Un chico rubio y de ojos azules, completamente normal, si claro.
Parecía ser que los hombres rubios de Hyrule se habían extinto, ¿porque?
Fácil, un chico nuevo había entrado como aprendiz de caballero, y todas, absolutamente todas las mujeres que vivían en el palacio o lo rondaban, estaban interesadas en el apuesto chico.
Soltaste un suspiro mientras que peinabas suavemente el cabello de la Princesa Zelda y le hacías una trenza baja apretando su cabello con el broche real que le había regalado su madre hace mucho.
-______, cariño, ¿que te tiene tan preocupada?
Dijo tu princesa con una voz suave y una mirada de genuina preocupación reflejándose en el espejo, solo te encogiste de hombros mientras que le ayudabas a acomodarse la corona.
-No es nada Zelda, es solo que... Esos rumores ya me tienen cansada, es de lo único de lo que hablan en el palacio, tratan al chico como si fuera una especie de animal exótico.
Dijiste mientras que te sentabas en su cama y dejabas tu espalda caer en esta, Zelda se levanto de su silla y te observo un instante mientras que sonreía.
-No sera, mi querida ______, que el joven Link te gusta, ¿o si?
Dijo Zelda con cierta diversión en su voz, sentiste como tu rostro empezaba a arder desde las mejillas hasta las orejas, te levantaste rápido y negaste fuertemente con la cabeza.
-¡No, claro que no! O si... N-no lo se...
Volviste a suspirar mientras que ella se sentaba a tu lado en la cama y te tomaba de las manos.
-No hay nada de malo de ser así, tengo entendido que ustedes también se conocen hace mucho, ¿cierto?
Asentiste suavemente y luego miraste por la ventana de la habitación de tu princesa amiga.
-Como sabes, mi padre también era un caballero, miembro de la guardia real de tu padre. En realidad, no es una sorpresa que me hayan encargado tu seguridad junto a Impa.
Le dijiste a Zelda, guardaste silencio durante un tiempo.
-Pero si, conozco a Link hace ya mucho tiempo... Solíamos jugar, y entrenar juntos, pero un día, tu madre enfermo y necesitabas a alguien que te enseñara. Mi madre era una institutriz, como sabes bien y al ser mi padre Co-capitán de la guardia, nos dieron alojamiento. Entonces te conocí, me nombraron tu dama de compañía, y pronto fui tu guardiana.
Dijiste soltando una risa mientras que te sentabas y tomabas sus manos.
-No he visto a Link desde que llego, tengo miedo de que se haya olvidado de mi, digo de ti nunca se olvidaría.
Zelda apretó tus manos haciendo un pequeño puchero, nada propio de una princesa, pero al estar en privado contigo podía darse algunas libertades.
-Solo lo hace porque soy la princesa, nada mas.
Suspiraste pesadamente.
-Zelda, eres hermosa, eres muy inteligente y este tiempo que te he enseñado a luchar a escondida de tu padre hasta demostrado ser capaz de defenderte tu sola. Querida Zelda, no podría luchar contra ti, nunca.
La rubio sujeto un mechón de tu cabello y lo paso detrás de tu oreja con cariño.
-Yo solo tengo un titulo que me hace 'diferente' según el resto, pero tu, eres capaz de todo lo que yo puedo y mas, esas fueron tus propias palabras, ¿cierto mi querida?
Cuando estabas a punto de replicar la puerta fue abierta rápidamente, dejando a una Impa un poco agitada en esta.
-_____, el capitán te espera.
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Please, Don't Forget (Link Y Tu) One-shots ||CANCELADO||
Fanfiction-Tu eres mi razón para seguir luchando... -Y tu la mia para ser mas fuerte y estar a tu lado... Serie de one-shots de Link y tu, espero os guste ^^