Nuevas Compañeras

Caminos Aparte, Aún Se Encuentran

- Eso no es verdad ¿Cierto?

- Lo es María José

Poché pensó en que decirle y cómo pedirle que no terminará aquello pero ya suficiente considero ella que había hecho por ambas a lo largo del tiempo que llevaban conociéndose, como Calle no veía una respuesta por su parte tomó su maleta y salió del salón.

Cuando Poché llegó a su casa no quiso cenar nada y se acostó en su cama mirando al techo se quedó pensando en lo ocurrido y tal vez lo que había pasado era lo mejor para ambas.

Transcurrieron los días y el ambiente entre ellas volvió a ser el de un comienzo, sus amigos trataba también de no acercarlas, ya que desconocían como podían reaccionar.

La semana siguiente Poché escucho hablando a Calle con Juan, le decía que su amigo Mario iba a ir a visitarla, por lo cual al día siguiente no iría a clase y así fue. Supuso que era el chico del colegio con el que siempre chateaba Daniela; Poché quería recriminarle pero ya no podía.

En esa misma semana despidieron a Poché de la empresa por recorte de personal, por lo visto aquella no era una buena semana. Así que dejó de asistir a clase, una noche mientras recogían sus cosas para salir de clase Juan y Juana se acercaron a Pau

- ¿Qué pasó con Poché qué no ha vuelto?

Calle prestó atención sin que ellos se dieran cuenta, ya que también estaba preocupada por Poché, había pensado en escribirle durante los días que no había ido, pero sabía que ya no podía o mejor dicho no debía.

- No ha estado bien, le han pasado muchas cosas además - bajo el tono de voz más sin embargo Calle aún escuchaba - está muy agobiada y triste por lo de Calle, la distancia que hay de nuevo entre las dos y no tener nada de comunicación con ella

Calle no podía seguir escuchando, agarró su maleta y salió hacía el baño sin que la notarán, se encerró y comenzó a recordar todo lo vivido con Poché, sobretodo los últimos días en los que habían vuelto a ser como los primeros, la extrañaba y mucho, pero no hallaba la respuesta a que podía hacer.

Al día siguiente como Mario estaba en Bogotá por visitarla, no podia dejarlo sólo, tenían planeado ir al cine cuando Calle recibió una llamada para una entrevista laboral, Mario comprendió y de hecho la acompañó.

Quedaron en llamarla así que al terminar salieron y pasaron el resto de la tarde juntos, la llevó a la universidad y justo en la entrada Poché vio que se despedían, los ignoró y continuó su camino. Eso había sido la cereza del pastel no tenía ánimos de hacer nada y Pau trató de subirle el ánimo pero fue en vano y no entró nuevamente.

La siguiente semana Poché volvió pero no a todas las clases, y aveces veía la misma escena de Mario despidiéndose de su querida. Empezó a pasar hojas de vida pero nadie le llamaba, eso ocasionaba que en las clases no estuviera ni al 20%, simplemente no quería estar allí viendo a Calle o pensando en sus problemas por falta de empleo.

Calle notaba la extraña actitud de Poché, pero no podía hacer nada para acercarse, no debía, era lo mejor. El viernes llamaron a Daniela de la empresa donde había tenido la entrevista y le informaron que había quedado elegida, el lunes tendría que ir a firmar contrato y empezar su nuevo trabajo.

Ese fin de semana eran los últimos días que Mario iba a estar en la ciudad así que el sábado en la tarde decidieron ir a cine. Mientras Calle hacía la fila para comprar los boletos, Mario estaba comprando las golosinas.

Daniela recibió un mensaje de su amigo preguntando por el sabor de la gaseosa que quería, ella le contestó y luego levantó la mirada justo para ver a María José llegar a la fila, volvió la mirada al frente esperando que no la hubiera visto.

Minutos después llegó Mario al lado de Calle, quien estaba a solo un par de personas para llegar a la taquilla y le dio un beso muy cerca de los labios

- Conseguí todo

- Eso veo, pero si quieres ve a una de esas mesas mientras yo sigo haciendo fila

- Nada de eso. Mejor ve tú y yo hago la fila

- Claro que no

- Claro que si

Después de un tiempo al fin Calle decidió aceptar, agarró la bandeja con todo lo que había comprado Mario y se dirigió a una de las mesas, desde ahí veía perfectamente a su amigo y el resto de la fila, incluyendo a María José, sólo esperaba que ella no la notará.

El siguiente en pasar a la taquilla era Mario quién empezó a hacer monerías haciéndo reír a Calle, llegó su turno, pasó y luego fue a donde lo estaba esperando Calle

- Todo listo

- ¿Ya vamos a la sala?

- Si, empieza dentro de poco la película

- Okay

Mario agarró la bandeja y estiró su brazo doblado para que Calle lo sujetara y así fue.

Pov. Poché

Después de todas las malas noticias que he recibido últimamente decidí ir al cine para despejar mi mente, invité a Pau y a Cristóbal pero cada uno tenía reunión con sus familias, también invité a Vale pero papá la tiene castigada por no haber entregado una tarea en el colegio.

Revisé en mis contactos para ver con quién más podía ir pero siempre llegaba al número de Calle y era obvio que no era una opción. Finalmente decidí que iría sola, durante la mañana hice tareas de la universidad y hasta la tarde pude salir. Fui a un centro comercial alejado de mi casa, llegué al piso donde está el cine y comencé a hacer fila.

Lástima que la relación con Calle duró tan poco, no hicimos casi nada juntas, la extraño mucho y tenía pensado brindarle muchas cosas más. Tanto pensar el ella ya me estaba haciendo imaginarla, me parecía verla a unas cuántas personas más adelante de mi en la fila, me quedé observando a aquélla chica hasta que giró un poco y reconocí aquél hermoso perfil que sólo podía pertenecer a ella.

Revisó su teléfono y le sonrió, agh ahí estaba de nuevo su alegría con quién sea que se escribe, ¿Será Mario? ¿No se ha ido de la ciudad? ¿Con quién vino? ¿Podré ir con ella? Pero dejé de pensar en tantas preguntas cuándo vi quién se acercaba a ella, y me congele al ver que la saludaba de beso.