capítulo 4

26 2 0
                                    

Gasoline - hasel

Otro día, otro dolor en en el cuerpo. Despertar con dolor ya se ha vuelto el pan de cada día ¿y como no? Si ese maldito no hace más pegarme por cualquier cosa. Me iría de ese lugar y lo dejaría solo sin un solo peso, pero, no es que yo tenga mucho dinero. De poquito a poquito voy recogiendo con la esperanza de que algún día pueda salir de este infierno.

Me levanto de la cama lentamente para no marearme ni sentir mas dolor. Bajo silenciosamente las escaleras y preparó el desayuno para Jaime y para mi, el de Jaime lo dejó en la mesa y yo me como el mío en la mesa, después de eso lavé el plato y me meto a bañar.

Espero a que el reloj marque las 9: 15 y salgo de mi casa, doy un suspiro de alivio al estar bastante lejos de la casa, hoy no me tocó el golpe mañanero.

Pase frente a una casa muy linda, una casa que envidiar, de ella salió una joven de unos ¿15? ¿16 años? Gritando «"¡los odio, son lo peor!" » mire a la chica por un corto tiempo, nada de cortadas, nada de moretones, ropa de muy buena calidad, mejor dicho, todo lo contrario a mi.

-Lo que yo daría por ser ella - susurre.

Seguí mi trayecto de siempre, pase por el asqueroso bar y llegue al McDonald's, donde me esperaban mis compañeros y una chica nueva ¡¿En mi puesto de trabajo?!

-Miller te bajaron de puesto - Aviso Cristian, mi compañero de trabajo - te toca de mesera - simplemente me límite a asentir, me coloque el delantal y la gorra, ahora, a esperar que llegue la gente.

Después de la hora del almuerzo el lugar se comenzó a llenar, no tanto claro, pero igual, siempre habían personas, la mayoría adolescentes

-Miller la mesa ocho - me indicó Alisha, otra compañera, me límite a asentir y me dirigí hacia la mesa, son de se encontraba Roxana con una chica y Steven

-Bienvenidos a McDonald's ¿Que desean ordenar? - pregunte

-Creo que esta es la primera vez en ¡años! Que te escucho hablar - dijo recalcando el "años" Y pues... Que digo, es verdad, me da miedo expresarme - chicos ella es Elizabeth, una amiga mía - me señalo, yo simplemente salude con la mano - Elí, el es Steven - lo señalo - Y ella es Stacy- señalo a la rubia oxigenada

-Nos volvemos a ver - dijo Steven con una sonrisa, dejando a una Roxana muy confundida

-¿Ya se conocen?

-Fue mi mesera la noche anterior en Fine wine - explicó

-Yo quiero una ensalada con H²O - dijo la Stacy cortando con la "conversación"

-Yo una hamburguesa Jumbo - dijo Steven

-Lo mismo de siempre - Dijo Roxana. Lo mismo de siempre es una porción de pollo y una Coca-Cola

-Enseguida se los traigo

-Te pareces mucho a un amigo - agregó Steven antes de irme

Lleve la orden a la cocina y comencé a ordenar las mesas, se me dificultaba moverme porque había una gran fila para pagar

-¡Miller ayudame! - grito la nueva que ni idea de como se llama

-¡Mesa ocho lista! - grito el chef, mire a la nueva me alce de hombros y cogí la orden para llevarla a la mesa ocho, la cara de indignación de la chica me causaba risa

-Aquí está su orden, espero que la disfruten - les entregue a cada quien lo que le correspondía

-Gracias - dijo Steven

-Oye mañana hay una fiesta en mi casa ¿Vamos? - pregunto Roxana con la mínima esperanza de que dijera que si, pero ya todos sabemos la respuesta. Negué levemente con la cabeza - Trabajo ¿Verdad? - asentí

-¿Tus padres no te mantienen o que? - soltó Stacy poniéndome incómoda

-Con permiso - dicho eso me retire.

Amar es destruir y ser amado es ser destruido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora