Celos

3.5K 130 29
                                    

Los días siguientes a esos últimos mensajes fueron un poco raros, al menos para mí. Me desconcertaba un poco que al día siguiente omitiese lo que habíamos hablado. No sabía muy bien cómo interpretarlo. Apenas nos vimos en esa semana, Natalia estaba muy liada entre las clases y el trabajo e incluso durmió fuera algunas noches por lo que no coincidimos mucho. Eso sí, siempre nos mandábamos algún mensaje para saber cómo estábamos aunque fuera en el grupo del piso.

Por suerte, y gracias a Marta, encontré trabajo. En el karaoke donde ella trabajaba necesitaban a alguien y ella pensó en mí. Eternamente agradecida la estaré porque no tenía por qué haberlo hecho. Estaba siendo mi semana de suerte, una pequeña editorial buscaba ilustradora para algunos trabajos esporádicos y decidí mandar algunos de mis dibujos. No tenía mucha esperanza pero me llamaron. No era algo fijo pero me dijeron que al menos tendría dos o tres encargos al mes al principio y que si le gustaba a la gente podrían darme algo más estable.

Estaba tan contenta que necesitaba celebrarlo. Era una oportunidad buenísima para mí, quería demostrar que podía vivir haciendo lo que más me gustaba, expresar arte.

Tomar la decisión de estudiar bellas artes fue muy difícil. Tienes que tomar la decisión en una etapa de tu vida en la que todo el mundo parece tener derecho a opinar sobre ella. Todos parecen saber mejor que tú lo que es mejor para ti. Pensé muchas veces que me estaba equivocando, que todo lo que me iba a esforzar no tendría ninguna recompensa. Pero aun así lo hice, en contra de todos los consejos, causando algunas discusiones, tenía que intentarlo. Y cuando empecé las clases supe que todo merecería la pena porque me hacía feliz. Joder, era lo que me apasionaba. Y además, no se me daba mal. Terminé demostrando a los demás que no estaba equivocada. Pero lo más importante es que me demostré a mí misma que si creía en algo podría crearlo.

Por eso tener la oportunidad de trabajar en lo mío me hacía tremendamente feliz. Era mi forma de ser, de expresarme, de contarme. Tenía que celebrarlo así que escribí en el grupo buscando que me acompañasen a tomar unas cervezas:

Yo: "Niñaaaaas! Tenemos que celebrar que tengo trabajo de ilustradora!!! Por favoooor!!"

Marta: "¿En serioooo? Me alegro muchísimo tía, ¿dónde nos vemos?"

Yo:" Donde queráis, estoy por aquí cerca. Solo quiero cerveza, me da igual donde."

Natalia: "Lo siento chicas, tengo planes. Enhorabuena Albi."

Yo: "Ohh bueno, llámanos más tarde si quieres."

Reconozco que un poco de mi alegría desapareció cuando leí que Natalia no vendría. Llevábamos una semana un poco distanciadas y me apetecía pasar tiempo con ella. Estaba empezando a darle vueltas a la cabeza y no quería.

Llamé a Marta y quedamos en vernos en un pub cerca de casa. Con Marta era imposible pasárselo mal, es una tía estupenda y además podíamos hablar de cualquier tema. Tomamos unas cervezas y tapas y volvimos pronto a casa. Había sido un día de muchas emociones y sentía que debía descansar. Me di una ducha rápida y me puse música antes de dormir. Tenía curiosidad por saber qué planes tenía Natalia, me había dado un poco de rabia que no viniese. Cogí mi teléfono y, aunque sabía que arrepentiría, la escribí:

Yo:" Me habría gustado celebrar contigo las buenas noticias. Buenas noches Nat :)"

Imaginaba que no me contestaría porque estaría ocupada con sus planes, aunque tenía alguna esperanza. Escuché un par de canciones más y me dormí.

De repente unos ruidos en la pared me desvelaron. No sabía qué podía ser y me asusté. Miré la hora y eran las 2 de la mañana. Solo hacía media hora que me había dormido. Esperé unos segundos para ver si escuchaba algo más y de repente empecé a escuchar... ¿gemidos? ¿Eran gemidos? Si... y era un hombre. Los ruidos venían de la habitación de Natalia.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 23, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

EfervesenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora