Miércoles 10 de Marzo del 2018.
Mi muy adorada dama con antifaz:
No sé que tanto el tiempo se hace debut en el paulatino paso de la vida, pero sé y confío en que nuestro amor no se ve mermado por ello; es más, nosotros desafiando esa ley de que "El Tiempo todo cura y todo acaba".
Cada día los conozco más, cada noche anhelo con más vehemencia el poder tendría entre mis brazos antes de que sus párpados cedan abre el diario cansancio, para después en la mañana admirar su figura y perfil ante los nacientes rayos luminosos matutinos, con su dulce voz acariciando mis oídos.
He estado en soñando tanto en momento en que nos veamos por primera vez... Que se he transformado básicamente en todo lo que pienso muchas veces.
¿Debería vestir formal aquel día en que nuestras miradas se encuentren por primera vez? Después de todo, será el cuarto día más importante de mi vida (si usted quiere, le explicó en otra carta el porqué no es el primero, o el que no esté en el podio, como desee verlo preciosa).
Creo que ya comencé a divagar... Jeje, me suele pasar a menudo cuando empiezo a pensar en su hermosa persona. Pero es inevitable, inevitable siempre que evoco el recuerdo o hecho a correr mi imaginación de todas las cosas que haremos un día, las locuras que inventaremos.
La vida que compartiremos.
Tu y yo.
Sin importar los demás.
Sin importar nada.
Siempre os tendré presente en mi memoria y presente, hermosa y perfecta señorita de la locura de mi vida.
Se despide con el corazón lleno de gozo.
Su desconocido.
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Cartas para una conocida desconocida
Short StoryPalabras en este contexto son innecesarias. Al leerlas se es capaz de inferir que van para una persona, alguien a quien se le debe todo este fluido sentimiento plasmado en una prosa en dedicatoria, a nada mas ni a nada menos que a ti, la bella mujer...
