°Disfraz De Ángel° (YAOI)

Capítulo 5 (PASADO)

PASADO

Narra Yael

Se que muchos se preguntaran muchas cosas, muchos cabos sueltos que no han sido resueltos aún, por eso contare todo desde el principio.

Bueno, antes de empezar, explicare un poco como es mi mundo, por que ningún mortal es capaz de percibirlo y claro si tu eres humano, jamas en tu vida lo has visto, y estoy seguro que ni siquiera lo has imaginado.

En mi mundo existe el cielo donde habitan los angeles y el inframundo donde habitan los demonios.

Para subir al cielo necesitas tener alas y volar, para bajar al inframundo necesitas entrar por una de las cinco cuevas que hay en el desierto, las cuales te dirigen a lo mas profundo de la tierra, estas cuevas no pueden ser vistas ni percibidas por los humanos.

El desierto es lo que hay entre el cielo y el inframundo, es un desierto que se encuentra en la tierra, incrustado en el mundo humano, si llegas a cruzar todo el desierto, podrás llegar fácilmente con los humanos. Dejando eso claro, comenzare.

Como ya saben, soy un diablo, una especie un tanto similar a los demonios, (En esta historia aunque diablos y demonios comparten el mismo hogar y se dedican a lo mismo; los diablos se caracterizan por ser traviesos y mas energéticos que los demonios).

Lo único que me diferencia de todos los demás diablos y demonios que existen en el inframundo es mi gran y absurda debilidad, es como si hubiera nacido en una especie equivocada, jamas fui bueno para hacer el trabajo para el que se supone fui creado.

Aunque llegue a corromper a unos cuantos humanos (tres para ser exactos) me resultaba demasiado desagradable hacerlo, lo detestaba.

Fue así como todos se burlaban mucho de mi, era incapaz de hacer algo bien en el colegio maligno.

Hasta que un día me canse de todo eso y decidí salir fuera del inframundo, para poder demostrar que no era tan inútil como decían.

Salí del inframundo, por primera vez estaba tan lejos de casa, completamente solo, sin siquiera pensar en lo que me podría pasar.

El sol ardía sobre mi cabeza, la arena quemaba mis pies, mis alas no habían aguantado llevarme todo el camino volando y estaba cansado de caminar.

Me detuve arrepentido de haberme salido de esa manera, justo cuando planeaba regresar, un viento vino hacia mi con violencia, en ese entonces no sabia lo que ocurría, pero ese viento fue provocado por las alas de un ángel.

Cuando el viento se calmo, ví a Zatu parado en frente de mi, esa fue la primera vez que lo ví.

Después de tener aquel encuentro con Zatu, en donde intento exterminarme y donde Gadi llego a tiempo para salvarme.

Logre escapar de la batalla que se provoco en ese mismo momento, sin que nadie me viera excepto Gadi al que oí gritar mi nombre mientras corría.

En el colegio maligno, los estudiantes tenían una pequeña habitación donde podía vivir en compañía de otro compañero, por suerte mi habitación había sido solo para mi por casi dos décadas.

Me encerré en la habitación, para pensar un poco mejor lo que había pasado.

Me tire en el suelo abrazando mis rodillas para tranquilizarme.

Aun tenia el corazón muy acelerado por el miedo, y mi rostro estaba lleno de gotas de sudor.

No podía dejar de pensar en ese ángel, sentía como al recordarlo mi rostro comenzaba a sentirse caliente.

Cubrí mi rostro con mis manos. --p-pero, ¿que es... lo que me esta pasando?-- dije viendo como aun mis manos seguían temblando.

--¿qué... qué es esto?-- presione mis pecho con mis manos, el cual se sentía extraño.