Nuevas Sensaciones (SDA2018)

Capítulo 4

Holaaaaaaa!!!

Una disculpa por la espera pero entre mudanzas, examenes de mis nenes y mucho trabajo no había podido subir capítulo. Y aparte que ya estoy dandole orden de publicaciones a esta y a mis otras historias.

Bueno los dejo leer y veamos que decisión tomo Angela, haber que les parece

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Pasaban los días y yo no sabía qué contestar, hubo una noche que al asomarme por la ventan de la sala de mi casa, lo vi salir de la suya y dirigirse a la de Anthony. Cuando iba caminando volteo hacia mi casa, cosa inmediata que hice fue cerrar la persiana y agacharme, fue una reacción, al instante me dio un ataque de risa, no podía verme y mucho menos saber que fuera yo, estaba muy oscuro.

Volví asomarme lentamente abriendo la persiana y que fuera una espacio pequeño para que no se viera tan obvio, cuando pude verlos estaban recargados en el carro que estaba afuera de la casa de Anthony, era un bocho de la volkswagen. Al poco tiempo se metieron en él, y sin pasar mucho rato, encendieron un par de cigarros, detesto que la gente fume. Mi mamá también lo hace y se lo he comentado y dejo de hacerlo en frente de mi, pero con David, recuerdo que en una ocasión me comentó que fumaba, cuando estaba nervioso o algo lo tenía angustiado y creía saber que lo que tenía así era mi decisión o a lo mejor me estaba dando mucho importancia y era otra cosa que lo tenía mal.

Sólo recuerdo cómo me pudo verlo, así de triste, cabizbajo y recurriendo a un vicio que nada bueno le dejaría, solo lo calmaría por unos momentos pero sus ansias no se irían hasta que tuviera una respuesta. Respuesta que a lo mejor yo tenía en mi poder y podría liberarlo de ese tormento.

Al día siguiente teníamos asueto en la secundaria, así que todos los que íbamos clases nos quedamos en nuestras casas. Solo que en parte no era tan divertido, mis dos padres trabajaban y por ende no podíamos salir de casa, solo esperar a que llegaran y pedir permiso para poder hacerlo. Yo sé, suena demasiado loco, pero en este mundo nadie está a salvo y mis padres eran o mejor dicho siguen siendo unos protectores, aparte como iba a dejar a Marilyn sola, recuerden era tres años menor que yo y solo tenía en ese entonces 11 años, aún estaba un poco chica.

Para la hora de la comida mi madre ya estaba en casa, como todos los días comimos las tres juntas en la mesa, mientras comíamos, le contábamos lo poco que hicimos en nuestros día. La tarde se fue rápida para dar paso a la noche, ese día estaba decidida a ya no tener miedo o pena de salir de mi casa, cosa que no debería de tener y tuvo en estos días pasados.

Salí de mi casa y me senté en las escaleras de la entrada, no sabía si David había ya salido o estaba dentro de su casa, me sentía nerviosa, no podía negarlo pero al mismo tiempo me sentía un poco aliviada de estar fuera. Varias amistades de la cuadra llegaron y comenzaron a jugar con Marilyn y conmigo. Todo iba normal y tranquilo.

Voltee a ver la calle rumbo hacía la casa de Anthony y pude ver como venían caminando él y David. El nerviosismo había vuelto a mi, me tense de solo verlo, pero en mi cara, en especial mis labios pasó algo, sonreí y él me devolvió la sonrisa. Vi cómo se despidió de Anthony para luego dirigirse hacia donde yo me encontraba, sentía como mis manos comenzaba a sudar un poco.

-Hola - me saludo. Estaba de pie de frente a mi. Como por arte de magia todos quienes estaban jugando cerca se fueron, ni me había dado cuenta cuando se metió a la casa Marilyn.

-Hola - le devolví el saludo con una sonrisa.

-¿Me puedo sentar? - me pregunto apuntando a mi lado. Yo solo asentí con una sonrisa y me hice aun lado para que él se sentara. Era un espacio un poco estrecho, no había mucho espacio como para estirarnos o quedar un poco separados, eso me puso más nerviosa al sentirlo tan cerca de mi.