Te recuperaré

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Recordaba la sensación de caer y caer sin fin alguno.

Recordaba que en algún momento había sentido frío o calor, sin embrago ahora no sentía aquello...

No podía sentir nada, porque no podía tocar nada, solo era una pequeña alma que había terminado en este mundo.

¿Como? No lo se, solo desperté aquí un día, gracias a un amable muchacho de cabello rubio y ojos azules.

Su nombre era Link, era muy atento y caballeroso aunque tambien era sumamente callado. No lo culpaba, el hecho de que fuera escogido como uno de los campeones era algo que lo tenia bastante tenso. Hoy era un día como cualquiera, me encontraba esperándolo en la casa, tratando de no hacer desorden alguno, aunque eso era difícil ya que era solo un alma.

El había salido con la princesa Zelda a la fuente de la sabiduría. Aunque se suponía que debía de haber regresado ayer, por lo que estaba preocupada, sin embargo confiaba en el. Algo en mi me decía que el era más que un campeón, aunque no lograba recordar de donde sabia aquello.

No podía salir de la casa pues el reino era muy grande y si salia sin Link la gente empezaría a perseguirme, sin embargo el terrible sentimiento de que algo malo le había pasado me comía por dentro. Armándome de valor salí atravesando la puerta, pero cuando lo hice solo pude ver a los supuestos guardianes atacando nuestra aldea, me llene de pavor porque algo malo les haya pasado a Link y Zelda o a los demás.

Flote los mas alto y rápido que pude para poder localizarlos desde el cielo, entonces vi una luz ámbar a los lejos, esa luz... Sin dudarlo volé en aquella dirección lo mas rápido que podía, en momentos como estos realmente me gustaba ser un espíritu, pero al llegar vi el cuerpo moribundo de Link en el suelo.

-No... ¡NO!

Grite mientras iba hacia donde el estaba y revoloteaba a su lado tratando de algún modo de despertarlo.

-¡Zelda has algo!

Grite con tanto miedo, solo me quedo seguir revoloteando a su alrededor mientras ella lo enviaba a una cámara de resurrección.

-____...-comenzo mientras yo me posaba a lado de su cuerpo moribundo. -Esta cámara sera sellada hasta que Link se haya recuperado de todas sus heridas- asenti suavemente mientras no desviaba mi mirada de él.- y necesito que te quedes a cuidarlo...

Mire a la princesa con determinación y asentí con la cabeza, acto seguido todos salieron de este pequeño templo y lo cerraron durante mucho... mucho tiempo.

No se cuantos años habrían pasado desde que nos encerraron aquí, pero era insoportable verlo así, le hablaba esperando aunque sea un sonido, un pequeño murmullo. Pero nada, parecía estar muerto, pero no lo estaba solo estaba dormido.

Había empezado a perder las esperanzas de que despertara, por lo que ya no paraba en aquella cámara, salia a mirar que es lo que había pasado con mi amado Hyrule. Luego de un tiempo me di cuenta de que otra alma vagaba por este páramo, me sorprendí al saber que era el antiguo rey de Hyrule. Era lindo hablar con alguien luego de tanto tiempo, visite cada rincón de Hyrule, recorrí cada camino, rece en cada estatua de la diosa Hylia que me encontraba.

Por el... mas cuando volvía, el seguía sumido en aquel pacifico sueño.

-Oh Link... por favor... vuelve a mi lado...

Dije con pequeñas lágrimas de luz cayendo por mi pálidas mejillas.

-Se... que nunca te lo dije... y se que probablemente no me habrías aceptado... pero te amo Link, lo he hecho desde el primer día en que te conocí, y lo haré aun si nunca despiertas...

Please, Don't Forget (Link Y Tu) One-shots ||CANCELADO||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora