Gotitas De Amor | Sehun X EXO

Otra vez | SooHun

•Donde Kyungsoo necesita de Sehun...otra vez...

Se muerde el labio pensando en cómo hacerlo.

Está siendo tentado, está pensando en el doloroso desenlace que tendrá solo en el baño sino actúa.

Pero...¿cómo acercarse...otra vez?

— ¿Por qué no te le acercas? Ya lo has hecho antes.

Kyungsoo alza una ceja ante la expresión burlona de su amigo.

Tiene razón.

Ya se ha acercado a ese mesero y bailarín un vez. Vaya que lo hizo.

Aun puede sentir el ardor de sus labios después de tantear más allá... Más abajo de la hermosa curva de su cintura, donde se amplia el mundo en esos gloriosos glúteos redondos.

Las manos le hormiguean ansiosas.

— Déseame suerte.

— Éxito, campeón.

Yi Fan guiña un ojo alzando su botella de cerveza. Kyungsoo traga en seco mientras camina por la multitud bailando, moviéndose entre el calor del baile y del sexo.

Él también lo siente, el calor latino barriendo por sus venas. La sensualidad de ese par de caderas que se acercan a él... Como un felino atrapando su presa.

Sehun parece un sensual leopardo...

Kyungsoo aprieta los puños, las venas se le marcan ansioso de sentir esos colmillos hundiéndose en su piel, suplicando por más.

Una vez más.

— Hola, guapo.

— Te ves fascinante hoy.

— ¿Intentando coquetearme otra vez?

Kyungsoo suelta una risa grave, varonil...Puede notar como Sehun se muerde el labio por dentro y deja la bandeja de bebidas en la barra dibujando una sonrisa en sus labios al mismo tiempo que sus dedos se posan sobre el pecho del hombre mayor.

— ¿Caéras a la tentación hoy?

— Tal vez...

— Tus ojos me dicen que lo quieres intentar...

— Quizá.

— No dudes más...

Kyungsoo toma la mano del muchacho, tan blanca y suave, tan perfecta como esa piel expuesta por la camisa de botones abiertos...esas clavículas húmedas del sudor.

Esos labios rosas dibujan una sonrisa traviesa, Sehun no oculta el deseo que corre por sus venas, se deja hacer y entrelaza sus dedos en la rasposa mano ajena.

Imagina, recuerda lo que es esa mano tocando su piel. Hasta lo más escondido de su cuerpo... Como los pulgares se hundieron en su piel, en la dulce forma en que esos labios en forma de corazón se hundieron en su cuello y succionaron su alma.

— Tengo trabajo que hacer...

— Huye conmigo.

Sehun ríe acariciando el cabello rebelde que cae sobre la frente del otro cuando se encuentra con ese brillo seductor, esos grandes ojos traspasando sus pensamientos.