De Persecuciones y besos robados.

Primer asalto

Jiang Cheng solo pudo sentir como sus labios fueron tomados por Lan XiChen en un segundo. XiChen había robado su primer beso, en un jadeo y muestra de sorpresa abrió los labios, lo cual fue tomado por el alfa como una invitación para conocer los secretos de esa boca exquisita, pero al momento en que profundizo el beso y disfrutaba de los suspiros de su amado omega, una mano en su hombro lo detuvo. El alfa de XiChen rugió de furia por la interrupción.

Acabando el beso pero sin soltar a Jiang Cheng, quien solo pudo sostenerse de la túnica de XiChen y cubrir su rostro al sentirlo caliente, miró a quien se había atrevido a cortar un momento intimo con su omega.

Quien le sostenía el hombro no era otro más que su hermano, quien le miró fijamente y soltó unas pocas palabras.- Recuerda, así no.

Las palabras lograron que recuperara un poco de lucidez y aflojó su agarre de Jiang Cheng.

-Eso no es justo ZeWu-Jun- habló herido JingYi. –Usaste la voz para poder robar un beso del Líder Jiang.

De tan solo oír la réplica de JingYi, sintió la ira fluir nuevamente en su cuerpo y tenso nuevamente su agarre. No soltaría a Jiang Cheng hasta que sea suyo y ningún alfa pueda arrebatárselo. Que tonto fue cuando tuvo la oportunidad de tomarlo y no lo hizo, porque tuvo que dejar que el tiempo pasara y pasara hasta que no pudo soportar más.

Lan WangJi al notar las acciones de su hermano miró a SiZhui, -Lleva a JingYi lejos de aquí e informa al Tío que necesitamos de su ayuda.

-Como digas, HanGuang-Jun- dijo solemne SiZhui. JingYi al oír las órdenes de Lan Zhan no tuvo más remedio que seguir a SiZhui y abandono la sala de tesoros.

Una vez que ambos se fueron, Lan WangJi volvió a mirar a su hermano y dijo, -Suéltalo, ya se fue.

-Tú sigues aquí, vete- dijo fríamente XiChen.

-Hermano, no es la forma.

-Es mío.

-Aún no.

-Vete WangJi, todos váyanse- ordenó.

Jin Ling no pudo negar la orden por más que quisiera, a pesar de haber tenido entrenamiento para soportar las ordenes de los alfas, todavía no podía hacer nada en contra de las dadas por los alfas del Clan Lan, específicamente de los dos jades de Lan.

Por otro lado, Wei WuXian tomó la mano de Jin Ling y no lo dejó avanzar más de unos pasos.

-Hermano mayor, no nos iremos de aquí sin Jiang Cheng, -dijo renuente a irse sin su preciado hermano. –si en verdad lo aprecias lo dejaras ir con nosotros, prometo que lo llevare a un lugar seguro, donde no este expuesto.

-No.- dijo claramente XiChen sin deseos de soltar a Jiang Cheng, quien estaba mortalmente quieto.

-Por favor, ZeWu-Jun- dijo Jin Ling reuniendo todo su valor. –Prometo cuidar a mi tío hasta que encuentre una forma de quitar la diadema.

-Sólo hay una forma de quitarla.- dijo seriamente

-Si conoces como, entonces dínoslo- dijo Jin Ling, esperanzado.

-Yo seré yo el único que se la quite.- dijo separando un poco su cuerpo del de Jiang Cheng y mirándolo directamente a los ojos cuando el omega levanto la vista. –Sólo necesitas estar de acuerdo mi querido WanYin, ¿me darías permiso para ayudarte?

-Hermano, detente.

-No lo hare WangJi, quiero a WanYin- dijo sonriéndole amablemente al omega.- Quiero que estés a mi lado siempre WanYin.

Jiang Cheng se sonrojo al oír la propuesta de XiChen, y realmente quería aceptar, pero la diadema en su cabeza era un claro recordatorio de que estaba bajo un hechizo. Así que se alejó del mayor de los jades y analizo sus opciones: