•-Reencuentro De Amor-•

Capítulo 29

•A partir de este capítulo hasta que termine la historia será narrada por los cuatro chicos y también Andrés• Gracias por leer❤️

Narra Felipe...

Desde que "mí padre" nos abandono, tanto a mí como a Lara, Andrés nos acogió en su casa. Claro al principio nos comportamos como unos insoportables porque no aceptabamos que él nos tratará como su hijo.

Lara aprendió más rápido a ser la única hijastra de Andrés, porque ella se considera su hija. A mí aún me falta un poco, soy algo más desconfiado que ella. Claramente se nota, porque desde que llegué no soy muy de intercambiar palabra con Logan o Andrés. Con Keylor si hablo ya que el mientras mamá y papá estuvieron juntos el estaba en casa.

«La confianza es algo que se gana», esas palabras las recuerdo. Mamá siempre nos la decía a mí y a Lara, supongo que era por temas como este, de quedarnos a vivir en cualquier lugar. Mamá ya nos había contado la historia que estuvo con Andrés, pero igual aunque ella nos tratará de decir que él fue el mejor hombre, para mí no era así. Ya que mí padre fue el único que estuvo conmigo.

Si lo sé es algo obvio, pero claramente se me hace raro vivir en un lugar donde el ex de mí madre está.
Pero debo acortarlo ya que gracias a él, yo y mí hermana no estamos en un internado, o algún orfanato. Gracias a él puedo decir que tengo una familia, ya que tanto Andrés o Logan me tratan como un hermano e hijo.

Como ya dije, se me hace raro llamarlo papá pero supongo que con el tiempo me acostumbrare.
Mire la puerta, ya que se sintio un pequeño golpe en la puerta.

—Felipe, abre, soy Lara— dijeron, guarde la foto que tenía de mí madre en el cajón de mí mesa de noche. Me limpie las lágrimas y me encamine a la puerta, la abrí, cuando entró me miró, —¿Estabas llorando?— pregunto.

Negué, me miró incrédula.

—Vivimos 15 años juntos y tú estás diciendo que no, no puedes negarme algo que es obvio tonto— caminé de nuevo a la cama, —A veces me pongo a pensar y me dan ganas de preguntarle a papá si te dejaron caer cuando eras pequeño— dijo en tono de broma. Una pequeña sonrisa salió de mí boca.

—Y a mí me dan ganas de preguntarle al mundo, porque es tan injusta la vida— dije, y ella se sentó a mí lado.

—Sabias que eso sucedería, ella ya nos lo había dicho, a pesar que de duela, tenemos que acostumbrarnos, a no verla, a no sentirla, a no tocarla— un suspiro se escuchó de su padre, —Debemos ser fuertes por ella, por nosotros, por Andrés, y nuestros hermanos. Sabes que a pesar de todo, y de que no somos sus hijos el nos acogió aquí, además, ella está en todo momento contigo, y está en un mejor lugar, Felipe. Ella sufría en casa, con las palabras hirientes de mis padres— dijo.

Y otra vez tiene razón. Mí padre en si todo el momento le echaba la culpa de lo que sucedía en su vida. Y mejor no recuerdo todo lo que sucedía, ya que el en si la trataba muy mal. Supongo que fue un error casarse con mí padre.

—Lo se, pero es difícil llamarle papá a él...— dije y me calle ya que la puerta se abrió. Sopuse que era Andrés, para decir que la cena estaba pronta. Pero cuando la persona entro completamente mí sangre hirvio.

—Hijos— dijo "mí padre", el cual nos abandono.

Ninguno de los dos dijo nada, absolutamente nada. Lara se acomodo a mí lado y lo único que yo hacía era fulminarlo con la mirada.

—No se asusten— dijo de nuevo. Mí sangre ya hervía y estas palabras terminaban de hacerme enojar.

—Vete— dije con odio. Lara tomo mí brazo, no entiendo el porqué, pero me incomodaba un poco, ya que nunca tuvimos ningún tipo de contacto, solo cuando nos peleamos o abrazabamos pero no era común ningún tipo de toque entre nosotros.