No pain, No love (Camila Cabello y Tú) [G!P]

Capitulo 7- Inseguridad segura pt.2

Camila POV

-oh mierda- me giré rápidamente cuando me ruborice. No quería que me viera ni que se acercara a mi. Ahora todo mi cuerpo temblaba, no solo mi voz. Lo quería muy lejos de mi. Le tenía tanto miedo a sus aterradores ojos negros y malvados.

Escuche como una silla se movió muy cerca de mi mesa y cerré mis ojos fuertemente intentando no sacar la lágrima traviesa. Me mordí el labio en un acto de nerviosismo total. El simple hecho de tenerlo respirando tan cerca mío me sacaba de quicio. Un repentino sonido me saco de mis pensamientos aterradores. Salte de mi silla con miedo y me miro a los ojos.

-¿Esta usted bien?- me pregunto con esa suave voz mientras ponía la taza de café en mi mesa. Suspire aliviada con notoria preocupación.

–S-si si, todo está bien– fingí una sonrisa para que no se preocupara y se fue a atender al conocido detrás mío.

Ugh Dios. Estaba tan cerca que podía escuchar su ronca, pero aguda voz cerca mío. La ansiedad me está comiendo viva. Tome un sorbo de mi caliente café notando como mi mano temblaba. Tome una profunda respiración intentando no pensar en... él y en esos recuerdos...

-BOO- Una persona me agarró de los hombros y yo salté aterrada pensando en lo peor.

-¿Te asuste ah?- me pregunto. Sabía de quien pertenecía esa voz. Salte hacia su cuello y la abrace lo más fuerte posible. Empecé a llorar en su hombro avergonzadamente, pero no podía retenerlo, enserio estaba cagada del miedo.

-Cami, lo siento no pretendía asustarte así. Lo lamento- decía sobando inseguramente mi espalda.

-Estoy feliz de que estés aquí- le dije en un susurro. Ella me alejo y me vio a la cara.

-¿Está todo bien?- me pregunto. Me mordí el labio mirando hacia otro lado. ¿Que pasa si ya nos noto? ¿Y si ya nos vio? ¿Que pasa si me vuelve a atrapar? Mis pensamientos eran ahogadores en ese momento. Nos quedamos unos momentos en silencio

-Camila yo de verdad lo sien...-

-¿Podemos ir a otro lugar?- le pregunté con voz quebradiza y ojos rojos. Me miro confundida, pero convencida.

-Claro- me dijo preocupada dándome un beso en la frente.

Sus muestras de afecto ahora eran raras para mi piel, debía apreciarlas, adorarlas, disfrutarlas y suplicar por más, pero ahora estaba en un muy mal momento. Le agarre de la mano, saque 5 dólares de mi bolsillo, los dejé en la mesa debajo de la taza de café y salí lo más rápido que pude del local con la cabeza baja sabiendo que nunca mas volvería, no importaba cuanto me gustara. Ahora siempre me recordaría a él.