Ángel de la Muerte || מלאך המוות

Capítulo 3

Persecución

En sus sueños, Louis corría, corría y corría.

El sueño le taladró la cabeza durante todo el día. Incluso cuando Zayn le había informado que Jamie había sido gravemente herida y estaba en el hospital. Parecía tener los pies en la tierra, pero no su mente. Sólo pudo volver a la realidad cuando lo vio entrando por la puerta.

Llevaba una gabardina tan negra como sus botas y los guantes. Los rizos saltaba al son de sus pasos y los hoyuelos en sus mejillas se marcaban con cada sonrisa. Y no exageraba cuando decía que cada par de ojo que estaba en el patio principal de la escuela se había interesado en el extraño y desconocido sujeto que ingresaba por las amplias puertas de cristal.

«Pero, ¿qué carajos hace él aquí? La noche anterior me había dicho que nadie podía verlo. Es un idiota mentiroso. Sólo quería despistarme. ¿Quién eres?»

—¡Louis! —Zayn lo sacudió desde los hombros y Louis pareció reaccionar—. ¿Te sientes bien? Parece que no estabas aquí cuando ese chico entró. ¿Lo conoces? Sólo mira esto. Todos están chismorreando sobre el chico ese.

—Por supuesto que no lo conozco. Sólo... Me pareció que no deberían dejarlo ingresar con esa vestimenta. Es... inapropiada.

—Por favor, viejo. No seas tan nerd. El año pasado yo ingresé con una capa de cuero y Niall estaba literalmente desnudo. ¡Dios! Se le veía el trasero. Sabes que es verdad. Así que no deberías preocuparte por un chico que... no conoces. —El tono de voz de Zayn demostraba duda y Louis lo percibió.

—Sí, tienes razón. Deberíamos irnos... —Intentó girarse pero un par de manos lo llevaron al suelo. Su trasero se golpeó contra las baldosas y sintió una pequeña quemazón en la zona. Bufando se puso de pie—. ¿Se puede saber qué cojones te sucede?

Billy tenía una sonrisa burlona pintada en la cara y las horribles espinillas en su rostro parecían a punto de estallar. Era, sin duda, una visión asquerosa.

—Juraría que eras una de las chicas. Es que, en serio, Louise, tu cuerpo es tan afeminado como lo es la vagina de una chica. Cualquier persona diría que es todo una obra de porcelana a la que no se le puede dañar —dijo, esparciendo su veneno.

—¿Qué es lo que quieres?

—Sólo venía a decir lo siento por lo de tu amiga. Podremos ser enemigos, pero ello no quita mi lado de humanidad. Por lo tanto, guardé mi orgullo en una pequeña cajilla de cerillas y la atesoré en un cajón.

Louis pareció no entender. Miró a Zayn con el ceño fruncido.

—Gracias por preocuparte, Billy. Pero debemos irnos —dijo el moreno y tomó a su pequeño amigo del brazo—. Ya sabía que no me prestabas atención. Te dije que Jamie fue asaltada ayer por la noche y fue gravemente herida. Por ello, ni ella ni Niall están aquí ahora.

El castaño empalideció. Se acomodó la mochila y empezó a caminar hacia la puerta.

—Oye, Louis, ¿a dónde vas? —le espetó Zayn, tratando de seguirlo.

—¿No es obvio? La novia de mi amigo está herida y yo simplemente me quedó en la escuela, perdido en mi propio mundo y sin hacer nada. Mejor quédate y anota los apuntes del día. No quiero perder más de las clases.

—Ni de coña. Si vas, yo te acompaño. Las cosas no están exactamente bien para que vayas solo...

Louis se detuvo y se giró.