[Gay] Amor en el Campo

Capítulo 14

Axel y Martín entraron corriendo al único hospital público que habia en el pueblo.
Una de las enfermeras en la recepción les habia dado la información que habian pedido y juntos se dirigieron a uno de los cuartos del pabellon de quemaduras.
Al encontrarlo, ingresaron rápidamente al ver a la pequeña Cleo sentada sobre la cama de hospital.

-Cleo: ¡Papá! - gritó emocionada entre llantos al ver a Axel acercándose a ella para abrazarla - ¡Hermano! - abrazo tambien al moreno que no tardo en soltar unas lagrimas al ver sus manos algo quemadas.
-Axel: Mi amor, perdón, perdón por no estar alli contigo anoche. Lo siento tanto - acariciaba su cabello mientras ella apoyaba su cabeza en su hombro
-Cleo: Fue muy feo papá, las llamas, todo - su llanto se intensificó al recordar la noche anterior
-Martín: Hey, pequeña - imitó a su padre y se sentó en la cama tomándola suavemente de las manos - Ya estas bien, ya paso. Estas bien, no te dejaremos solas de nuevo - se seco rápido una lagrima una lagrima que caia por su mejilla
-Axel: Mi amor - se separó de ella y la miro a la cara - ¿Que fue lo que sucedio en la casa?

.

Anoche...

Ángeles y Cleo corrieron rápidamente hacia arriba al ver como un encendedor lanzado por la ventana desde afuera iniciaba grandes llamas al impactar contra el queroseno que yacía en el suelo de la sala.

Desesperadas, corrieron hacia el primer cuarto que tenia a la mano que era el que la mujer compartia con su marido.
Ambas corrieron hacia ventanas diferente para intentar abrirlas. En el proceso, Ángeles logro ver como dos hombres a lo lejos corrian para subirse a una camioneta y largarse de alli lo mas rápido posible.

Al abrir una de las ventanas, la mas grande y que les permitía salir por alli, ambas ahora debatían como iban a a bajar ya que al estar en el primer piso, la altura era bastante considerada.

-Ángeles: Cleo, mi amor - le hablaba asustada a su hija - Vamos a tener que saltar
-Cleo: Mamá no - la menor ya comenzaba a llorar - Vamos a morir aqui
-Ángeles: ¡No hija, no! No pienses eso. Salta tu primero ¿si?

El suelo de madera ya comenzaba a sentirse caliente debido a la gran altura que habian comenzado a tener las llamas.

-¡Ángeles! ¡Axel! - gritó desde afuera Vicente, su vecino de enfrente que logro ver las llamas y se asomó rápidamente acompañado de su hijo Thales.
-Ángeles: ¡Vicente! Ayudanos por favor - gritó la mujer asomandose a la ventana
-Vicente: ¡¿Donde esta Axel?! ¿Donde estan los demas?
-Ángeles: Solo estamos las dos, ¡no sabemos que hacer! No hay forma de bajar - gritaba desesperada entre llantos
-Vicente: Ve por la escalera - volteo a ver a su hijo - ¡Hijo, ve por la escalera!

El castaño se echo a correr de nuevo hacia su casa en busca de dicho objeto.

-Vicente: Tranquilas por favor, tranquilas. Las bajaremos de alli
-Ángeles: ¡No hay tiempo!

El fuego ya había llegado al primer piso de la casa. El cuarto se estaba empezando a llenar de llamas

-Ángeles: ¡Agarrala Vicente! - comenzo a decirle al hombre de abajo - Cuando salte, agarrala
-Cleo: ¿Que? Mamá no, no te dejaré aqui
-Ángeles: Por favor Cleo, salta antes que las llamas de abajo suban mas. ¡Hazlo!

Muy a su pesar, la menor comenzó a salir por la ventana.
Cuando apoyo las manos alli, logro quemarse un poco, por eso, debió hacerlo rápidamente logrando caer en los brazos de su vecino.