Todo iba bien... Todo iba tan perfecto... ¿Por qué química tenía que ser tan difícil? Gracias a Dios yo era de las estudiantes que no destacaban mucho, solo un poco por sacar buenas notas pero hoy sería la excepción. La maestra dijo mi nombre... Yo me acerque y me dijo: Ema haz sacado un cinco en el examen de química.- yo recuerdo a la perfección que había estudiado arduamente para el examen, pero al parecer mi esfuerzo no valió la pena.- ¿Puedo ver en qué me equivoqué?- pregunté y la maestra de la manera más agria y sin nada de empatía dijo.- Lo verás en la junta, todavía faltan 49 exámenes más que debo de enseñar... Así que siéntate.
Es lo que más odio de las escuelas públicas, somos 50 aproximadamente en cada salón y solo habían pocos profesores que se toman el tiempo de ayudarte porque al haber tantos alumnos, los profesores olvidan el sentido que tiene su trabajo y solo se enfocan en "enseñar" pero ni siquiera como es debido.
Pero el cinco no era lo que me aterraba, ni lo que pensaran mis compañeros acerca de esto, lo que me daba tanto miedo era el sermón de las montañas y el chanclazo de mi madre que me esperaba en casa "¿Cómo se lo diría?" Pensaba "¿Cómo va a reaccionar?" Me preguntaba, pero tendría que esperar hasta llegar a casa para saberlo, realmente sentía la necesidad de decírselo hoy, o no podría dormir, sin embargo lo que más me ayudaría serían los trabajos y puntos extras que tengo, tal vez no repruebe la materia pero si el examen.
Pero nada de eso me consolaba o tranquilizaba del todo, tenía que hacer algo para desquitarme para desahogarme de esa desesperación y horrible sentimiento de fracaso, las bancas eran nuevas al principio del año, algunas ya estaban rayadas pero mi banca no lo estaba casi para nada, solo uno que otro rayoncito en algún lado, entonces tome mi color rojo y escribí en MAYÚSCULAS para que fuera todavía más notoria toda la furia que tenía la palabra "HOLA".
Muajajaja soy toda una delincuente, después sonó el timbre del recreo y pensé "Bueno tal vez me relaje un poco más" por lo tanto tome mi lonchera y salí.
Ya estando ahí, le conté todo a mis amigos: Flor, Diana, Mariana, Kenia, Simón y Pablo. Ellos seis son mis mejores amigos, Flor es muy amable y tierna, también es muy pacífica y tranquila aunque si tiene a veces sus momentos de locura, Diana es un desmadre, es decir, un terrible desastre, en los exámenes le va "bien" saca generalmente 7 y 8 rara la vez 9 pero no cumple mucho con tareas, creo que solo con la mitad de las tareas que dejan, pero sin duda alguna lo que más le afecta es la conducta, ella es de las más temidas del salón de segundo "C" y considerada la tercera más fuerte de toda la escuela, también la más temida en su antiguo grupo, el "D" pero estaba en ese solo cuando iba al turno de la tarde, la cambiaron para que mejorará, sin embargo no le va taaan bien, pero sí ha mejorado mucho.
Kenia y Simón son primos ellos son muy cercanos pero Simón también es muy cercano a Diana porque ellos tres eran amigos desde los 4 años. Kenia es muy alocada siempre me río mucho con ella porque me celebra todos mis chistes y mensadas. Simón igual pero me identifico más con Kenia, aunque a ambos los quiero igual.
Mariana y Pablo son muy parecidos, ellos son mejores amigos, Pablo también es mi amigo aunque antes solía gustarme y fuimos novios por un tiempo, pero dejamos de sentir lo mismo y creímos que estábamos mejor siendo amigos, el único problema de ellos dos es que desconfían de mi, y cuando me quieren contar un problema muy personal me dicen las cosas a medias, entonces yo casi no les cuento nada a ellos, a nadie de mis amigos les he contado algo muy fuerte que me haya pasado porque de momento no me ha pasado nada, sin embargo todos me dijeron que me preocupaba de más con el 5 que saqué en el examen, porque no me puede afectar mucho a mi calificación.
Decidí tranquilizarme un poco.
Después terminó el recreo y tuvimos las cuatro clases que tenemos siempre los lunes, y llego la salida, yo me voy en transporte, la señora Cecilia nos lleva a casa a mi y a unos nueve niños más, entre ellos va Diana, no suelo hablar mucho con los demás así que Diana ayuda mucho a romper el hielo.
Hoy me tarde más en salir porque el profesor de matemáticas me había pedido un favor.
La salida es a las 2:30pm y la entrada de los que van al turno vespertino es a las 2:50pm entonces al salir suelen estar alumnos muy puntuales ya esperando a que llegue la hora para entrar a clases, entre esos pocos alumnos que van temprano está un muchacho, niño, chico, puberto o como se te de la gana de decirle, tan bello, tan hermoso, tenía el pelo castaño oscuro, piel clara y unos ojos tan resplandecientes, puros y especiales, si ya se... Sueno demasiado cursi pero sus ojos eran tan únicos que me sorprendí al ver unos ojos así, ahí les va la razón uno de sus ojos era color azul, así como el cielo, así merito y el otro era color café pero no café totalmente era un café clarito inclinado ligeramente más a una tonalidad miel, me quedé tan embobada viéndolo que reaccioné hasta que Diana me grito: ¡Ema!- y en ese momento los ojos de aquel muchacho que tanto me fascinaban me miraron, muy nerviosa desvié la mirada y le dije a Diana: Perdón... Ya voy.
Y al momento de voltearme, los nervios que tenía eran tantos que... Simplemente me caí... Si así como te digo me caí, me tropecé y Diana tan buena amiga soltó una carcajada y se echó a reír, entonces una mano se apareció en frente de mi y una voz masculina pero delicada a la vez me preguntó: ¿Estás bien?- al levantar mi mirada vi que eran esos ojos culpables de que me cayera y respondí con tono de estar todavía más embobada de lo que ya estaba: Si... Gracias... Perdóname que torpe soy.- tomé su mano y me ayudó a levantar, después me regaló una ligera y linda sonrisa y dijo: Eres una morena muy linda.- Chin... ¿Acaso quería matarme de ternura?- Bueno nos vemos... Gracias.- dije avergonzada, no sabía si el rubor se notaba en mis mejillas por qué casi no se nota en mi piel morena, luego él se dió la media vuelta me regaló otra sonrisa y se fue.
Diana me miró y dijo: Uuuy le voy a decir a Pablo que tiene competencia.- muy molesta y avergonzada dije.- ¡Qué tonta! Para empezar solo me ayudó a levantarme y Pablo y yo solo somos amigos.- ella tratando de ignorarme dijo incrédula.- Si claro... Y yo vuelo. Bueno vámonos.
Fuimos a la camioneta de la señora Cecilia, y me la pasé todo el camino pensando en él... Y más en esos ojos. Cuando menos lo esperé ya había llegado a mi casa "¡Mierda lo del examen!" Recordé... Lo había olvidado por completo.
Bajé de la camioneta di las gracias, abrí el cancel de mi cochera para finalmente abrir la puerta de mi casa y ver a mi madre ahí, yo lista para oír: ¿Te portaste bien? O ¿No peleaste con nadie? Eso hice, abrí la puerta y vi a mi madre la cual me dijo: ¿Qué tal te fue CIELO?
¿CIELO? Así es lo resalto en mayúsculas ¿por qué mi mamá me recibiría así? Bueno lo siguiente era decirle como me fue... Y contarle del número que no deseaba ver en mi examen.
ESTÁS LEYENDO
Notas a un extraño©
Novela JuvenilEma es una estudiante de segundo de secundaria que sacaba excelentes notas, pero un día reprueba un examen. Ella demasiado enojada escribe "HOLA" en la banca de su escuela creyéndose delincuente sin embargo ella no contó con que alguien le podía con...