus amigos.

Estaba muy equivocado.

Al final de la noche, en la que varias ocasiones Alec tuvo que evitar que sus compañeros se mataran o cometieran alguna estupidez.

Logrando varios horribles momentos y otros bastante comicos a lo largo de toda la noche.

Pero lo peor de noche no fue ni de lejos eso.

-Ugh; no saben guardarse su anormalidad para otro momento. - dijo un nuevo chico del equipo, que jugaba como defensa. Del que Alec hacía ya 5 días había olividado su nombre.

Las miradas de todos los jugadores se centraron en la pareja que acababa de entrar en el bar.
Una pareja, de dos chicos.

-ya te digo, no tengo por que soportarlos- dijo otro de los jugadores, Sebastian, con una profunda mirada de asco.

Mirada que fue secundada por un hiriente comentario de Camille, animadora del equipo.

Y un breve asentimiento de cabeza dando la razon que venía de Jace.

De Jace.

De su mejor amigo.

Alec quería defenderlos, quería defenderse. Pero la voz no le salia de la garganta, aunque quisiera gritar no podía. No se sentía capaz.

No era capaz.

Durante un corto pedioro de tiempo tuvo que soportar otros homofobicos comentarios. Hasta que fue demasiado para él, que sentía que en cualquier momento iba a entrar en colera.

Pidío a Jace que lo llevara a casa con toda la normalidad  y tranquilidad que pudo reunir. Y aun así no logro que Jace se convenciera del todo que estaba bien antes de dajarlo en la puerta de su casa.

Donde el chico apenas entro ybsaludo rapidamente  se encerro en su habitación.