Black & Silver *[SeXing]

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— ¿Qué quieres decir con que se fue? — gruño Lay, sobando el lateral de su cabeza; la cabeza le dolía y le pesaba, como el resto de su cuerpo.

—SeHun se marchó junto a Changmin para detener a Alec y sus aliados. Dijeron que buscarían a los demás dragones. —respondió HoSeok, dándole un té curativo.

— ¿Qué me hizo?

—Dijo que tomo un poco de tu energía élfica, la suficiente para agotarte sin hacerte daño.

—Ese idiota. ¿Qué dijo el alfa?

El pelirrojo suspiro, pareciendo enojado y frustrado. —Ofreció su ayuda por la lealtad de sus antepasados pero SeHun y Changmin se negaron, creen poderlo hacer solos.

Lay bufo, cerrando sus ojos. —Hable con SeHun en mi sueño pero el maldito me saco fuera de sí mismo sin que pudiera decirle algo.

—Wow, no habías hecho eso desde los ocho años. —su hermano lo miro con sorpresa, acomodando su cabello.

—Olvide que podía.

—Realmente lo quieres, eh.

—Cállate.

Ciertamente, SeHun y Changmin se marcharon después de que el pálido lo dejara fuera de combate. Comunicaron que detendrían la guerra que Alec tenía pensado hacer y que tras asesinarlo, restablecerían el orden y traerían el reino de los dragones a la gloria, sirviendo de nuevo como protectores para el resto de los sobrenaturales.

SeokJin intentó convencerlos de aceptar su ayuda y comunicarles su regreso al resto de las razas que le fueron fiel en el pasado, más SeHun cerró los oídos y se marchó, agradeciendo sinceramente la ayuda que había recibido de ellos.

Lay estaba enojado y preocupado, por eso mismo, buscaría a SeHun de nuevo en sus sueños.

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Lay miro el espacio de luz de un bosque que le resultaba familiar pero que estaba seguro, jamás haber visitado.

—Vaya, estás enorme. —escucho de parte de una voz rasposa y profunda. Al girarse, encontró a un fornido y guapo hombre de cabello platinado. —Bueno, es obvio ya que no te he visto desde que tenías ocho.

El lobo lo miro con la boca abierta. — ¿Mi... tío?

— ¡Un tío muy genial! —Jackson lo abrazo, transmitiéndole todo el amor que no le había dado en años. —Mi lindo sobrino ha crecido tan bien. Mi YiXing es un orgullo.

El chico enterró su nariz en el cuello del elfo, recordando el aroma que en sus primeros años de vida lo acompañaron. — ¿Cómo es posible que pueda oler tu aroma?

—Siempre estaremos unidos, somos familia. Fue muy difícil verte en sueños después del ataque de la manada. Tanto, que te olvidaste de mí.

Lay lo miro con pena, recordando que en sus primeros años de vida, Jackson se presentó en sus sueños como un amigo. El antiguo rey elfo jamás le dijo de su parentesco o nombre pero lo lleno de risas y cariño hasta que perdió a su familia y manada. Incluso ahora no sabía su nombre.

—Has sido bueno ¿verdad? Seguro que estas volviendo loco a tu hermano. ¿Cómo esta Hobi? —pregunto, enterneciéndose por ver llorar a su sobrino. Seco sus lágrimas después de dejarlo llorar unos minutos.