[1] •Hyung, I love u... || 윤민 (Yoonmin)©

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Caminaron con sus dedos enlazados por las calles que eran iluminadas por el sol que ya se ocultaba en el horizonte, habían decidido ir a lugares tranquilos, donde la gente no transitara demasiado.

Si bien eran una pareja, no podían dejar que más de la mitad de Seúl se enterara sobre ellos sólo por caminar en calles famosas y repletas de personas que los reconocerían en cuestión de segundos, no se arriesgarían demasiado, porque está era una de las pocas veces en que lograban pasar tiempo juntos fuera del hogar o estudio y sólo ocurría en el día de su aniversario. Cumplían tres años juntos y ni cuenta se había dado de como el tiempo pasaba tan rápido y ellos seguían siendo una pareja.

Jimin soltó una risa al oír como Yoongi trataba de fastidiarlo sin lograrlo por completo, siendo él quien lo fastidiara por sus palabras absurdas y sin un sentido lógico. Cada día se convencía más de que Min Yoongi le hacía bien a su corazón, así como Park Jimin le hacía bien al de Yoongi.

Besó la mejilla del menor mientras caminaban por el parque cerca al hogar, provocando que el sonrojo en las mejillas del pelirrubio se hiciese presente.

—Jimin... — se detuvo en seco al oír la voz de aquel chico.

—¿Qué mierda quieres ahora? — el mayor se volteó realmente molesto al saber de quién se trataba.

—No estoy aquí para verte a ti, quiero a Jimin — se cruzó de brazos —, necesito hablar con él.

—Tú...

—Está bien — interrumpió todos los improperios que su novio lanzaría en tan sólo un segundo.

—¿Qué..? — lo miró, sintiéndose molesto y confundido, sin saber por qué accedía sabiendo como era ese chico.

—Hablaré contigo — habló hacia Jae —, tienes un minuto para decir todo lo que quieras.

—No hablaré cerca de él. — miró a Yoongi con su expresión seria. El menor está vez estuvo a punto de oponerse, pero el enlace de su mano se deshizo.

—Tratas de besarlo y juro que volveré a golpearte — se alejó de ambos con su ceño fruncido, dejando distancia prudente entre ellos mientras cruzaba sus brazos...

—¿Qué es lo quieres ahora, Jae? pensé que había dejado muy en claro que no te quería cerca.

—Vine a decir que eres hermoso cuando me evades — sonrió, Jimin rodó sus ojos y soltó un suspiro —, bien, la verdad es que necesitaba pedirte...

—No besos, nada que tenga que ver con acercarnos en lo más mínimo — interrumpió inmediatamente.

—Dijiste que leíste mis notas ¿verdad? — ignoró lo dicho con anterioridad.

—Todas, no lo entiendo ¿por qué te esmeras tanto en querer volver conmigo cuando lo arruinaste? — inquirió — Jae, debemos ser honestos y dejar todos estos juegos de «acoso y obsesión» sabes que lo nuestro llegó a su fin, aunque quieras negarlo y te obsesiones con la idea de terminar juntos nuevamente.

—¿Tengo al menos una oportunidad?

—No la tienes. —respondió seguro —, te di demasiadas, tú sólo las desechaste faltando el respeto a mi persona

—Pero te amo, Jimin — cortó distancia con él, pero retrocedió.

—¿Sabes lo que es el amor, Jae? — inquirió — Nunca me amaste ni quisiste como Yoongi lo hace ahora. Jae, admito que hubieron buenos momentos entre nosotros, pero creo que fueron nada en comparación a como te comportaban conmigo.

—¿Tan difícil es aceptarme nuevamente en tu vida?

—Lo es, porque tengo a alguien más que cuida de mi y vela siempre por mi felicidad, es a esa persona a quién amo.

—Bien... — frunció el ceño hacia el chico de cabello azulino a unos pasos de ellos. Se acercó a Jimin cortando lo que había de distancia, pero el pelirrubio volvió a retroceder —No haré nada — está vez se quedó estático, esperando que hiciera lo que quería, menos besarlo o pasar sus limites. Jae simplemente colocó sus manos en el abrigo que llevaba el menor para luego susurrar un «por favor, léela».

—¿No dejarás de enviar notas?

—No, Jimin — ese chico llevaba años siguiéndolo y dejando sus obsesivas notas —, es la única forma en la que puedo tenerte cerca — apoyó su frente en el hombro del menor.

Yoongi veía la escena con algo de incertidumbre hacia aquel chico, era alguien que había dañado a su pequeño para luego volver como si nada malo hubiera ocurrido entre ellos. El ver a Jimin estático sin hacer nada para alejarlo de su cuerpo ni zafarse de aquel abrazo, tragó saliva, no debía pensar cosas que realmente le dolían o sacaran sus repentinas inseguridades. Estaban en su aniversario, había pasado un lindo día con él, sin embargo, verlo en los brazos de su antiguo amor, lo detesto.

—Hyung — llamó — Yoongi — pronunció su nombre — ¡Amor! — alzó la voz, espantando al mayor.

—¿Qué..? — miró hacia ambos lados, el imbécil se marchaba y Jimin estaba frente a él otra vez, ya todo había terminado.

—¿Pasa algo?

—No... — murmuró 

—¿Seguro? — arqueó una ceja, sabía que mentía.

Suspiró: — Sé que es tu ex novio y que tuviste sentimientos por él. Es nuestro aniversario y no debería de pensar cosas que no son, pero es inevitable y... lo siento.

—Hyung — tomó su mano, pero el mayor envolvió sus manos en las de él.

—Te amo — murmuró, Jimin lo abrazó al oírlo, logrando que Yoongi correspondiera y envolviera los brazos en la cintura de su pequeño.

—Lamento si te hice sentir inseguro...

—Sabes que confío en ti... — lo abrazó fuertemente, sin querer soltarlo de sus brazos, nunca.