Deeply in love (Draco Malfoy y tu)

Capítulo 9

DRACO'S POV

Seguí besándola durante un buen rato. Había hecho esto con muchas chicas, sí. Pero nunca repito. Nunca ¿Por qué con ella es diferente? Es verdad que los dos encerrados en esta estúpida habitación... Bueno, pues que algo tenía que pasar. Pocas chicas, por no decir que ninguna, se resistiría a mis encantos en esta situación.

_____ se levantó haciendo que dejara de lado mis pensamientos. Me fijé en como caminaba lentamente por toda la habitación examinándola concienzudamente, sin perder un solo detalle. Se paró delante de un pequeño armario oculto detrás de la mesa del profesor. Se agachó e intentó abrirlo, pero no pudo.

-¿Qué hay aquí dentro?

-Ni idea. Hace años que no usan esta clase. Puede haber de todo. -dije con tono indiferente.

-Pero está cerrado con llave...

-Déjalo... ¿Qué más da? Es un simple armario.

-Alohomora. -susurró ella, como si no quisiera que la escuchara. Tiró de la puerta del mueble y la abrió. Sorprendida sacó unas botellas y me las enseñó. -¿Por qué será que no me creo que no supieras nada?

-¿Qué es? -me acerqué a ella y la quité la botella de la mano. Intenté leer la etiqueta, pero no lograba entenderla. -¿Vodka? Pero...

-Es alcohol, alcohol muggle. -dijo _____ sonriendo maliciosamente. -¿Nunca lo has probado?

-No. Y no quiero probarlo.

-Vamos, no me voy a creer que no supieras que estaba ahí.

-Es cosa de Zabini. A él sí que le gustan esas cosas.

-¿Y Zabini bebe y tu no? Creía que lo hacíais todo juntos...

-Yo solo bebo bebidas del mundo mágico. Nunca tomo nada relacionado con los asquerosos muggles.

-Oh, vamos... ¿Qué pasa? Te da miedo ¿Verdad? -me dijo con tono de burla.

-Dame eso. - la quité la botella de la mano y la abrí. Miré un poco indeciso aquel líquido transparente y sin pensármelo dos veces le di un buen trago.

Noté como bajaba por mi garganta dejando un rastro ardiente. No pude evitar una mueca, lo que provocó una carcajada en _____.

Mosqueado, me senté en el sillón de nuevo y esperé a que _____ se sentara en el otro. La pasé la botella y ella dio un trago más largo. Su cara se contrajo en otra mueca hasta que dió paso a una gran sonrisa.

-Nunca lo había probado, pero había oído que estaba buenísimo. -dijo ofreciéndome otra vez la botella. La agarré con fuerza y volví a beber. Yo no iba a ser menos.

-No está malo. -mentí.

_____'S POV

Un dolor palpitante en la cabeza hizo que despertara. Abrí lentamente los ojos y recorrí con la mirada la estancia donde me encontraba. Poco a poco recordé donde estaba y con quien... ¡Malfoy! Al momento me di cuenta de que la persona que me estaba abrazando era él. Lo observé y me fijé en que estaba dormido. Intenté no sonreír al ver su cara de niño bueno, pero fue imposible. Traté de zafarme de su abrazo sin despertarle, lo hice de todas las formas posibles, pero no había manera. Suspiré e intenté despertarle. Le sacudí por los hombros hasta que emitió un gruñido.

-Malfoy, despierta. -dije empezando a desesperarme. Ese chico tenía un sueño demasiado profundo. -¡Vamos!

-¿Por qué tienes tanta prisa? Te recuerdo que seguimos encerrados.

-Otro que se levanta de mal humor. -resoplé y empecé a zarandearle nuevamente. -Me da igual ¿Qué pasó anoche? No me acuerdo de nada.

-Fue culpa de tu estúpido Vodka o como se diga. Dijiste que me amabas y que no podías vivir sin mi.

-Eso es mentira. Yo nunca diría eso, ni siquiera borracha.

-Dicen que los borrachos no mienten... -se incorporó al fin y me dedicó una sonrisa de medio lado.

-¿Y qué más pasó? Cosas reales, claro. -dije seria.

-No lo sé. Por más que lo pienso no soy capaz de recordar.- Me levanté del suelo y caminé despacio hasta una ventana. Me senté en la repisa y empecé a pensar.

¿Cuándo pensaban sacarnos de allí? Estaba empezando a agobiarme y tenía mucho hambre. Aparte de que necesitaba ver a mi hermano. No podía dejarlo solo en su estado. Suspiré frustrada y apoyé mi frente contra el cristal, que estaba frío. Noté como una lágrima silenciosa recorría mi mejilla. Tenía que acordarme de la carta y mi hermano en ese preciso momento... Cuando podría estar disfrutando con el más guapo de todo Hogwarts. Sentí sus brazos rodear mi cintura. Genial, ahora me vería llorar.

-¿Estas bien? _____...

-¿Eh? Sí, claro. -fingí una sonrisa y sequé varias lágrimas esperando que no me hubiese visto.

-¿Bueno, por qué no ibas a estarlo? Al final de todo estás encerrada conmigo... -me soltó y se sentó a mi lado. -Venga... Dime quién nos ha encerrado aquí.

-No puedo, de verdad. Solo espero que nos saquen pronto... -sonreí amargamente.

Dicho y hecho. Un golpe sordo retumbó por toda la habitación. Unas carcajadas que reconocí al instante me provocaron un escalofrío.

-Vaya, vaya... Hemos pillado al rubito con la afortunada de esta semana. -dijo Fred.

-¿Quién será ella? ¿Será una Slytherin? ¿Una Ravenclaw quizás? -completó George.

Se acercaron a nosotros. Pude observar como la mirada de Draco se iba llenando poco a poco de ira. Volvía a ser su tan conocida mirada de asesino.

-Y la premiada esta semana con los encantos del rubito más arrebatador de toda la escuela es... -volvió a anunciar Fred.

-¿¡_____ Harmon!? -gritaron ambos gemelos al unísono. Su cara era todo un poema.

-Puedo explicároslo, lo juro. -dije tartamudeando por los nervios.

-¡No hay nada que explicar! -dijo Malfoy fríamente. -¡Petrificus totalus!

Por lo visto pilló a los gemelos por sorpresa y calleron los dos al suelo.

-¿Qué piensas hacer con ellos?

-Todavía no lo sé. Pero ya se me ocurrirá algo. Por ahora dejarles aquí encerrados. Que prueben de su propia medicina.

-Pero... No entres en su juego. Es una tontería y te meterás en un lío.

-Tú eliges ¿Vienes o te quedas?

Fue con esa pregunta cuando me di cuenta que era una más. Que una noche con él no me había hecho especial, ni mejor que las demás. Que había sido su pasatiempo y que pronto tendría a otra entre sus brazos porque... ¿Acaso no es así?