14. Nadia

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Alexa pov

Ya había pasado una dos semanas desde que había roto con Tim y las cosas con Emmy iban de lujo. No es que fuéramos pareja ni nada de eso. De hecho desde aquel beso de ese día que estaba llorando no nos habíamos dado ningún otro.

En alguna charlas que teníamos después del trabajo nos sentábamos una encima de la otra y durante las horas del trabajo nos la pasábamos dándonos miraditas que todos sabían que querían decir.

- Alex pasa la bandeja- dijo Emmy entrando por la puerta de la cocina. Rápidamente se le extendí -Gracias- sonrió antes de marcharse.

- se te cae la baba, Alexa- me molesto Jorge mientras me extendía una servilleta.

- Que gracioso. Voy a limpiar la mesa 16- dije observando a los clientes levantarse de la mesa.

En ese momento entró Nadia, mi mejor amiga, por la puerta. Desde que dejé a Tim se acercaba todos los días para tomar un café, decía que así no se sentía sola, aunque en verdad era una excusa para cotillear como me iba con Emmy. Me acuerdo perfectamente de lo que dijo cuando le dije cómo rompí con Tim.

Flashback

-Será mal nacido el cabrón ese. Nadie, absolutamente nadie le dice zorra a mi mejor amiga si no se llama Nadia... voy a machacarle el trasero ya verás.

-Tranquila, no me afectó tanto.

-Claro, porque tu princesa te acogió en sus brazos dándote besitos y mimitos. Así a quien le afectaría. Si cada vez que te insultan vas a tener a la chica esa abrazándote y besándote vas a terminar siendo masoquista. Ya verás.

- eso no tiene nada que ver.

- Ya te digo yo a ti que si. ¿Y que te ha dicho tu padre al respecto?

- no le he dicho lo que me dijo Tim pero si lo de romper y dijo algo como "si ya lo decía yo, esos no llegaban ni al año"- me reí al igual que ella.

Fin del flashback

Observé que Emmy iba a atender a Nadia. Mierda. No quería que Nadia pasara más tiempo del que tocaba con Emmy. Mi mejor amiga podía ser demasiado cotilla algunas veces.

- Peque, quieres que la atienda yo?- le pregunté acercándome a ellas.

-No, está bien, yo puedo- me dijo ella y yo miré fijamente a Nadia, quién sonreía felizmente- ¿puedes dejar esto en la cocina?- me extendió una bandeja vacía.

-claro- susurré tomando la bandeja. Si las miradas mataran mi mejor amiga llevaría muerta desde que le había dirigido la palabra a Emmy.

Llegué a la cocina y dejé la bandeja en la mesa, inmediatamente miré a la mesa de Nadia. O bueno lo intentaba ya que un obstáculo llamado Mar se puso delante.

- Tranquila, dudo que Emmy caiga en los brazos de Nadia.

- No es eso, sólo es que es muy cotilla.

- ¿Como cuando empezaste a faltar a clases para ir a ver los partidos de rugby y ella te siguió?

- Algo así, a si que apártate- me hizo caso y vi a Emmy completamente roja
Ya le había dicho algo inadecuado. Esta Nadia no tenía caso.

En seguida vi como Emmy venia hacía la cocina y dejaba el pedido delante de mi con la cara roja y sin mirarme.

- ¿Te ha dicho algo inadecuado, Peque?- la más pequeña rápidamente negó con la cabeza y se marchó a dar el ticket a unos clientes que lo pedían para poder irse.

Ahora ya te conozcoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora