Vida desastrosa.

Capitulo 1: Rumbo a un lugar desconocido.

Todo empezó mal, tenía demasiados problemas mientras veía que los demás se les veía felices y disfrutaban de la vida, de mientras yo, una chica a la cual le importa mucho la opinión de los demás, siempre estaba atenta a lo que decían, era algo como un vicio, una adicción, me plantee pasar de ello, pero era totalmente imposible.. Vivo en una casita en el centro de Madrid, no muy grande, la verdad es que es una lástima que malgaste mi vida más atenta a los otros que en mi, bueno gracias a todo esto me di cuenta de que mi vida es importante y que en verdad merece la vida tenerla. Decidí marcharme hacer una vida nueva, donde no hubiera padres, ni hermanos, es verdad que echare de menos a todos mis amigos, pero decido irme sin avisar.. Tampoco creo que nadie eche en falta a una chica como yo, tampoco es que sea tan rara, soy normal, bajita, con pelo castaño rubio, ojos azules, es verdad que no estoy delgada, pero ya que voy a largarme de aquí, voy a aprovechar para vivir aventuras.

Me quería ir a un sitio donde no hubiera gente que me conociera, donde pudiera vivir experiencias que nunca había vivido, y un lugar donde no tuviera problemas, vivir tranquila es lo único que deseaba, pero no se si se me hará realidad..  El día llego, me iba, me despedí de mis amigos, y ellos no entendían el por qué lo hacía. Tenía que despedirme de ellos, me conocían demasiado, sabían que me iba, y no podía irme sin despedirme de ellos, más bien de ella.

-¿Por qué te vas Ainara?-pregunto Raquel-¿no tienes suficiente con tenernos a nosotros?

-No es que no tenga suficiente con vosotros, es que quiero vivir aventuras, conocer nueva gente, prometo que volveré pronto- le conteste.

Preferí irme antes de que nos pusiéramos a llorar, no quería que esto se hiciera más difícil de lo que ya se estaba haciendo, me subí al avión, con rumbo a no sé donde la verdad, preferí coger cualquier billete y que el destino me llevara donde quisiera, una señora se sentó a mi lado y intento charlar conmigo para bajarse los nervios que llevaba, era muy maja, tan maja que nos acabamos riendo juntas, la mujer no debía de tener más de 28 años, viajaba sola, tan sola, que me conto toda su vida, era interesante.

-Hola muchacha, donde vas tan sola, con lo pequeña que pareces?-me pregunto.

-No sé donde me dirijo, he tenido problemas.. Coji un billete de cualquier sitio y me subí al avión, voy a vivir aventuras, y usted?-intentaba charlar con ella.

-Yo, bueno yo voy al mismo lugar que tu, si no sabes dónde vamos te dejare con la intriga hasta que lleguemos-me dejo con la intriga.

 Al rato se quedo dormida, y yo también, la hora llegaba estaba llegando a mi destino, muy bien no sabía donde era, era un lugar precioso, con mucha gente, me sentía incomoda, no sabía qué hacer, no conocía nada, por suerte, al bajarme del avión me hablaron, un chico, y por suerte hablaba mi idioma, me di la vuelta le vi y me sonroje.