Kim Namjoon es un empresario exitoso junto a su hijo Kim Taehyung.
Namjoon decide apostar gran parte de su dinero contra Min YoonGi, uno de los mejores jugando y apostando.
Lo que no sabe Min, es que Namjoon hace trampas.
-Me vengaré de la peor f...
Desperté en una especie de sótano bastante oscuro y de muy mala espina; No sabía qué había pasado anoche, no comprendía nada. ¿Dónde estoy? ¿Qué pasó ayer? ¿Por qué estoy aquí?
Tenía las manos y los pies atados con una soga, no había ninguna ventana o conducto que me permitiera escapar o algo, solo había una puerta en frente que se abrió de repente; Entró un tipo pálido con la cara un poco cubierta. No sabía que iba a hacer, lo único que sí sabía era que no tenía buenas intenciones.
Estaba tan perdido en mis pensamientos que no me dí cuenta cuándo el tipo había empezado a hablarme.
-¿Oíste lo que te dije?
-E-Esto... Hola.
-... Supuse que eras tonto, pero nunca pensé que a tal extremo. Repito; Te he traído aquí por la deuda que tiene tu padre conmigo. En unas horas se dará cuenta de que no estás en casa y se volverá loco, así que mientras no me pague, tú no te irás de aquí.
¿Deuda? ¿Mi padre...?
-Ahora, llamaré a tu padre y le diré que si no me paga en unas semanas... Su hijo será torturado y asesinado.
Quedé aturdido por las palabras del pálido. ¿Me matará en serio? Sigo sin comprender qué es lo que pasa, sigo confundido. ¿Qué quiere?
-Luego te daré dos minutos para que le digas que estás bien.
El pálido salió del sótano y quedé aún más confundido por sus palabras; ¿Qué habrá querido decir...? No, no podía pensar esas cosas, sí o sí tenía que salir de ahí como fuera, tenía que averiguar una forma. Primero, tenía que desatarme las manos; Hice lo posible para intentar romper la soga pero nada servía.
Me sentía mal, me sentía confuso, no sabía qué hacer o qué hacía allí.
Luego de un rato, vuelve a entrar el pálido pero esta vez con la cara descubierta y así; pude apreciar mejor su rostro.
¿Cómo es que un secuestrador podía ser tan...?
-¿Has entendido?
-...¡Sí!- Asentí mirandole fíjamente, ¿Por qué dije que sí? ¿Otra vez lo mismo? ¡¿Por qué me distraigo tanto?! ¡Esto es serio..!
-Bien, haz lo que te pedí y... Deja ya de mirarme. Eres raro y llegas a darme miedo.
Volvió a salir del sótano y yo aún no comprendía nada.
💰
Pasó media hora. Una hora. Dos horas. O eso creo. ¿Qué debía hacer? No tenía ni la más mínima idea.
Hasta que entró un tipo alto -no como el anterior- a desatarme los pies y manos; Cuando me hizo levantarme volvió a atarme las manos por delante, jalandome del brazo para salir con él.
-¡Oye! ¡¿Q-Qué haces?! ¡Sueltame!
Y él no dijo nada más que llevarme a una especie de oficina o algo así. En la silla del escritorio que había allí estaba sentado el tipo de hace unas horas.
Una hora antes
-Tengo a tu hijo; No te lo pienso devolver si no me pagas. ¿Me has oído? Te queda poco tiempo para darme el dinero o tu hijo no regresará vivo a casa.
-¡¿De qué hablas?! ¡Quiero que me devuelvas a mi hijo ahora mismo!
-Y yo quiero mi dinero; el tiempo corre, tik tak...
💰
-He hablado con tu padre, ahora te toca a tí.
-Tengo un arma, y no dudaré en usarla si dices alguna estupidez. -Diciendo eso, el tipo se acerca a mí por detrás poniéndome un arma en el cuello.
-E-Está bien...- Asentí atemorizado.
El tipo saca un móvil de su bolsillo y marca el número de mi padre mientras seguía apuntandome. Mentiría si dijera que no tenía miedo, ¿Qué debía decir exactamente?
-¡¿Hola?!- Se escuchó al otro lado de la línea.
-¡¿Papá?! ¡¿Eres tú?!- Pregunté emocionado y desesperado a la vez.
-¡Tae! Por favor cuéntame cómo estás, ¿Cómo te sientes? ¿Te ha hecho algo ese cerdo?
-¡No papá! Al contrario, estoy...
Estoy bien.
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