capítulo 13

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Emily empezaba el día siendo supervisora. La había ido a recoger a su casa John, el encargado de su sector. En el coche, le explicaba lo que hacían nada más llegar, que era... Coger las fichas, coger la furgoneta, ir al sector, recoger a los de la noche y llevarlos a la entrada después de ficharlos en la lista, esperar a los del turno de la mañana, llevarlos al sector después de apuntarlos a la lista, volver a las oficinas de la fábrica y entregar la lista a Violet. Luego, si no había reunión a la fábrica, tenían que ir a las oficinas de la central. Allí, tenían papeleos para rellenar y demás, luego, ir a la fábrica para recoger a los del turno de la mañana, hacer lo mismo como los de la noche y recoger a los del turno de tarde y así, sucesivamente...
Era mucha información. Demasiados viajes... Pensó Emily. Era una tontería, podrían hacerlo los encargados mientras que los supervisores se encargaban del papeleo y las reuniones y demás. Y si se lo decía a Daniel? A lo mejor sería una solución para no ir de culo... Los supervisores no paraban en todo el día. Si, era mucho dinero, pero... Demasiadas horas para hacer tonterías. Podrían no malgastar ése tiempo y aprovecharlo para otras cosas... Aún así, Emily prefirió guardarse eso para ella.

Llegaron a la fábrica y empezó el día. Como llegaban media hora antes, fueron a tomar café con el resto de supervisores y encargados a la cafetería privada en donde estaban las oficinas. Eran todos hombres, pero muy simpáticos. Le explicaron que cada semana, uno de ellos traía el desayuno para la primera hora. Croasants, pastas de todo tipo, galletas, bocadillos, etc...
A Emily, no le tocaba hasta dentro de tres semanas llevar el desayuno. Reía al ver a algunos encargados hablando sobre el horario que tenían sus esposas en sus trabajos. Decían, que en más de una ocasión ni se veían.

A la hora, fue a coger la furgoneta. Se sentía extraña al cogerla. Llegó rápidamente al sector y esperó a los del turno de noche.
John, estaba dentro esperando que saliesen y de paso recogía las listas de piezas que se habían echo para entregárselas al encargado de otro sector.

- vaya ... Ya tenemos con que distraernos - dijo uno cuando vió a Emily apoyada en la furgoneta. Ella, elevó la vista frunciendo el ceño

- buenos días - dijo ella haciendo caso omiso.

- buenos días - respondieron el resto menos ése hombre que la miraba de arriba a abajo

Emily se puso a contar y decir sus nombres. Ellos respondían y ella apuntaba

- te sentirás dichosa, enhorabuena - dijo ése hombre de nuevo.

- porqué razón? - preguntó ella sin entender

- bueno... No todos los días se consigue un puesto como este. No?

- supongo, gracias

- vaya! Tampoco eres lista para encajar el sarcasmo - se burló

Emily lo miró extrañada. A qué venía eso? - no sabía que estabas siendo sarcástico. Tienes algún problema?

- bueno...si tú

- tú dirás entonces

- es más bien una pregunta

- bien, hazla - dejó la lista dentro de la furgoneta en el asiento del copiloto

- me preguntaba y creo que no soy el único al que le ronda por la cabeza... Es que... Cuántas veces te habrás tenido que arodillar para obtener el puesto de Harry

Mientras decía eso, el resto de hombres no dijo nada, se quedaron paralizados. Emily también quedó en shock. Sabía a lo que se refería pero no sé esperaba eso... En aquel momento, llegaba John que había oído por encima y cuando estuvo a punto de contestar... Lo hicieron por él... - espero no haber oído bien - salió del coche Daniel dando un portazo y a grandes calzadas se posicionó en frente de ese hombre que tenía los ojos abiertos como búho. - y bien?

El capullo de mi jefe (TERMINADA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora