10

568 68 0
                                    

SOLAR

Sin darme cuenta comencé a llorar... ¿Cómo había llegado hasta aquí?, ¿Cómo había dejado que las cosas llegaran hasta este punto?, vivir ya se había vuelto doloroso para mí y recordar lo era más, tantos errores, tantas veces que me engañe a mí misma, a mis sentimientos y jugué con mi felicidad y con la de los demás.

A pesar del dolor que este me produjera, volví a recordar aquellas palabras que había pronunciado Moon hace un momento -Has estado tan ocupada en una relación tan destructiva para ti que no te has dado cuenta que hay otra persona dispuesta a darlo todo por ti, que jamás se atrevería a faltarte al respeto..., no te has dado cuenta a pesar de tenerla tan cerca, no te has dado cuenta lo mucho que ha sufrido esa persona para guardar esos sentimientos y sentirse ahora culpable por haber apoyado aquella relación en un tiempo porque solo quería verte feliz ...- ¡¿A qué se había referido con aquellas palabras?, decidí comenzar a rebobinar mi casete y pensar que momentos había pasado por alto

flashback

llegábamos de una larga jornada de ensayos, se acercaba una presentación importante para el grupo, los MooMoos eran muy importantes para nosotras y nos gustaba mostrarles cosas diferentes y, porque no locas y fuera de serie ya que eso era lo que nos identificaba, nuestra rareza.

Nuestros ensayos, esfuerzos y arduo trabajo estaban pasando factura en mi cuerpo, cada musculo me dolía y lo sentía entumecido, sin embargo, seguía ensayando, claro no era la única, Whee In se había doblado algunas veces el tobillo y Hwa Sa se había desmayado de tanto esfuerzo y al mismo tiempo de haberse saltado algunas veces las comidas y por ultima Moon.... Bueno, ella se había adaptado demasiado bien a los ensayos, desde que había llegado había quedado como la mejor en el baile con Whee In, a ella no le había afectado tantos ensayos, de todas, ella poseía el mejor acondicionamiento físico para aguantar tanta presión ya que ella hacia ejercicio todas las mañanas, se levantaba primero que todas y salía a trotar, no solo lo hacía por deporte, algunas veces cuando se enojaba o estresaba de tantas cosas y tantos viajes salía a correr para despejar su mente e iba de vez en cuando a el gym, varias veces me había invitado pero yo como buena perezosa no había accedido y ahora me arrepentía.

Entre primero a la habitación y me lance sobre la cama, detrás entraba Moon cerrando consigo la puerta, me hallaba tan cansada que sentía como mis parpados cedían ante el notable cansancio, cuando estaba a punto de dormirme por completo sentí como alguien tocaba mi vientre, abrí los ojos y lo primero que vi fue a Moon

-No te duermas, tienes que ducharte

-No me quiero parar...

-Ve y lávate, preparare la cena y cuando vuelva debes estar ya duchada- para muchos a yo era la mayor de todas, sin embargo, la que siempre resultaba cuidando de todas, a mí en especial es ella, Moon a pesar de parecer olvidadiza algunas veces, es siempre el cerebro del grupo, sabía todo tipo de cosas y era nuestra chef personal, obvio todas sabíamos cocinar, pero preferíamos que ella hiciera las comidas ya que era la mejor y yo me encargaba de ayudarle en todo momento, también se encargaba cuando alguna de nosotras se enfermaba, en resumen ella sabía de todo un poco, siempre la veías buscando y aprendiendo cosas ya sea en su móvil o laptop, cosa que nos impresionaba a todas. Al ver que yo no reaccionaba agrego –si te duchas... te haré un relajante masaje en todo el cuerpo para que te relajes un poco- lo último, lo dijo con una risa un tanto picarona, cosa que me saco una sonrisa

- ¿Me lo prometes? – el masaje sonaba muy tentador de verdad y termine cediendo haciendo como si de niñas pequeñas nos tratáramos una promesa con nuestros dedos meñiques, Moon salió de la habitación y mientras ella lo hacía me percate que llevaba su cabello húmedo... ¿Cuándo se había duchado?

Dure casi aproximadamente media hora o más en la ducha ya que esta de hallaba en el punto más glorioso que pudiese existir, había lavado mi cabello varias veces para quitar todo rastro de suciedad ya que... debo admitir hacía tiempo que no lo lavaba, frote también varias veces el jabón en mi cuerpo para asegurarme que toda suciedad y malos olores desaparecieran de mi anatomía dejándome con una sensación fresca y algo relajante, aun me dolía el cuerpo pero sentía como me había quitado un peso encima, Salí con toalla del cuarto de baño y fui directo al armario a buscar algo cómodo, encontrando una bata algo corta que no me había vuelto a poner, decidí que era el momento y después de verme en el espejo me di cuenta que era algo corta, así que opte por unos shorts cómodos para ponerme debajo, baje al primer piso y fui atraída por el olor a tostadas y café de la cocina, vi a Moon concentrada picando algunas cosas mientras que otras se hallaban en el sarten preparándose

-Listo, he acabado con mi ducha- debo admitir, a veces me gustaba comportarme como una niña pequeña pero no era mi culpa, Moon me había vuelto de esa forma por sobre-protegerme y cuidarme siempre.

La contraria levanto su mirada y la clavo en mí, sonrió –Estas mejor

-No intentes huir de tu promesa... o tendrás que tragarte un vaso lleno de agujas

-vale, vale, ya entendí, no exageres las cosas, nadie se va a tragar agujas... dame un momento, termino de preparar la cena y antes de dormir habrá masajes... ¿Te parece?, ¿O quieres comer frio?

Con pucheros y también con algún de rabieta acepté, pero este paso después de haber comido con todas, sentí como si aquello que comía fuera un exquisito manjar ya que el hambre que tenía era voraz, Hwa Sa acepto lavar los trastos y Whee In acepto hacerle compañía, Moon y yo subimos a la habitación, cepille mis dientes y acomode mi cama, mañana era sábado, el fin de semana había llegado y con el nuestro descanso así que cogí mi móvil y desactive mi alarma, me tumbe sobre la cama y cuando estaba volviendo a los brazos de Morfeo sentí como alguien tomaba una de mis piernas y vertía en ellas algo frió, abrí rápido mis ojos y me alivie al ver que se trataba de mi compañera de cuarto echándome crema...

-Esta... esta crema te... te ayudara a relajarte...- por alguna razón me pareció divertida la situación, no sabía la razón, pero Moon se hallaba totalmente roja dándole un aspecto tierno, algo que ella nunca admitía, según ella ser tierna no era lo suyo, sin embargo, para mí su ternura era natural e inconsciente, ella era tierna sin darse cuenta en todo momento, cuando se hallaba incomoda, nerviosa, tensa o cansada, cuando estaba alegre, cuando lloraba, cuando se enojaba, en fin en todo momento, claro ella gozaba también de ser la Girl Crush y había que admitirlo también que todo lo que ella se ponía le quedaba bien sexy, desde la ropa deportiva hasta la casual y la elegante, todo gracias a su figura perfecta del cuerpo. Sin desaprovechar la ocasión comencé a molestarla

-Estas roja Moon... ¿Te sucede algo?

-Yo...yo... estoy bien... es... es solo que... eso está muy corto

Aquello me pareció tan inocente y tierno que por un instante me deje llevar y le robe un tierno beso, solo fue un roce de labios, fue algo tan puro e inocente...

Fin del flashback

En ese momento, al recordar ese momento, el primero de muchos besos y uno que otro toque inocente entre ambas, sin que ella protestara o me llevara la contraria sino más bien disfrutándolo, muchas veces donde la atrape mirándome a escondidas... reaccioné, todo este tiempo, sin darme cuenta había preferido a Moonbyul, estuve tan concentrada todo este tiempo en que ella no notara mi dolor, había soportado tanto sufrimiento, había aguantado tantas peleas con Eric por ella y me obligue a mí misma inconscientemente a decirme que aquellos sentimientos, de que aquel aprecio que le tenía era meramente amistoso cuando en realidad era romántico... ¡¡¡JODER, AMABA A MOONBYUL!!!, -todo este tiempo... ¿Cómo es que pude haber sido tan estúpida?- Y Moonbyul me quería también...o al menos eso quiero pensar en este momento, sin embargo, al llegar a esa conclusión algo en mí se contrajo... después de todo este tiempo ¿Moonbyul me aceptará?, ¿seré suficiente?, ¿seré... lo que ella se merece?... y una vez más deje que la tristeza invadiera mi corazón...

A SINGLE HEARTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora