Gabriel Alejandro Gallicchio, 27 años de edad, fanático de Boca Juniors, morocho, con rulos que le caían en el rostro, llegándole a los hombros, de una estatura bastate baja.
Era un chico demasiado alborotado, le gustaba salir, tomar y no centrarse nunca en las cosas importantes de la vida. Le gustaba vivir así, el momento y después olvidarse, en el futuro ya vería lo que haría.Sábado por la noche, y como de costumbre iba a salir, sus amigos no quería acompañarlo, pero ¿Qué más da? Podía divertirse por sí sólo.
Ya conocía todos los boliches de Buenos Aires, pero hoy quería probrar algo nuevo, así que decidió ir a uno que escuchó nombrar por ahí. Tomó el auto, un Peugeot 306 gris, para dirigirse al lugar.
Estaba vestido con un jean negro, roto en las rodillas, una camisa bordó y unas zapatillas negras. Sus rulos estaban sueltos, y se movían con el viento. En la mano, su típico cigarrillo, y en la otra el celular. Estaba en la fila del boliche, y algo le parecía raro, pero decidió ignorar.
Una vez que estuvo dentro, fue a la barra a pedirse una cerveza. Empezó a sonar Ulises Bueno, su cantante de cuarteto favorito, no pudo evitar dirigirse a la pista de baile, quiso sacar a bailar a un par de chicas, pero lo rechazaron «¿Por qué? Si ninguna piba se me resiste» pensaba.
Desvío la mirada al escenario y ahí lo vio, un chico, morocho, alto, de piernas largas y bien definidas. Estaba vestido sólo con un short dorado, muy corto, que marcaba bien su culo y bulto, bailaba de una manera totalmente descarada, los movimientos de cadera eran increíbles.
A Gabriel se le caía la baba, y el corazón le comenzó a latir a una velocidad muy rápida cuando sus miradas hicieron contacto.
El chico de ojos marrones, se fue acercando al de ojos verdes, y comenzó a bailarle. Gabriel no tenía control de sí mismo, empezó a tocarlo, mientras el otro resfregaba su culo, contra el bulto del rizado.Después de unos minutos, el chico se alejó moviendo sus caderas, dejando a un Gabriel totalmente agitado y excitado en la pista. Ahí fue cuando cayó, estaba en un boliche gay, siendo seducido por un chico alto, de mirada profunda ¿Lo peor? Es que le había gustado.
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Dancing in the moonlight { Terminada }
FanfictionUn boliche, un chico delgado de piernas largas y definidas, y Gabriel que no podía quitarle la mirada de encima.