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Es reee corto disculpen. Mucho amorrrr 💕

No supieron cómo, pero era como si les hubieran robado cualquier sentido de tiempo y espacio.

¡Y menos mal que habian sido interrumpidos!.

-Perdone señora no quise ofenderla ni a usted ni a su hijo- se disculpó atropellando cada palabra, por miedo a que la hubiese escuchado.

-¿Porqué tanta disculpa?, solo veni y sentate- decia sin entender los nervios de la chica.

Carlitos la miraba a Miriam con cara de "no te escucho". Y empezó a comer como si nada pasara.

Y es que en realidad ninguno habia hecho algo... ¿o no?. Al menos así era para él.

-Tu padre va a llegar más tarde hoy- empezó conversando la mamá- pero al ver la cara de indiferencia suya, se calló resignada.

Ella no creía lo que decía de su hijo, ella veía a Carlitos como un auténtico ángel. Pero su padre lo perseguía como "un perro de caza hambriento", el cual parecía vigilarlo siempre que podía (o mejor dicho quería).

Porque también era verdad que lo querían... Aunque aveces "faltaban" mucho (personalmente).
_______

Miriam caminaba despacio contando sus pasos. Pensaba mucho... ¿Cómo continuaría la vida?. Siempre volvía esa pregunta a su mente.

Pero claro.... "La vida"...

¿Qué es la vida?... ¿Qué es la muerte?. ¿A caso no son dos caras engañosas de la misma moneda?.

Una puede ser linda o fea o ambas... Te pueden cagar, felicitar, sonreir u odiar. Pero podés elegir caminar con la frente en alto igual.

La otra... Te dicen que es cuando te liberas, pero es lo mismo o peor incluso.

Te llevas todas tus culpas, todos tus miedos, tus actos... Y a medida que pasan los días te caes más en un oscuro túnel, el cual termina de sellar el olvido. Hasta volver a nacer....

Como un juego o acto destinado a repetirse una y otra vez.

-Ya no sé cómo seguir o cómo soportar la vida- susurraba pateando una piedrita.

Y entonces sintió una mano en el hombro. Ésta casi le pega con el puño cerrado, de no ser por él que la frenó justo.

-Tranquila soy yo- dijo viendo los ojos llorosos de la joven- ¿porqué lloras?- le preguntó.

-Ya no sé como seguir viviendo. Siento que no sirvo para cosas que se concideran buenas. Nadie me quiere, tampoco tengo familia... Soy un estorbo- respondía sollozando abrazandose a sí misma.

-Che no digas eso- comenzó molesto- debes tener otra clase de talento nena, y sí existe gente que te quiere, está mi mamá, está Ramón que igual no me gusta que esté muy cerca tuyo. No preguntes porqué- dijo al ver su confusión- y estoy yo. Ésta es tu familia y no estorbas. Yo te quiero mucho- terminaba haciendola sonreir de costado.

-Pero me refiero a otra forma de amor- susurró resoplando- nunca me amaron así y no lo van a hacer. Fui hecha para estar sola, incluso pensé en hacerme monja Carlitos.- Le confesó limpiandose la nariz con su manga (lo sé es asqueroso, pero aveces no queda otra y bueh)...

-¡Ah no! ¡Eso no!- exclamó agarrando suavemente su rostro con las manos y besandola como si el mundo se cayera a sus pies...

Miriam nunca había sentido algo igual, esos labios carnosos la estaban volviendo loca. Eran más dulces y suaves que la miel.

-Carlitos...- decía casi sin aire- no creo poder dejar de desear un beso, abrazo o tu propia presencia al lado mío siempre- decía mordiendose el labio.

Éste no pudo evitar sonreirle de forma picara.

-No vuelvas a pensarlo eh.-

-Con lo de recién es medio difícil Carlitos- respondió sarcástica. Le era imposible pensar en eso, cuando recién acababan de besarse de tal manera.

-¿Sabes qué?- consultó abriendo los ojos de forma exagerada Carlitos.

-¿Qué?- indagó sobresaltada.

-Nunca me escuchaste tocar el piano, toco desde chiquito. Si queres te puedo enseñar- le planteó con la voz más tranquila del mundo.

Y así cuando él emprendió su marcha hacia la casa, Miriam lo siguió al lado decidida.

Ya no tenía vergüenza al estar con él y se sentía segura de hablarle de mucho, y de confiarle o confesarle cosas que a otros no. Como por ejemplo: verdaderos sentimientos.

Ambos de algun modo se complementaban, y esto sin duda se empezaría a notar a medida que el tiempo "se pusiera manos a la obra".






SentenciadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora