Capítulo 2

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El inspector Nakamori se sorprendió de la actitud de ambos, vigilaban cada uno de mis movimientos y eso me estaba poniendo muy nerviosa. Así que me dila vuelta lentamente, como quien no quiere la cosa, y empecé a alejarme. Por el rabillo del ojo vi como Conan me seguía y su expresión daba a entender que no dudaría en someterme a un interrogatorio allí mismo, KID estaba muy extrañado con el comportamiento del detective.

KID: Se le nota nervioso, ¿quién será esa chica? – Decidió desaparecer entre una nube de humo para poder caminar tranquilamente por la calle, ya vestido de civil.

Kaito: ¿Pasa algo detective? Te veo demasiado serio... - le preguntó cuándo llegó a su altura.

Conan: Esa chica sabe que soy Shinichi Kudo. Podría estar relacionada con la organización..

Kaito: Conque se trata de eso... Dada la situación, siempre hay que tener en cuenta que pueda llegar a ser peligrosa, pero... es demasiado bonita como para formar parte de esa molesta organización. ¿No crees?

Conan: Eso no tiene nada que ver – dijo con un tono serio que indicaba que en aquel momento no estaba para bromas.

Kaito: Mmm... Ya veo– comentó mientras seguía caminado junto a él.

Conan: ¿Es que quieres venir conmigo por si acaso? – le cuestionó al ladrón al percatarse de que iba vestido con ropa negra y una gorra cubriéndole el rostro.

Kaito: Tengo curiosidad, eso es todo.

Por otra parte, yo continuaba caminando a paso ligero con la idea de poner algo de distancia entre nosotros, pero sin muchos resultados. Llegado un punto me harté de la situación, así que me giré para enfrentarlos.

Tn: ¡Queréis dejar de seguirme! – espeté, como si fuera a lograr que cambiasen de opinión.

Conan: Entonces dinos quien eres – exigió.

Tn: Bien. No soy dela organización si es lo que piensas, ¿contento? – le respondí de brazos cruzados.

Conan: Aunque ahora digas eso, no explica cómo es que conoces mi situación.

Tn: Se muchas cosas,incluso la verdadera identidad de Kaito KID. – Había vuelto a abrir mi estúpida bocaza, el día parecía ir de mal en peor. -Olvidad lo que acabo de decir, ¿vale? – Me giré rápidamente y aceleré para huir, de los que ahora eran dos perseguidores en vez de uno.

Kaito: ¡Oye,espera! – me gritó alarmado antes de salir disparado detrás de mí.

Al final me alcanzaron cuando atravesaba corriendo un pequeño parque que no parecía muy transitado y, de alguna manera, Kaito se las ingenió para dejarme atada a un árbol.

Conan: Te lo repito por tercera y última vez, ¿quién eres? – me presionó, ya cansado de mi actitud escapista.

Kaito: No me gustaría tener que hacerle daño señorita, así que si fuera tan amable de responder – dijo con suavidad aunque su tono demandaba urgencia.

Tn: Yo... - Estaba perdiendo mi compostura y no era capaz de mirarles a la cara, con los sentimientos a flor de piel, lo único que quería era estar en un lugar tranquilo.

Conan: Tu...

Tn: ¡Ah sí, claro!– mi gran arrebato optimista hizo que ambos se quedaran mirándome sorprendidos, mientras yo cerraba los ojos e imaginaba como las cuerdas se aflojaban hasta que noté como finalmente caían al suelo."Pues sí que es útil" - celebré internamente.

Conan: Oye KID, ¿no dijiste que la habías atado bien?

Kaito: Por supuesto que lo hice, ¿quién te crees que soy? No sé cómo se ha podido soltar. - Estaban tensos y en alerta.

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