02

4.1K 718 104
                                    


Me desperté y no estaba en mi casa. Eran otras sábanas, otra lámpara, otro olor. Comencé a asustarme en cuanto ví junto al balcón sentado a Jungkook observando la ciudad con un cigarrillo en la mano.

Mierda. No me digas que...

—Al fin despiertas. Dormilón— él tira el humo de su boca y sonríe. —Gimes demasiado bonito, pequeño Jin.

Me sonrojo furiosamente y me bajo de la cama. —¿Te aprovechaste de mi estado de ebriedad?

—Es una broma. Tranquilo—. el hombre comienza a reírse y camina hacia mí —Soy un caballero, te lo prometo.

Lo observo de mala manera, debía tener razón, llevaba mi ropa completa y no me dolía mi cuerpo como suponía debía doler después de la intimidad, así que debía ser cierto.

—Entonces gracias por dejarme dormir aquí. Tengo que irme— suspiré mirándolo y le quité el cigarro de la mano para apagarlo. —No deberías fumar, es nocivo para tu salud y para quienes te rodean.

—¿Volveremos a vernos?— pregunta sin protestar por su cigarro.

—¿Por qué habría de?— pregunto confundido.

El se acerca aún más, invadiendo mi espacio personal y coloca su mano sobre mi mejilla. —Ayer te lo ofrecí pero supongo lo olvidaste. Te dije que puedes usarme.

Inclino mi rostro buscando más tacto, de alguna manera creo que es agradable y pregunto. —¿Usarte?

—Para olvidar tu amor no correspondido— al decir esto me alejo de inmediato.

Debería amarrarme la boca cuando bebo, siempre hablo de más.
—¿Cuánto te conté? — pregunto.

—Me dijiste que lo amas tanto que darías la vida por él. YoonGi es muy afortunado— me toma de la mano y me hace fundirme entre sus brazos.
—Es doloroso el tener que esconder tantos sentimientos. Puedes apoyarte en mí, sacia tu hambre de amor conmigo.

Deslizo mis brazos por su espalda y me permito recibir su calor por unos segundos. —Muchas gracias, no cualquiera ofrece algo así. Pero no puedo, eso es algo más doloroso que un amor no correspondido, el estar con alguien pensando en otro.

—¿Al menos podemos ser amigos?— pregunta nuevamente acariciando mi mejilla.

Asiento colocando mi mano sobre la suya. —Preguntar eso es mucho más normal que ofrecerte a olvidar mi amor no correspondido.

—Supongo que eso es un sí— sonríe alejándose y busca algo de entre su cajón.

Lo observo atentamente. —¿Acaso no te cansas de sonreír?. Desde ayer lo has hecho como veinte veces.

—¿Te gusta mi sonrisa?— pregunta rebuscando más rápido en su cajón.

Me encojo de hombros. —No lo sé. Yoonie sonrie más bonito— bromee con lo último.

Y el fingió que le dolió el pecho haciendo una expresión exagerada.
—Eso es cruel, Jin.

—¿Qué buscas con tanto interés?— pregunto curioso.

Al fin saca una libretita pequeña de pasta azul y corta una hojita —Es mi número. Mi celular está en casa de mi hermano y soy muy torpe, no me lo he aprendido aún.

—Oh. Gracias— tomo el papel y lo guardo en el bolsillo de mi pantalón.
—Ahora si tengo que irme.

—Podría llevarte si gustas— se ofrece colocándose una camisa de rayas sobre la playera holgada que lleva.

—Por favor. Es tarde y mi celular se apago— tomo mi abrigo que yace sobre una silla de madera. —Él podría estar preocupado.

Observo a Jungkook tomar unas llaves y rueda los ojos. —No sigas mencionando lo, ¿Acaso quieres romper más mi corazón?.

—Tonto— golpeó su hombro sonriendo.

—¿Tonto lindo?— continua preguntando me y no se calla hasta que digo "sí".

Al llegar a mi casa, en efecto, YoonGi estaba teniendo una crisis nerviosa ya que no le contestaba las llamadas ni mensajes.

Perdón mi YoonGi-chi.

Cuando Ames| KOOKJINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora