Cuando Ames| KOOKJIN

09

—¿Me estás diciendo que estás enamorado de tu hermano?— pregunto temeroso. Y sintiendo me totalmente patético. —No sé nada sobre ti a pesar de que tú sabes lo más importante de mí.

Su mano toma la mía haciendo que ambos nos sentemos y sostiene con fuerza mi mano entre la suya. —Lo que te dije antes nadie lo sabe, ahora que lo pienso no se lo he dicho a absolutamente nadie.

—¿Y entonces por qué me lo has dicho?— pregunto confundido.

El sonríe —Por que eres tú—. Me fue inevitable no sentirme alegre así que sonreí levemente. —Bueno, debí haberlo dicho en pasado. Eso creo— murmura tocando su barbilla. —Me tomó por sorpresa saber que va a casarse por ello mi reacción y no negare que me causo un poco de dolor pero supongo es por el tiempo que arrastre este amor.

Me quedo callado sin saber que decir y el toma mi silencio para continuar. —Ahora amo a mi hermano tal como amo a mis padres. Tal vez nunca me perdone el hecho de haberme enamorado de mi propio hermano pero quiero permanecer como su hermano de ahora en adelante, solo como eso.

"Quiero permanecer como su mejor amigo..." Me muerdo el labio al recordar que tuve el mismo pensamiento con YoonGi.

—¿Sabes?. La última vez que nos vimos me preguntó si pensaba casarme así que le confesé que era Gay, ¿Y sabes que dijo?— sentí la voz de Jungkook romperse en cada palabra y llevó su mano cubriendo su boca ocultando sus sollozos. —"Qué siempre estaría a mi lado apoyándome". El sonrió y me abrazo fuertemente... Entonces tome una decisión, deshacerme de los sentimientos prohibidos que crecieron en mí.

Al ver llorar a Jungkook como un niño sentí mi corazón estrujarse así que me acerqué lo suficiente hasta lograr envolverlo en mis brazos, ofreciéndole esta vez mi pecho para llorar; hasta ahora jamás me había tomado a la tarea de verlo más allá que el bromista y tonto hombre que siempre se ríe de todo.
Por qué se que Jungkook debió sufrir más que yo, llorar más que yo. Por un amor imposible, lejano a ser real algún día.

—¡Woah!. ¿Qué clase de servicio es este?— pregunt dejando de llorar con ese peculiar tono de voz juguetón.

—No hace falta que aparentes ser feliz. Llora Jungkook— siento sus brazos rodear con fuerza mi cintura y presiona su cara sobre mi pecho, llorando en el. —Puedes usarme ahora, es mi turno.

—No, Jin. Ya no quiero más esto— me tenso al escuchar sus palabras. —Me gustas y quiero que algún día llegues a amarme de verdad. Sería tan afortunado si la segunda que me enamoro soy correspondido.

Él desliza sus manos tomando mis mejillas y le sonrío. —Al querer olvidar mis cicatrices te volviste alguien muy importante en mi vida— él me mira fijamente. —Cerraste mi herida. Ahora... ¿Esperarás hasta que las cicatrices sanen?

Con lentitud Jungkook lleva mi mano hasta sus labios dejando un suave beso en mis nudillos. —El tiempo que sea necesario.

Dejo caer mi cabeza sobre su hombro sin poder parar de sonreír.

"Si me vuelvo a enamorar me gustaría que fuese de ti..."

—Me esforzaré para enamorarte— Jungkook sonríe acariciando mi mejilla.

Y aunque moría de vergüenza me levanté del sillón, sentándome sobre su regazo. —No creo que debas esforzarte tanto. Estos días no he parado de pensar en ti.

—¿Oh?. Mi encantó funcionó, sabía que no eras inmune— sus manos se detienen en mis caderas y suben por debajo de mi camisa acariciando mi espalda desnuda —¿Acaso este es el coqueto Jin?— ríe suavemente.

—Tal vez...— murmuré antes de inclinarme y presionar nuestros labios juntos. —Yo también quiero hacerte flaquear.

—Eso es muy tentador— responde besándome de nuevo. Esta vez más apasionado, con más fervor.

Más al estilo Jeon Jungkook.

Y estaba bien, estaríamos bien siendo la persona más querida el uno del otro.