Cerré la puerta detrás de mí, mis lágrimas salían, no podía ser cierto, Sherlley no es una mala persona, esa persona no fue Sherlley.
''No confíes en Sherlley''
Sherlley jamás me haría algo así, si se casó a escondidas, pero por sus padres, claro tenía diecinueve cuando se casó, y sus padres no dejarían que arruinara su vida de esa manera.
Pero por otro lado está... Ella jamás, nunca nos ha hablado de su esposo.
¿Podría ser una mentira?
No, claro que no. Ella jamás me mentiría de esta manera.
Limpié mis lágrimas, necesitaba respuestas, y sé quién puede dármelas.
-Claire: ______, Sherlley te busca.
-Tu: ¿Sherlley? -Mi corazón paró en seco. ¿Qué quería?
-Claire: Si, Sherlley. ¿Pasa algo? Estás muy pálida.
-Tu: No, estoy bien. Seguro debe ser que estoy muy cansada -Sonreí.
-Claire: ¿Le digo que pase o vas a bajar?
-Tu: No, yo bajaré. -Mi mamá asintió, y yo bajé. Ella estaba sentada en el sofá, y en sus piernas estaba Santiago, cerré mis manos en puño, una lágrima rodó por mis mejillas, la quité inmediatamente- Sher.
-Sherlley: Oh, ____ no me di cuenta cuando llegaste -Me sonrío. <Hipócrita> Pensé.
-Tu: Acabo de bajar, estaba en mi habitación. ¿Para qué viniste?
-Sherlley: ¿Acaso no podía venir a visitar a mi amiga? Supe que tú y Harry suspendieron su boda, lo lamento.
-Tu: Has estado desaparecida estos últimos días -Me crucé de brazos- ¿Dónde has estado?
-Sherlley: Fui a visitar a mi esposo a Estados Unidos.
-Tu: Oye, Sher. Nunca me has contado como se llama, ni no los has presentado.
-Sherlley: _____ lo que pasa es que es una persona muy ocupada, pero pronto lo conocerán -Sonrío. <Que sínica> Te digo, sigo lamentando lo de Harry.
-Tu: No te preocupes. Hemos vuelto a reanudar nuestra boda, para dentro de tres semanas.
-Sherlley: ¿No crees que es muy pronto?
-Tu: No. ¿Por qué habría de serlo? El me ama, yo lo amo, tenemos un hijo, él está muy grandecito como para saber lo que quiere, y yo ya soy mayor de edad.
-Sherlley: Lo digo, porque bueno, han pasado tantas cosas, el secuestro de su hermana, el accidente con Adam, ¿Por qué no esperas un tiempo?
-Tu: ¿Un tiempo para que, Sher? No hay que esperar tiempo, Adam ya está tras las rejas, a no ser que alguien más quiera soltar los trapos, y declararse nuestro enemigo ¿No?
-Sherlley: Solo decía -Estaba tensa, lo sentía.
-Tu: ¿Tu acaso no quieres que Harry y yo nos casemos?
-Sherlley: Ja, por favor ___ que cosas dices, no hay nada más en este mundo que yo quiera que ver a mi mejor amiga feliz.
-Tu: Bueno, entonces, que no se hable más -Sonreí- Quiero que traigas a tu esposo a mi boda.
-Sherlley: ¿Que...ee? -Titubeó.
-Tu: Eso, será lo mejor para conocerlo.
-Sherlley: Trataré de convencerlo, él es una persona muy tímida.
-Tu: Claro.
(...)
Narra Harry.
Me sentía desbastado, una basura completa, mi hermana estaba sentada en un sofá, su rostro estaba entre sus piernas, mi madre estaba hecha un mar de lágrimas, y yo simplemente quería desaparecer.
Miré aquel hombre con toda la ira del mundo, y me acerqué nuevamente a él.
-Harry: Mi hermana no saldrá de esta casa.
-Des: ¿Crees que te haré caso?
-Harry: Mi hermana se queda -Me acerqué a él amenazante- ¿Qué hará contigo? Ni siquiera la conoces bien, aquí está mejor.
-Des: ¿Mejor? A tu hermana le desgraciaron la vida, y ahora sale con alguien once años mayor que ella, ¿Y aun quieres que esté aquí? Sabes que si llevo a tu madre a tribunal, me dará la custodia de tu hermana.
-Harry: ¿Quieres que esto sea peor? ¿Por qué no haces algo bueno por ti, y por nosotros? Vete, no haces falta. Nunca lo hiciste.
-Gemma: Harry -Murmuró su hermana.
-Harry: Gemma, ve a tu cuarto.
-Gemma: No quiero, solo quiere que él se vaya. No me hace bien verlo.
-Des: ¿Tu quién eres para hablarme así mocosa?
-Anne: ¡Ella tiene todo el derecho! tú no eres nadie, no puedes venir así por así, a querer quitarme a mi hija, sólo por un capricho tuyo. Los he cuidado estos últimos treinta años. ¡Así que no tienes derecho!
-Des: ¿Cuidado? -Río- No me vengas con eso, Anne. Dime creme que si hubieses cuidado de tus hijos bien, tu hijo mayor ¿tuviese un hijo a esta edad? Un bastardo que por falta de condones lleva el apellido, o que tu hija, haya sido violada, Eso jamás hubiese pasado si tuviera esa custodia, así que no vengas de buena voluntad, mañana vengo por mi hija.
-Harry: ¡Sobre mi cadáver Gemma sale de esta casa! Y si intentas algo, juro que aunque seas mi padre, sería capaz de matarte yo mismo.
