Aullidos, pequeños aullidos resonaban por la casa. Jin abrió los ojos con flojera viendo que la luz ya entraba por la ventana, observo la hora de su celular solo para darse cuenta que faltaban 5 minutos para que esta terminara por sonar y le indicara que era hora de levantarse para trabajar, bueno, pues ese día gracias a su cachorros comenzaría 5 minutos antes de lo debido, que más remedio. Su esposo, Jungkook, estaba completamente dormido con las cobijas sobre la cara, no quería despertarlo todavía aunque lo más probable es que ya lo estuviera sólo que el levantarse se le haría difícil, no importaba, lo dejaría descansar un rato más mientras se encargaba el mismo de los bebés.
Abrió la puerta de su habitación solo para encontrarse con las pijamas azules regadas por el piso, dos pequeños lobos corrían de un lado a otro por todo el apartamento aullando y gruñendo. Jin al instante se puso algo juguetón y comenzó a perseguir a los pequeños peludos agachándose de bajo de la mesa e intentando alcanzarlos de forma inútil, incluso se dio varios topes de cabeza contra la madera de la larga mesa.
— ¿Qué hacen despiertos tan temprano cachorritos? Su papi está muy cansado, tenemos que dejarlo dormir. — Por fin pudo atrapar al primer cachorro de color blanco como él, dejando varios besos en su hocico mientras este intentaba morderle la cara de forma juguetona. — Hey hey, jugaremos más tarde. —Con su cachorro en brazos fue en busca del pequeño lobo negro al que también termino atrapando y con ambos en brazos fue hasta su habitación para dejarlos en la cama.
Tuvo que buscarles calzoncillos limpios y otro par de playeras blancas para hacer que volvieran a meterse en la cama y se durmieran hasta que Jungkook tuviera listo el desayuno o quizás él podría apresurarse con sus cosas y así podría sorprender a su amado esposo.
Había pasado poco más de una semanas después de su encuentro nocturno en la tina y el omega estaba a nada de entrar en celo, Seokjin tenía que encargarse de eso si no quería tener a varios alfas solteros rondando fuera de su apartamento, se les iría a la yugular a todos. Para evitar conflictos fue hasta la cama donde ya hacía el moreno completamente dormido, tenía un vaso en la mano y en la otra dos pequeñas pastillas de color rosado, sus supresores, los cuales le ayudaría a bajar el olor de sus hormonas y los efectos que ella traían consigo, como volver locos a todos los lobos que estuvieran a 300 metros a la redonda.
— Buenos días, corazón. — Le llamo con dulzura dejando varios besos en su boca y mejillas. — Debes tomar las pastillas. — Lo que recibió a cambio fue un pequeño gruñido y ver como su esposo se daba vuelta en la cama para ignorarlo. — No te pongas berrinchudo, amor, necesito que tomes tus pastillas.
— ¡No las quiero! — Dijo el omega de forma berrinchuda pero con la voz ronca y adormilada. Otro de los efectos que tenía el celo sobre su amado era que se ponía muy terco, demandante y algo agresivo, pero sobre todo fogoso, estaban a tiempo para reprimir esos efectos colaterales que se hacía un poco más visibles.
— Anda amorcito... Hazlo por mí. — Al escuchar esto el lobo negro se volvió a girar sobre la cama para verlo con un enorme puchero marcando en sus labios. Jin solo podía pensar que parecía un cachorro y que se veía de lo más tierno.
— ¿Qué gano yo si me las tomo? — Pregunto con una ceja arriba viendo las pequeñas pastillas en su mano.
— Un beso mío. — Dijo el Alfa abultando los labios y fingiendo acercarse un poco para besarlo pero cuando vio las intensiones del omega de también acercarse para besarlo se quito de inmediato con una sonrisa traviesa. — Sólo si te las tomas, anda. — Movió la mano para incitarlo a tomar el vaso. El lobo legro gruño para si mismo pero termino tomando las pastillas, se las echo en la boca y tomo un gran sorbo de agua para poder tragarlas. — Ese es mi chico obediente. — Está vez lo tomo por las mejillas para darle ese beso que le había prometido.
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Manual para Alfas desesperados. - [ Jinkook ]
Manusia SerigalaLa vida de un alfa esta llena de responsabilidades, sobre todo cuando se es el alfa líder de una enorme manada. Kim Seokjin se da cuenta de que quizás ha procreado a más cachorros de los que les hes posible mantener ¿Cómo explicarle a su esposo Jung...