💐 Celos 💐 Showho [Monsta X]

Three Shot

El día era horriblemente perfecto. Había un sol radiante tras claras nubes que eran llevadas majestuosamente por la suave brisa que golpeaba su rostro, incluso era capaz de escuchar pájaritos cantando alegremente junto a las risas de las fans y sus cámaras grabando cada uno de sus movimientos.

Si, un día perfecto para sonreír junto a sus fans en la fanmeeting, Monsta X estaba feliz excepto por cierto conejo musculoso que tenía el ceño fruncido y apretaba el micrófono entre sus manos con fuerza. Su mirada estaba fija en una escena repulsiva (ante sus ojos), Hyungwon estaba abrazando por la espalda a Shownu, era una escena melosa y linda para los demás pero no para él.

-¡Ha sido Monsta X!

Suspiró aliviado dirigiéndose a la camioneta. Al fin había terminado ese día tan mentalmente agotador. Estaban ya en la camioneta, listos para volver a casa, movió la cabeza y giró un poco su cuerpo para ver alrededor, frunció el ceño inevitablemente cuando sus ojos captaron una escena tan asquerosa como la que había visto en la tarde.

En la parte de atrás estaba Shownu sentado en medio de Minhyuk y Kihyun, nada estaría mal si los dos menores no fueran tan empalagosos y confianzudos, Minhyuk tenía la cabeza en el hombro izquierdo del mayor mientras se aferraba a su brazo y entrelazaba sus dedos con los contrarios. Kihyun tenía la cabeza en el hombro derecho y su mano descansaba descaradamente sobre el muslo del mayor dejando incluso suave caricias.

¿Qué hacia Shownu? Absolutamente nada y eso era lo que más le molestaba, el moreno incluso tenía una pequeña sonrisa adornando su robótico rostro, volvió a acomodarse en su lugar y cerró los ojos con fuerza, tal vez dormir le quitaría los extraños sentimientos que lo estaban invadiendo.

-¿Palabras finales?

-Yo, yo, yo...

Intentó contenerse pero fue imposible rodar los ojos al ver que Minhyuk salía saltando lleno de entusiasmo y se apoderaba del micrófono, estaban en un concierto y su humor no había mejorado en los últimos días, incluso había empeorado. Sus ojos desobediencian por completo sus ordenes, siempre había mantenido un ojo sobre Shownu pero ahora era peor, todo se había salido de sus manos. Sin darse cuenta tenía toda su atención sobre ese cuerpo perfectamente esculpido y su innato talento para el baile.

Lo había notado. De hecho siempre lo había sabido pero se negaba a aceptarlo. Shownu era un buen líder, cumplía con los horarios y todas las exigencias, llegaba tarde a casa y de vez en cuando lucia demasiado cansado pero seguía esforzándose por el bien del grupo. Su baile era tan exquisito como su cuerpo y piel acanelada, cuando sonreía sus ojos casi desaparecían haciéndolo ver adorable pero más allá de su atractivo físico estaba el precioso interior, amable, amigable, capaz de escuchar la opinión de los demás y dejarlos quedarse con la palabra aún cuando tenía derecho de hablar más por solo ser el líder.

¡Y ahí estaba! Sonriendo o simplemente ignorando al maknae y su obsesión por morderle los brazos, una idea cruzó por su mente y la desechó de inmediato, no era sano pensar en a qué sabrían esos fuertes y morenos brazos. Desvió la mirada en busca de cualquier entretensión pero nuevamente sus ojos desobediencian, Jooheon estaba convenciendo al líder de hacer caras lindas, sonrió para sus adentros pensando que lo rechazaría pero fue grande su sorpresa cuando Kihyun apareció y entre los dos lograron su cometido.

-Te saldrán arrugas...

-¿Qué?

Miró a su lado notando la presencia de Hyungwon, el menor sorbía su bebida desinteresado como si no fuera dicho nada, lo observó fijamente esperando una respuesta y al fin la obtuvo pero no era algo que esperara. Hyungwon dejó el vaso sobre la mesa y se levantó lentamente agregando dramatismo a cada acción, caminó tan sólo unos pasos y estuvo frente a él, sin decir nada le tocó la frente y se alejó sonriendo.

-¿Qué fue eso?

Se preguntó en voz baja mientras sus ojos volvían a Shownu, quien estaba relajado hablando con Kihyun, frunció el ceño y entonces lo notó. Su frente le dolía por tenerla tanto tiempo arrugada y de algún modo entendió que había estado mostrando lo molesto que se encontraba. Suspiró y relajó todo el cuerpo, debía calmarse, estaba seguro de que muchas de sus fans no habían ido para verlo en ese estado.

Observó con atención a su líder, quien se encontraba rodeado por los demás miembros, riendo, bromeando o simplemente sonriendo en medio de pequeñas palabras. Y quiso estar ahí. Ese pensamiento lo golpeó con fuerza, sus piernas temblaron, se sintió mareado y tuvo que sostenerse para no caer. Quería estar ahí pero ¿Quería estar en el lugar de Shownu o a su lado?

Su respiración se aceleró y luego pareció quedar sin aire, sus ojos picaban, su vista se nublaba, sintió náuseas y su cabeza dolía, también sentía una extraña opresión en su pecho que parecía ser la causante de la dificultad que tenía para respirar. Había cometido un error. Un horrible error. Levantó la mirada y entonces fue capaz de comprender lo que sucedía, en cuanto conectó miradas con Shownu lo entendió, algunas lágrimas huyeron de sus ojos tan cobardes como él, que se encontraba corriendo lejos del lugar.

-¡Wonho!

Ignoró todo. Ignoró su alrededor y a dónde huía. No era consciente de lo que hacía y mucho menos de la dirección que tomaban sus pies, se detuvo cuando el dolor fue demasiado para soportarlo y su respiración parecía no existir, cuando se recuperó un poco miró con cuidado donde estaba. El parqueadero. Escuchó pasos y se ocultó tras el primer auto que vio.

-¡Wonho! ¡¿Dónde estás?! Responde, por favor...

Era Shownu y se oía desesperado pero no era capaz de darle la cara, no así, no en ese momento. Abrazó sus piernas y ocultó su cabeza en medio de ellas llorando, desahogando toda la pena que creía tener, sus sollozos se hicieron más fuertes hasta llegar a los oídos del mayor. Shownu corrió y la imagen que vio al encontrarlo, lo destrozó, se veía tan indefenso y débil. Wonho por fin había dejado salir su verdadero yo. Un chico sentimental, era la mejor forma de definirlo.